The Colors (SorMik) [Concluido]

El Color de Familia

Narrador Sorey:

— ¿Te sigues sintiendo mal, Mikleo? —pregunté mientras lo veía llevarse una mano a la sien y apretando con fuerza esa zona.

—He dicho que si, solo es... Un mal sentimiento y migraña ¿vale? No te alarmes.

Llevaba así durante cuatro días, y me estaba preocupando. Se negaba a ver un médico, aún cuando la tía Muse le dijo que no sería ningún problema crear un expediente médico, identificación y actas que él no poseía. Juraba que si no mejoraba para mañana lo llevaría arrastra aun doctor.

Durante las clases solo dormía ¿tan mal se sentía?¿era esto peligroso? Estaba asustado. "—no dejo de oír cosas raras—" me dijo precipitadamente ayer. ¿Qué clase de enfermera era esa? Mikleo casi se cae a medio pasillo mientras íbamos a reunirnos con Rose y Alisha. Estuve a punto de considerar no encontrarlas hoy y llevarlo a la enfermería pero de pronto Rose apareció precipitadamente por el pasillo que transitamos sujetando la mano de Alisha.

—Oh Rose, justo a tiempo, creo que hoy no podre...

—¡¡Calla,calla!! Escucha, será rápido ¿ok?—exclamó antes de tomar a Alisha por los hombros y ponerla cerca y frente mío.

—R-rose, en verdad no es buen momento...

—Estoy bien Sorey, ya no siento mareos... Incluso, creo que me siento mucho mejor que en estos últimos días.

Me hallaba nervioso, no le creí ni una palabra así que me dispuse a llevarlo a la enfermería, pero fui retenido por Rose que me rogó esperara solo unos segundos. Alisha no decía nada y traía la mirada perdida en el suelo. Mikleo me repitió nuevamente de que sentía de maravilla y me dio un buen lapo en la cabeza por intentar llevarlo ha arrastra a un lugar al que él se negaba a asistir. Eso me dejó bien claro de que se sentía mejor y por fin le puse algo de atención a las chicas. Rose me miró asada del mismo modo en que Mikleo contemplaba a Alisha.

—Y-ya bueno..., ¿qué es lo que querían decirme?

—Bu-bueno yo...—dijo casi en un susurro. Rose la movió un poco desde su espalda, y sin más Alisha me estiro una caja delgada.

Mikleo sitio de brazos cruzados mirando la escena y solo me limite a recibir el regalo.

—Es una ofrenda en señal de remordimiento—explicó—Sin embargo no es excusa suficiente para haber tomado sin permiso lo que tomé de tu casa.

En ese preciso instante me alarme y abrí aquella caja de forma precipitada, apenas empecé a extraer aquello que parecía un recuadro de su interior y me percate de lo que era. Este era el retrato de Mikleo, aquello que le daba vida. Como protagonista del retrato, Mikleo se alarmó al verlo y estuvo a instantes de ir directo ha... hacer algo que no puedo imaginar que sería.

—¡Lo sabía! ella es una ladrona, una mala persona, siempre busca hacer daño a alguien—acusó sin piedad mientras que Alisha se encogía de hombros por la culpa

—¡Fui yo!—grito Rose— yo lo tome de tu casa, Alisha me dijo de la idea y le dije que sería estupenda para redimirse. Si te ha molestado que haya tomado algo tan importante para a tus espaldas, yo soy la culpable—. Lanzó una mirada de irritación al acusador.

Volví a mirar el retrato, en verdad no había notado la falta de él. En primer lugar, a sido mi culpa este problema por mi falta de cuidado, es verdad que tenerlo en un archivador no es tenerlo descuidado, pero mi desatención a él había traído caos. En segundo lugar, si Rose lo tomo eso fue hace 5 días... que es aproximadamente fue el tiempo en que Mikleo empezó a tener malestar. Y durante todo ese tiempo, Alisha pudo haber hecho algo: romperlo, quemarlo... Sino hizo algo por el estilo es porque en verdad no tenía esa intención. ¿O si?