Esencia Natural (Loki x Lectora)

Capítulo 19-Ardiente determinación

Finalmente llegó el día de la coronación del príncipe Thor, durante esa mañana el dios de las mentiras se encontraba nervioso, dando vueltas en los pasillos del palacio y evitando a toda costa, pese a los deseos de su corazón, a la encantadora sacerdotisa. Fue entonces, como solía sucederle, cuando apareció a sus espaldas su madre amada, quien con una mirada de compasión mostró conocimiento de sus más ocultos y profundos sentimientos.

-Se te acaba el tiempo ¿No es cierto? -Preguntó Frigga con dulzura a su hijo.

Loki se volteó, nervioso, hacia su madre.

-No quiero lastimar a nadie-Respondió.

Frigga rió ligeramente.

-Mira quien le gustaba jugar de indiferente cuando eras niño y he aquí, ahora tomas decisiones considerando a otros.

-Siempre he sido un gran mentiroso-Dijo Loki con una media sonrisa-La verdad es que siempre me ha importado lo que piensen los otros.

-Lo sé...

Frigga se acercó a su hijo y le extendió un brazo.

-Ven, camino conmigo por el jardín.

El dios de las mentiras sucumbió a esta petición y juntos caminaron en silencio mientras que atravesaban las flores, los árboles y los arbustos. Fue entonces cuando, en la privacidad de la naturaleza, Loki no pudo evitar desbordar sus sentimientos delante de la persona en quien más confiaba.

-No quiero perder a mi padre, ni a mi hermano ni a...-Su voz comenzó a temblar.

A su madre le sorprendió su vulnerabilidad, pues a pesar de la cercanía entre ambos, expresar su aflicción delante de otros no era el fuerte de Loki. Entonces Frigga, como se comporta una madre llena de ciego amor por sus hijos, deseó fervientemente apartar su dolor al acariciar su rostro, pero, en medio del temor, ni siquiera las más dulces muestras de afecto podían apartar el dolor que yacía en el pecho frío del dios de las mentiras.

-Ssh...ssh...-Soltó Frigga tratando de tranquilizarlo-Mi niño...no te aflijas, aquí estoy.

Ambos se sentaron en una banca, su madre lo sujetó entre sus brazos como en sus tiernos días de juventud.

-Ahora entiendo un sentimiento que no había experimentado antes madre...-Confesó Loki-El de tenerlo todo y temer perderlo o incluso saber, qué debe perderse para conservar otra cosa que también se ama.

-Créeme mi niño, que no todo esto es tan malo como parece, logra calmar tú corazón y te concederé dos noticias que quizás apacigüen tú turbada alma.

Loki se apartó de los brazos de su madre y levantó su rostro para que el azul del mar y el verde esmeralda se encontraran en una mutua complicidad.

- ¿Qué noticias?

Frigga sonrió sutilmente.

-Tú dilema se encuentra en el amor que le profesas a tres personas: Tú padre, tú hermano y tú amante. Pues bien, si no quieres perder a uno por el otro; Al menos reduciré tú aflicción y espero incluso apresurar tú decisión.

Loki miró a su madre con curiosidad y a la vez, esperanza, pues por el animo de Frigga esperó recibir buenas noticias que calmaran su turbación. ¡Oh! Había sido su encantadora amada quien le había enseñado a esperar cosas tan buenas, que ahora con sus fuerzas se aferraba a la esperanza.

-Basta de suspenso madre, dime lo que sabes. 

-Mis dos hijos se han enamorado apasionadamente, como una madre desea ver así a sus hijos.

-Lo sé, madre- Contestó Loki desilusionado-Pero no creo que sea deseo de ninguna madre ver a sus dos hijos enamorados de la misma mujer, inclinados a la felicidad o sufrimiento por una misma.

-Sí, sé que es lo que ninguna madre querría y yo tampoco, afortunadamente no tendré que saberlo, porque en este caso eso no es lo que pasa. Mis dos hijos aman a mujeres tan distintas, que los sentimientos que compartirán por su hermano no serán de rivalidad si no de felicidad.

-¿Qué quieres decir?

-Lo que siempre hemos sabido, tú hermano, tras no ser honesto consigo mismo, ha negado tercamente sus sentimientos hacia su más leal compañera, su mejor amiga y la mujer que más hermosa ha encontrado desde sus días más tiernos.

Gracias a su perspicacia, no fue necesario que Frigga dijera más pues Loki ya había entendido las palabras de su madre.

- ¡Thor y Sif! -Dijo con alegría levantándose de su asiento.

- ¡Así es!

Loki comenzó a dar vueltas, conmocionado por la noticia que, en realidad, era bastante evidente.

- ¡Por supuesto! ¡Sif! ¡Siempre ha sido Sif!

-Desde que los dos eran unos pequeños guerreros.

- ¡Esto es genial! Me has quitado un gran peso de encima madre, pero...-Dejo de dar vueltas y se volteó hacia Frigga- ¿Le corresponde a mi hermano? ¿No hay riesgo de que el rechazo que lo haga desear luchar nuevamente por los sentimientos de lady T/N?

-No lo hay, mi primogénito es fervientemente correspondido.

- ¡De verdad! ¡Esto es-! ¡El universo se ha movido a mi favor! ¡¿Entonces Thor no esta enamorado de mi lady...de mi hermosa y encantadora...?!

-No mi querido, no era más que un capricho, quizás incluso una idea que se metió a sí mismo para complacer también a tú padre.

La mención del padre hizo que Loki se olvidará de su reciente esperanza y se echara desilusionadamente sobre el asiento junto a su madre otra vez.

-Sí, mi padre...

Frigga suspiró y colocó afectuosamente su mano sobre el hombro de su hijo.

-Te he dado una noticia y he aquí la otra; No puedo adivinar los sentimientos de Odín, pero puedo, por el contrario, convencerte de que, el amor es mucho más de lo que has leído en los libros o escuchado en leyendas...

El dios de las mentiras permanecía mirando hacia abajo, aún afligido. Frigga prosiguió.

-Escucha hijo; Quien nos ama de verdad siempre perdonará nuestros defectos. No buscará siempre que cumplamos con sus expectativas. Tú padre te ama, si te odia ahora por el amor profesado a lady T/N, algún día aprenderá a perdonarte, por ende, el amor que te profesa como un padre a un hijo no se perderá. Y si no es así, entonces mi niño, con la más firme verdad debo decir que quien no es capaz de perdonarte tampoco te sabrá nunca amar de verdad y, por lo tanto; Ningún amor, o supuesto amor, ni el que tú padre pueda presumir tener por ti, será digno del que le tengas, porque sería un amor falso, un amor por el que hay que rogar y eso, no sería amor de verdad. Tú mereces amor de verdad, no menos que eso. Sé libre de tomar la decisión que desees, no sólo por complacer al otro, sé libre de equivocarte y ser tú...Sabiendo esto, hijo, si estas condenado a vivir con el odio de tú padre por el resto de los días, pues que así sea.

Una vez más, los consejos sabios de su madre habían revivido la alegría de la que creyó verse privado y disfrutó entonces de la revelación que nos llena de certeza cuando se sabe que se tiene que hacer y por casualidad se une, también, con aquello que se quiere hacer.

Loki se levantó con determinación, mirando a la naturaleza, mirando al cielo...

-Me escojo a mí madre-Declaró-y como pasa cuando se ama tanto a alguien que no puede ser de otro modo, al escogerme a mí, escojo también a T/N Ambár, ahora y siempre.