Body Paint- A Luimelia FanFic (COMPLETADA) Wattys2020

Capítulo 3: Un regalito... un poco caro

CAPÍTULO 3:

-Madre mía, ¿cuánto se han dejado esta gente?

-Pues unos seiscientos cincuenta y, quitándole lo que nos costó, en una noche solo no han dejado unos doscientos cincuenta de beneficio.

-Bueno, pues mirémoslo por el lado bueno. Traiga publicidad o no al Kings, la verdad es que es el beneficio ha estado bien- miro a María, que me devuelve la mirada y se ríe- Lo siento, pero en este momento, es en lo único bueno en lo que puedo pensar.

-Algo es algo- murmuro para mí misma.

-¿Y dices que vino simplemente?

-Como lo oyes. Miguel vino a avisarme de que en el reservado querían mi presencia y cuando llegué estaba allí.- prácticamente, como había sucedido- La verdad es que si no fuera sido por el idiota de Mateo...

-Bueno, solo quería ayudar, Luisi...

-¿No se daba cuenta de que estaba molestando?- además, que ya le había dicho que había sido por su culpa por la que una ronda de chupitos había terminado encima de Amelia- Es que ese chico no se toma un no por respuesta.

-Es que a Mateo le tienes enamorado.

-Bueno, pues a mi no me gusta... y menos con lo que me hizo anoche- que ya me estaba poniendo nerviosa con el tema- Que ahora sabrá Dios lo que estará pensando de nosotras. María, juro que lo iba a arreglar, pero fue por culpa de Mateo...

-Luisi, tranquila- María, al verme como me estoy poniendo corre enseguida a pararme- Al menos, Amelia vino. Que eso es lo importante, ¿no?- supongo que lo era- Y con Mateo... supongo que sí, jodió la noche.

-Y mucho- añado casi enfadada.

Noto que María me mira mientras suelto toda mi rabia con Mateo. Sin embargo, en vez de sentirse enfadada con él, lo que hace es reírse.

-Y yo que creía que estabais jugando los dos.

-¿Jugando?- el día que yo me liara con Mateo, tendría que haberme puesto mala porque no había manera de que yo estuviera con él, era un pesado- No me hagas reír, por favor. Que suficiente he tenido con él.

María resopla:

-Entonces solo sois amigos.

-Solo amigos- resoplo con fuerzas- Aunque con lo que me hizo ayer, la verdad es que ya no sé si ni somos eso....

Mi hermana no dice nada, pero si que volviendo la mirada a los papeles del Kings de la noche anterior, la veo que se ríe.

El Kings estaba cerrado aquella mañana, por lo que habíamos aprovechado para hacer las cuentas de la noche anterior. La verdad es que había sido una de las mejores que habíamos tenido en tiempo.

El caso es que estamos allí, cuando escuchamos el timbre de la puerta principal. Miro a María, que también salta a mirarme al mismo instante. No esperábamos a nadie. Entonces, ¿quién llamaba a estas horas? María lo observa entonces por las cámaras de seguridad a través del ordenador.

-Manolín...- murmura- ¿Qué hace este niño aquí?

-Sabiendo como es, seguro que viene de haberse peleado con papá.

-Seguro. Aunque...- maría vuelve a mirar cuando algo le llama la atención- Viene con un ramo de flores.

¿Manolín? ¿Con un ramo de flores? Aquello era desde luego algo que debía de ver sí o sí con mis propios ojos. Por lo que mientras María se queda allí plantada, salgo a recibir a Manolín, que enseguida me las da con una sonrisa.