Otro camino (Hawks)

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-¡No puedo quedarme simplemente a esperar, necesito ir a buscarla!- soltó con desesperación.

-Te entiendo, es mi amiga y quiero tenerla de vuelta- soltó un suspiro después de ver la espalda del alado-. Pero por ahora, tienes que descansar y mañana temprano ir a buscarla.

-No puedo descansar mientras quien sabe que le estén haciendo ahora- apretó tan fuertes sus puños que sus uñas se enterraban en su piel y se ponía de un color blanco.

-¿Crees que podrás ayudarla sin tener todas tus fuerzas? ¿Si la llegas a encontrar que vas hacer si tienes que pelear y no tienes toda tu fuerza? La situación puede llegar a empeorar- se acercó al héroe y tomo hombro para girarlo hacia ella-. Por favor, descansa, ve a dormir.

-Eso quiero, pero no puedo- dijo frustrado, su mirada se encontraba en el piso, por lo que la castaña no pudo ver su cara. Se acercó a ella y recargo su frente con su hombro-. Cuando voy a mi departamento trato de dormir, pero no lo logro, se me hace imposible, no puedo dejar de pensar en ella y lo que le puede estar pensando.

Lo abraza con fuerza, sabia como se sentía Hawks, el tener un gran nudo en la garganta, sentirte imponente, ya que no sabes que hacer en este tipo de situaciones y que, aunque estés buscando con desesperación, no sabes por donde comenzar o lo frustrado que te encuentras por no tener ninguna pista de donde se podría encontrar y que lo único que puedes hacer es esperar, aunque eso llegue a parecer una eternidad y te sientas inútil.

Lo tomo del brazo y lo sentó en el sofá que se encontraba a unos pasos donde se encontraba ellos, lo dejo un rato solo para ir al cuarto de la albina y tomar su almohada y sus sabanas. Fue a ver al alado y lo vio con la mirada perdida en la mesa de centro, a simple vista se podía ver que no estaba bien, se encontraba pálido, logrando destacar más sus marcas en los ojos. Cuando se acercó dejo la almohada y las sabanas a un lado de él.

-Trata de dormir, mañana temprano te haré algo de desayunar, ¿sí?- lo miraba con preocupación, cuando alzo su cabeza para ver a su amiga, solo le pudo dar una pequeña sonrisa con tristeza-. Descansa.

-Gracias- soltó haciendo que su amiga apenas lo escuchara por lo bajo que lo dijo.

Se fue de ahí, dejando al rubio ceniza solo en el sofá, quien no quitaba de poner su mirada, se veía que solo se lamentaba. Se recargo y vio el techo blanco, después de unos segundos tomo las sabanas y las almohadas para acomodarse y tratar de conciliar el sueño, de repente un olor vino a sus fosas nasales y se dio cuenta de quién era esas sabanas, recordaba el cabello corto y blanco como las nubes, sus ojos grises que le encantaba mirar. Quería verla, quería ver cuando se enojaba o cuando se sonrojaba, cuando se quejaba de lo mal hecho que hacen un café o lo tanto que demostraba que le encantaba el rollo de crema, su favorita, el de fresa.

Cada recuerdo se aprecia en su cabeza y sin darse cuenta, poco a poco cerraba los ojos, hasta quedarse dormido.

4 días antes

-Estos son los lugares posibles donde se podrían encontrar- marco cinco puntos en el mapa un chico de cabello negro-. Solo logramos que uno nos ayudara y solo nos dijo las descripciones que escuchaban cuando los demás hablaban sobre ese lugar, así que solo quedan estos cinco lugares.

-Muy bien, entonces nos dividiremos en cinco equipos- dijo Hawks mientras tomaba el lugar del chico, que era enfrente de todos los que se encontraban en la sala-. Solo se ira a confirmar que sea uno de estos lugares, para después planear un plan. ¿Entendido?

Todos afirmaron al mismo tiempo, después de eso salieron de la sala, dejando solo a Hawks y Hayami, él acomodaba los papeles que se encontraban en una mesa, para guardarlos en un folder amarillo.

-Todavía no me acostumbro a verte así- dijo con una sonrisa mientras se acercaba la alado.

-¿Cómo?- pregunto confuso.

-Tan serio y dando órdenes, siento que no es tu estilo- dijo haciendo que los dos llegaran a reírse.

-Bueno, me iré a mi oficina para hacer los equipos e ir lo más pronto posible.

∆

-Todos están en sus posiciones- comunico la albina.

-Recuerden, solo tienen que vigilar- dijo Hawks al otro lado del comunicador.

-Por cierto, Hawks- se mordió la una de su pulgar derecho mientras veía el pequeño edificio que se encontraba enfrente de ella, se ocultaba a una distancia donde no podrán ver fácilmente-. Quería hablar contigo.

-¿Sobre qué?

-Sobre... la otra noche- trago con fuerza, sabía que tenía que mencionarlo antes, pero no pudo hablar bien con él.

Tomo por sorpresa al rubio ceniza que se distrajo un poco en su trabajo, pero después de unos segundos siguió con su trabajo.

-Me gustaría hablarlo después de que esto termine- los nerviosas la comían por dentro, se pegó mentalmente por sacar el tema-. Quisiera saber s...

La comunicación se interrumpió, dejando a un frustrado a Hawks, ¿qué es lo que iba a decir? Una parte de él se alegró y otra parte estaba con los nervios de punta, pero todo se fue para abajo cuando escucho que alguien gritaba del otro lado.

-HAWKS, NOS DESCUBRIERON- grito una voz femenina, pero no era de la albina, lo que hizo que se asustara-. Dejaron inconsciente a Hayami y se la están llevando.

Sin pensarlo dos veces, salió de su escondite y voló lo más rápido que pudo, dejando a sus compañeros confundidos por dejar su posición, sentía como el frió recorría todo su cuerpo y no solo era por el aire.

Quería llegar.

Tenía que llegar.

No permitiría que alguien se la llevara, que se la arrebataran en tan solo unos segundos. Nunca se lo perdonaría. Especialmente porque nunca pudo decirle lo que sentía, directamente.

Pero cuando llego, era demasiado tarde, vio a los héroes y lo miraban con lamento, otros no le dirigían ni la mirada por lo mal que sentía por no impedir que se la llevaran.

-Lo siento, Hawks...