we are the same

CAPITULO 20: ES MÁS QUE NECESARIO

—Si, tal vez lo hice —contestaba descaradamente

—No sé si lo sepa. Casey se fue de Filadelfia.

La doctora ellie trataba de mostrarse lo más clara posible. Después de irse de la casa de Michael, por alguna razón decidió ir con el tío de Casey.

—Bueno, no me sorprende. Ella siempre huye. Además como demonios me enteraría, estoy encerrado en mi propia casa.

Sus ojos bajaron al tipo brazalete puesto en su tobillo.

—Debe ser desesperante tener esa cosa puesta.

—Es un mierdero arresto domiciliario —contesto dándole vuelta, casi dándole a entender que no le importaba.

—Ella fue acogida por una gran familia, pero al parecer se cansó de eso. Y tiene razón tal vez no sorprenda, pero ella se fue con alguien.

Y ahí fue cuando su expresión cambio

—¿Alguien?

—La horda. Casey se fue con su secuestrador.

Dió unos pasos atrás, su frente estaba empapada de sudor.

—¿Porque carajos se iría con ese peligroso hombre? —pregunto ahora con un tono entre mezclado de emociones de rabia, confusión

—Usted dígamelo —contesto sarcásticamente—. Ella dejo cosas aquí? No sé, tal vez.. la ropa que ella tenía cuando la horda la líbero?

—No lo sé, Casey empaco todas sus cosas cuando el trabajo social llego por ella. Esa ropa quizá la boto a la basura.

—Bien. Si no hay algo de ella que pueda ayudarme, creo que es mejor que me retire.

Dió media vuelta y bajo los pequeños y polvientos escalones para subir a su auto

—Oiga, esperé aquí. Regreso enseguida —john cerró la puerta y la doctora espero sin prisa. Si era algo relevante, valdría mucho la pena

—Esto.. supongo que es un diario, no lo sé. No hay muchas cosas. Pero durante el tiempo que Casey estuvo secuestrada me metía a su habitación y ayudar a la policía que me pedía algunas fotos, cosas que pudieran ser de ayuda, ya sabe.

Extendió la pequeña libreta a sus manos.

—Ella no trató de pedirlo de vuelta?

—Estaba rodeada en una multitud que la hostigaba de preguntas después de lo que le pasó. No creo que tuviera cabeza para recordarlo.

—Entiendo —dijo alzando la libreta en su bolso—. Debo irme, le agradezco nuevamente que me haya recibido a pesar de su situación y que me haya brindado ésto.

—Usted no es del servicio social. ¿De dónde viene?

—Soy ellie staple, soy psiquiatra. Yo fuí encargada de atender a Kevin junto a otros dos tipos en raven Hill memorial. Pero desafortunadamente pasaron cosas que seguramente usted ha visto o escuchado en televisión o radio.

—Escaparon. Claro que lo sé todo.

Ella trago saliva

—Si. Pero no crea todo lo que ve en televisión. La gente cree en la mayoría de porquerías que están en televisión, que aveces están manipuladas.

—Puede ser. Como sea, ¿Casey que tiene que ver en eso?

—Mas de lo que se imagina señor Cooke.

..

—Mierda! —sostuve el volante como si mi vida dependiera de ello. Realmente cagada de nervios