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Richie no se sentía dentro de su cuerpo, sino que flotaba en el aire. Como si una brisa caliente lo abrazara alejando su mente de todo lo conocido.
Al ver el rostro sonrojado de Eddie solo pudo sonreír como tonto antes de vomitar.

Eddie, aún emocionado, tuvo que dar un respingo antes de ayudarlo. Acarició su espalda.

-Mierda, Rich... -Kaspbrak pareció endurecerse de pronto a causa del miedo-  esto te pasa por ser idiota y alcoholizarte.

-Mira, Eddie -rió débilmente-. Parezco la niña del exorcis...

Y vomitó más. Eddie tuvo que correr la mirada para otro lado, sin dejar de frotar su espalda. Cuando ya se vio mejor Eddie se puso a inspeccionarlo.

-¿Cuál es el veredicto doctor besador K.?

Eddie negó rotundamente, ignorando el estúpido apodo.

-Estarás bien, no te preocupes.

Lo llevó a la rastras a su casa y por suerte al parecer Sonia dormía. Ya era una mujer grande, así que luego de tomar su pastilla quedaba dormida como un tronco.

Richie frunció el ceño cuando entraron al baño y Eddie cerró la puerta con el seguro.

Tozier estaba demasiado ebrio, y repentinamente tenía sueño, lo que provocó que sus reacciones sean aún más lentas y sus ojos luchen por permanecer abiertos.

-¿Te duele? -preguntó Eddie al curar la nariz.

-Te amo -dijo Richie al cabo de un rato, a punto de caerse dormido.

Eddie le dio una cachetadita. Sabía que estaba ebrio, pero que pronunciara esas palabras se sentía como algo más que genuino.

Al terminar le lavó la cara con sumo cuidado y ayudó a Richie a cepillarse los dientes.

-Eds, me siento tan cansado...

-¿Podrías no llamarme Eds?

-Podría, pero no quiero.

Kaspbrak, con demasiada pena, hizo una seña que Richie no comprendió.

-¿Eh?

-Que te quites la camisa vomitada. También los pantalones.

El pelinegro obedeció con mucha paciencia y sin pudor. Estaba demasiado ocupado pensando en besarlo, sin embargo acercarse requería mucho esfuerzo.
Casi sin darse cuenta Eddie se había cambiado a su ropa de cama y le extendió prendas.
Richie se las puso y cayó rendido en la cama.

-¿Cómo te sientes? -Eddie se sentó a un costado con preocupación.

Lo que en realidad quería decir era "perdón por lo que hice, fue estúpido. Yo también estoy algo borracho, ¿sabes?" Pero no. Porque no se lamentaba en absoluto.

-Tengo sueño.

Richie se había metido debajo de las sábanas y ahora las levantaba, una forma de indicarle a Eddie que hiciera lo mismo.

El castaño se acostó dándole la espalda, sin embargo al cabo de unos minutos sintió un brazo alrededor de su cintura.

Ambos se durmieron casi de inmediato.

~~~

Richie despertó abrazado a Eddie y recuerdos fugaces de la noche anterior inundaron su mente.

Vodka. Paliza. Eddie. Beso.

Parecía parte de un sueño, pero no, porque allí estaba: dormido en sus brazos, con el cabello alborotado y la respiración calma.

Forever Young ||REDDIE||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora