Capítulo 3

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-  A mi me parece uno más del montón, bueno el tío si está arreglado y lleva buena pinta, pero luego... Bah no se que le veis, un tipo común!

"claro que no Maquiavelo, para saber qué le vemos tendrías que ser mujer, o gustarte los hombres"

- Es la envidia la que habla Maqui, si fueras gay entenderías completamente qué tiene ese hombre...

- Eso es muy machista Sara, estas diciendo que solo un gay puede o tiene derecho de admirar a otro hombre? Entonces si yo comento que Richard Gere me parece un hombre atractivo se tiene que asumir que es porque soy gay?

- Oh por favor Maquiavelo!, a nadie en el mundo le parece atractivo Richard Gere ¡se realista!

Beatriz seguía observando a su ex jefe, sin duda los años no le habían afectado, incluso lo vio más atractivo que antes. Aún podía recordar el vértigo que sintió la primera vez que lo vio sonreír, una sonrisa dedicada a ella exclusivamente.
Había sido una muchacha asustada que sólo quería una oportunidad ante un mercado laboral que sólo buscaba caras y no cerebros.
Cuando llegó el segundo día a Ecomoda estaba más nerviosa que en su entrevista inicial, Betty no pensó que la volverían a llamar pero aquí estaba.

Su entrevista fue un cúmulo de absurdos, estaba nerviosa y sabía que debería no hablar tanto, Marcela Valencia se burló de ella y luego escucho como Don Armando la defendió.
En ese momento no había empresa por la que fingir un amor y urdir un plan.

A veces Betty sentía la hipocresía de su parte, es cierto que al principio Armando sufrió por tener que fingir, los besos, abrazos... Ella era fea y eso era imperdonable, Betty se había sentido morir cuando descubrió todo, que él la despreciara de esa manera por su físico era doloroso en extremo, aunque no había esperado una loca atracción de esa manera y creía que el doctor sentía de su parte más una atracción intelectual a su persona, no por eso no iba a esperar que hubiera algo en su físico que a él le gustara. Ella pensó que quería al doctor por su defensa, por que vio más allá de su físico, porque fué una de las pocas personas que la defendió y le dio una oportunidad.
Ahora lo veía de otra manera, porque entonces no se enamoró de Nicolás que también la defendía de todos? O del chico que trabajaba en la carnicería que siempre tenía una palabra amable para ella, un guiño de ojos y un "que tenga buen día bonita", o su ex jefe en el banco Montreal, Don Becerra, que también fué amable y vio su capacidad y no su persona.
Betty se había sentido muy dolida con Don Armando por no poder ver más allá de su físico.
Pero era injusto de su parte pedirle algo que ella tampoco había hecho, porque ella se enamoró de él porque le gustó lo que vio, deseaba estar cerca suyo, tocarlo, abrazarlo, olerlo... Betty se había sonrojado la primera vez que imagino como sería besarlo, y luego poco a poco las fantasías fueron a más, imaginar besarlo no fué suficiente y agregó más y más hasta que empezó a pasar muchas noche imaginando como sería su cuerpo debajo de sus trajes, morderle el cuello, lamer su piel, acariciarlo íntimamente, ver su sexo... Hasta que la excitación por él llegó a tal punto que sólo encontraba alivio tocándose.

"Aún te preguntas todas esas cosa Beatriz, porque a pesar de haber hecho el amor con él nunca te atreviste a nada de eso, solo te dejaste hacer... Y ahora?, Oh Dios, ahora lo ataría a la cama y lo haría morir de placer!"

- Bueno voy a por mi presa!

Sarita apago el cigarro en una maseta, guardo su boquilla en su diminuto bolso, se subió los pechos y se bajo el escote, arqueo la columna y con un bamboleo de caderas y un movimiento de cabeza para hacer volar su pelo se fué en dirección al grupo.

"Oh Dios mío, Patricia Fernández acaba de poseer a mi amiga... Lo siento Sara, pero con esa estrategia vas a traerle malos recuerdo a tu presa"

- Apostamos cuánto tarda Sara en obtener una cita Bea?

Betty se molesto, Sara y Armando en una cita?

"Primero tendrás que pasar sobre mí Sara amiga mía, si alguien tiene una primera oportunidad soy yo, tuve que pasar por mucho para llegar hasta este momento y estar lista para él"

- No apuesto Maqui, ese hombre es algo serio y además estoy segura que Sara se quedará con las ganas...

Betty se volvió a la escena y vio como Sara abordaba a Armando, él pareció dudar un momento y luego la reconoció, entonces le tendió la mano y la saludo, muy casta y amigablemente.

