Solo quedaban unos cuantos días para que JungKook y NamJoon regresaran a Seúl, a su vida habitual y rutinaria; ese último fin de semana los novios no se despegaron para nada, si ya todos sabían que era casi imposible ver a Jimin sin el apiñonado y viceversa, estos últimos días era aún peor, parecían mueganos de lo unidos que estaban.
A Jin le enternecía pero a la par también le preocupaba un poco la dependencia que había generado su amigo por JungKook.
Ese sábado por la mañana el mayor había hecho un gran desayuno para todos, cada uno de sus amigos iban despertando por el aroma que provenía de la cocina, hasta que llegó NamJoon aún con los ojos cerrados y ya anticipando el manjar que comería; cuando abrió los ojos se encontró frente a él a Jin con una gran sonrisa acompañado de un plato de fideos con carne.
-Buenos dias- saludó el cocinero ofreciéndole el plato- espero te guste lo que prepare.
-Gracias- tomo el plato mientras Jin lo llevaba a sentarse al único asiento que quedaba vacío... a su lado- de hecho... es mi platillo favorito- confesó un poco confundido con el comportamiento de su compañero de cuarto.
-Si... de hecho JungKook me lo dijo- ocupo las mismas palabras que el moreno, le sonrió y enseguida comenzó a comer.
NamJoon lo vio algo desconfiado y tomó una chucharada, la llevó a su boca pero se arrepintió y volteó de nuevo a ver a Jin.
-Seguro no le pusiste veneno?- le preguntó un poco nervioso intercalando su mirada del castaño a los fideos que se veían deliciosos- o laxante?
-Me ofendes- Jin soltó su cuchara y cruzó los brazos haciendo un puchero- nunca haría eso... para mi la comida es sagrada, no podría arruinarla por nadie- volteó a la sala para asegurarse que Jimin no estuviera ahí y prosiguió- Si no lo hice por ese desgraciado de Taemin, menos por ti Nam- con el puchero aún en sus labios se preparó para comer de nuevo- aparté ya no me caes tan mal.
-Qué tierno- susurró sonriéndole al castaño mientras se llevaba un bocado a su boca.
El moreno no había notado hasta ahora las facciones de su compañero, ya que siempre que lo veía tenía el ceño fruncido; pero ahora que estaba relajado y disfrutando la comida, pudo notar que ese hombre era muy guapo aparte de ser buen cocinero y quien sabe que tantas otras buenas virtudes podría descubrir.
-Tu tampoco me caes tan mal- espero que Jin se encontrará con su mirada y sonrió- Gracias por la comida.
Jin quedó embobado por un segundo con la sonrisa de su enemigo de cuarto, nunca había visto sus hoyuelos, que lo hicieron sonrojarse un poco; Nam tampoco quito su mirada de Jin, perdiéndose por un instante el uno en el otro.
-Puedes darme más?- Hobi volteó a verlos con una sonrisa pícara- ok... del odio al amor...
-Cállate- le gritaron al unísono.
Jin solo volteó a ver al moreno por un segundo y se levantó para llevar el plato de Hobi a la estufa y servirle otra ración de comida.
-Solo pienso qué hay química entre ustedes- el abogado no dejo el tema- Si dejarán esa tonta rivalidad.
-Por eso hice su comida favorita- le contestó el castaño a su amigo- quiero arreglar las cosas- regreso a la mesa y se acomodó en su lugar- ahora que Jimin y JungKook se separaran, creo que...- respiró profundo necesitaba algo de valor para decir en voz alta su loca pero gran idea- debemos unir fuerzas y mantenernos informados de cómo están los chicos- vio que Nam iba a decir algo pero levantó una mano en señal de que lo esperara y seguir hablando- se que es una locura, pero... no se cómo lo tomará JungKook pero Jimin seguro se va a deprimir y quiero ayudarlo a no sentirse tan mal, buscar la forma de ayudarlo- levantó los hombros restándole importancia.
-No se en que puede ayudar el que los espiemos- ahora él fue el que pidió tiempo para terminar de hablar- pero te apoyo, estaremos en contacto para saber cómo se encuentran los chicos y buscaremos la forma de apoyarlos.
Jin en cuento escucho al moreno, se levantó y se abalanzó a él, dándole un abrazo que sorprendió a todos los presentes y más a NamJoon que solo dejó sus brazos a los lados sin saber que hacer mientras los tres amigos de Jin y Jimin solo comenzaban a reír.Perdón por tardar tanto en actualizar y venir con este capituló tan corto, he estado muy ocupada, pero prometo ya no tardar tanto en actualizar. Gracias por leer y esperar 💛💙
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Segunda Oportunidad
Romance**Cuando se romper tu corazón en mil pedazos, alguien puede llegar a reconstruirlos? Es lo que se preguntaba Jimin hincado y pálido, cuando recogía un marco hecho trizas.