Gold [Logince] (Español)

Capítulo XXI: "Patton"

Air Catcher — twenty one pilots

Al ver que su hermano se fue hacia otra dirección sin decir palabra alguna después del almuerzo, Engel decidió ir a molestar a Vasek, tal vez Roman en realidad iba a buscar al pelirrojo y se encuentren los tres, sin embargo, duda que vaya con Vasek, pudo ver que una expresión de sorpresa o algo parecido se había formado en su rostro en un punto del almuerzo, luego bajó la mirada y se fue a paso lento y firme por uno de los pasillos, si fuera con Vasek hubiera ido corriendo a buscarlo. No lo sabe, tal vez solo está dando muchas vueltas a algo sin importancia.

Caminaba por uno de los pasillos sin pared mientras tarareaba una melodía cualquiera, cuando de repente divisó a Patton caminando por el jardín, se veía relajado, estaba a punto de ir a saludarlo, pero al acercarse pudo ver a otra persona presente en el jardín: Hugo.

Patton ni siquiera se dio cuenta de la presencia de la princesa y siguió su camino hacia una de las torres del castillo, Engel se dirigió hacia el castaño que está sentado bajo un árbol.

Virgil miró la canasta, aún hay comida en su interior, supone que podrá guardarlo para más tarde, incluso podría llevar un poco a su casa.

—Vaya, vaya, por fin nos encontramos.

El castaño volteó su cabeza al escuchar una voz femenina cerca de él, amplió los ojos a más no poder al ver a la princesa.

Y se supone que no debe entablar conversaciones con ella.

Bueno, Deceit no ha vuelto a hablar del tema, sin embargo, es un oráculo, debió haber visto algo como para que le haya advertido tal cosa.

Por otro lado, no se le ocurre algo malo que podría causar unas cuantas interacciones con una persona, después de todo, él supuestamente trabaja en el castillo, obviamente se encontrarán de vez en cuando.

—Hola, princesa— se levantó con gentileza, chocando accidentalmente con una rama del árbol. Se quejó por el dolor, acercó su mano a su cabeza.

—Oh, lo siento tanto— Engel se acercó con nerviosismo, buscando una manera de ayudar.

—Descuida, yo soy el que no vio la rama— se frotaba el lugar en el que se golpeó, el dolor de a poco se iba.

Se miraron en silencio unos segundos, esto se volvió incómodo.

—Y… ¿qué estabas haciendo?— preguntó la rubia, intentando romper el hielo.

—Solo conversaba con otro sirviente mientras… almorzábamos— Virgil miró la canasta de reojo.

—Que… bueno.

Ambos desviaron la mirada, Engel buscando cómo alargar la conversación mientras Virgil buscaba una excusa para escapar.

—Bueno, quería agradecerte por traerme de vuelta al castillo… el otro día.

—No hay de que.

—¿Cómo lograste encontrarme?

—Fue un accidente, la encontré inconsciente y pensé "se supone que una princesa no debe estar por el bosque durmiendo, mucho menos sola".

—¿Qué hacías en el bosque?

—Estaba acompañando a otro sirviente, en realidad no sabía que él la buscaba, simplemente decidí seguirlo y ayudarle.

—¿Lo ayudaste solo por ayudar?

—Eh… algo así.

Engel sonrió, Virgil apenas le dirigía la mirada.

—Supongo que el destino quería que me encontraras— Engel se sonrojó.