Carum, 2019
Gaspar
No pegué un ojo en toda la noche, repasando una y otra vez la noche con Isla, y preguntándome si lo de nosotros había sido o no real.
¿Qué era eso que sentía? Con mi mano acaricié mi pecho, tratando de liberar la presión creciente.
Si los libros no hubiesen descrito tan bien lo que se sentía al perder un amor, entonces no habría podido reconocer que eso era lo que me pasaba. Sentía el corazón apretado.
La imagen de Isla y nuestros momentos juntos bombardeaban mi mente, era como una tortura. Yo no quería hacerla sufrir. Y no lo quise así desde que entró a mi habitación y se llevó uno de mis libros favoritos. No era mi objetivo, sí sacarla de Carum...hasta que...
¿Hasta qué?¿Qué me pasa?
Sacudí la cabeza, como si eso hiciese que mis pensamientos se ordenaran, pero lo único que hacían era recordarme las veces en que me preocupé por ella y que fui honesto. Las veces que le conté cosas que nadie más sabía, cuando que la besé con tantas ganas que me parecía ilógico que fuese real, el odio que sentí cada vez que la vi cerca de Gastón o lo confundido que me sentí al saber que estuvo con Gustavo y luego cuando se fue con él.
—Mierda. —Negué con la cabeza. ¿Cómo fui tan ciego ante mis propios pensamientos y acciones?
¿La noche había sido real?
Me sentía un idiota con lo que me demoré en asumir que no solo Isla me gustaba, sino que estaba completamente enamorado de ella. No fue fácil, y tuve que verla alejándose de mí, odiándome y sin querer verme, para caer en cuenta que todo lo que hice era por que no quería tenerla lejos de mí.
Yo estaba siendo más real que nunca, y que con eso le entregué —sin darme cuenta— mi corazón. Fuera o no una trampa que ella había armado para enamorarme, caí de todas formas.
Tarde Gaspar, muy tarde te diste cuenta que cada cosa que hacías no tenía sentido si no te acercaba a ella, y que todo se trataba de Isla, no por echarla, no por hacerle lo mismo que ella quería hacer... no. Nada de eso.
Pero, ¿lo de ella era real? Yo comencé todo porque la había escuchado decir que quería hacerme sufrir.
¿Por qué subió a mi habitación? ¿qué buscaba? ¿había ido solo porque quería averiguar más sobre mi padre? Me sentí traicionado y un idiota. Y por un instante creí que ella había seguido adelante con su idea de hacerme sufrir, y que estaba allí, tratando de saber más información de mi familia. Sobre todo cuando mágicamente Gustavo se encontraba afuera, como si hubiese sido parte del plan.
Golpeé la pared. Gustavo había entrado en el plan de Isla. Prendí mi teléfono, tenía tres llamadas pérdidas de mi papá. Si no iba de inmediato, era capaz de echar abajo mi puerta.
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Estaba escrito - [Terminada]
Teen FictionA la madre de Isla Ferrer le han ofrecido un trabajo que no puede rechazar si quiere asegurar el futuro de su hija. Para esto debe viajar durante un año por distintos países. Es así que Isla se une a los planes de cambio de ciudad con la familia de...