Cuando estaba en la sala alguien tocó la puerta, eso es raro. Me dirigí hacia la puerta y la abrí. Era mi mejor amiga, mi confidente era Alice Cullen la hermana de Edward.- Hola Bella- me saludo al ver mis ojos con lagrimas ella fue y me abrazo- lo lamento Bella debía decirte que Edward había vuelto y no solo.
- No importa Alice, estare bien- ella me miro y me agarró del brazo y nos dirijimos al segundo piso.
- La viste?
- Si la vi están en la piscina, le vi besarla.
- Lo siento- deje que las lagrimas salieran abrazada a Alice, noce cuanto tiempo pasó.
- Ya vasta de tanto sufrir- me animo Alice.
- Esta bien- trate de soñar convincente pero no funcionó.
- Nos vamos de compras- dijo de un momento a otro le mire asustada. Pero ella se rió de mi expresión de susto.
- Exelente eso me distraera un poco- dije pues sabía que no podría escapar de ella.
- Exacto, ve busca tus cosas que nos vamos.
Le hice caso sin decir media palabra, porque queria salir de está casa. Cuando estaba a punto de abrir la puerta de mi habitación alguien me agarró de la mano. Sentí una corriente eléctrica pasar por mis venas, sólo él podía causar esa reacción en mi. No me quise dar la vuelta No quería verle no queria que me biera con mis ojos inflados de tanto llorar. El se dio cuenta que no hiba a darme la vuelta para mirarale a la casa así que hablo lento y se noto la tristeza en su voz.
- Lo siento, mi intención no era hacerte daño, no quise causar te está pena.
No le mire, no le conteste estaba mirando mi mano que el aún la tenia en las suyas.
- No es tu culpa- le dije al cabo de unos largos minutos- tu pudiste superarlo, pero algunas personas duramos mas con la herida. No todos somos iguales, pero al menos uno de nosotros pudo superar este trauma.
- Por favor mirame- no le hice caso y me solté de su agarré.
- Eh de irme Edward.
- No te vallas, quédate- me suplicó.
- Sólo saldré un momento, necesito alejarme de aquí, quiero estar sola, necesito estar sola.
Sin decir mas nada abrí la puerta y entre a buscar mi bolso no me di cuenta de que el seguía en frente de mi puerta con la mirada perdida, me moría por ir a abrazarle, pero no quiero que se repita la escena anterior. Salí de mi habitación y cerré la puerta, pero el seguía parado y eso me impedia el paso, el problema fue que al cerrar la puerta quede frente a el.
- Estas lista- dijo Alice, eso pareció despertar a Edward de su trance.
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Me rompieron el corazon [En edición)
RomanceLa vida te da golpes duros, pero hoy personas que aprende a vivir con ellos Yo no puedo sobre llevarlos Soy Isabella Swan y esta es mi historia Los personajes no son mios; son de la autora Esthefanie Meyer