"El Armando Mendoza que yo conocí no hubiera perdido la oportunidad de saludarla galantemente con unos besos"

Sara empezó su ritual de coqueteo y Armando metió sus manos en sus bolsillos y mantuvo la distancia, una sonrisa pequeña era todo lo que Sara estaba obteniendo.
Unos minutos después una joven que no parecía pasar de los 25 años se acerco y con un suave apretón en el brazo llamo la atención del doctor.
Le hablo al odio, el doctor asintió, le dijo algo a Sara y se dio la vuelta seguido por la muchacha que cargaba con unas carpetas y seguía al doctor como un cachorrito emocionado.

" Quién es esa chica? Vamos Armando demuéstrame si cumpliste con tus palabras, por favor, esas palabras me abrieron el mundo hace años, no dejes que hayan sido en vano, eso no puede haber sido una ilusión"

Sara volvió con cara de pocos amigos, sacó otro cigarro y mientras buscaba el encendedor se terminó su copa de vino de un tirón.

- Que pasó, el futuro padre de tus hijos te pidió ya el divorcio?

- Cierra el pico Maquiavelo, nadie te ha pedido tus estúpidos comentarios... Maldita sea, esa niñata tuvo que interrumpir.

- Quién era ella?

- Su secretaria, es una maldita niña molesta, es obvio que está loquita por los huesos de su jefe y no quiere que nadie se le acerque, hizo lo mismo el día que lo conocí.

"Clásico, la secretaria enamorada... Hay niña no te puedo culpar, muchas estuvimos en tu lugar"

- Dime Sara, a que se dedica tu romeo?

- Es el Director de operaciones y administraciones de producción de GC, “Global Communication”, una multinacional con sede en Berlín que se dedica a las comunicaciones, parece ser que son los que proveen a las empresas de telefonía e Internet de gran parte de Latinoamérica, vienen del Mobile World Congress de Barcelona, quieren invertir en redes en España y ahí es donde entramos nosotros... Bueno Beatriz tu eres la genio financiera...

- Pensé que dijiste que venían de Colombia, pero has dicho que la empresa está en Berlín.

- Bueno si, el gerente de RR.HH y mi futuro marido son colombianos y son quienes se encargan de controlar que todo este en orden, parece que una vez al año viajan a Sudamérica, y este año vienen con algunos gerentes de sus sedes para integrarlos.

"Berlín! Hace dos años estuve una semana ahí, el frío fue insoportable... Así que ahí es donde has estado Armando"

- De todas maneras debemos mezclarnos ya, no quiero que el señor Vázquez nos vea de cháchara aquí, hemos venido a trabajar. Maqui por favor quiero que localices al gerente y preveas que necesita y le ofrezcas todo, ya sabes transportes, nuevos alojamientos, viáticos, tu maldito gato si hace falta y organices una reunión en las oficinas... Beatriz tu y yo nos pegaremos al Director y le contaremos que podemos ofrecerles, venga a trabajar.

"Bueno Betty llegó el momento, no estoy nerviosa, estoy emocionada, si realmente quiero verlo, pero... Y tu Armando Mendoza, quieres?, como me recuerdas?... Han sido 5 largos años, no es que haya pasado todo este tiempo viviendo por y para ti, continúe con mi vida, me descubrí, fui y soy feliz y no hice un stop esperándote, dejé que todo lo que tenían para ofrecerme me fuera dado, no rechace nada y no me sometí tampoco... Pero he aquí la cuestión mi querido doctor, no es que yo no pueda vivir sin ti, no es que yo te necesite, no es que yo solo me guarde para ti, no, es que tengo una espina clavada en mi corazón y una duda constante que no me deja, que hubiera pasado doctor, como hubiéramos sido tú y yo juntos? "

Sara llegó a donde estaba el grupo reunido, la charla y el ruido de los vasos se mezclaba con la suave música chill out del fondo, la risa de uno por aquí y el silencio de otro por allá.
Armando estaba de frente a ella mirando un dispositivo en la mano, a su lado la niña que lo miraba como un cordero degollado hablándole al oído suavemente.

Sara encantadora como siempre saludo cálidamente al grupo, él levantó la vista y miró a Sara, algo parecido a la molestia pareció cubrir sus ojos y desaparecer rápidamente, y entonces ahí estaba, el contacto, una mirada y...

Si, alegría, verdadera y pura.

Armando la miró y en un instante Betty volvió a esa noche en el Almirante cuando se rieron hasta las lágrimas.
Armando sonrió con una pregunta en sus ojos y Betty tomó la iniciativa.

"Esta vez seré yo quien estaré al mando, si mi doctor usted no sabe con qué mujer se acaba de encontrar"

Betty dio un paso adelante y estiró la mano.

- Armando Mendoza, que placer volver a verlo.

Un tiempo después. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora