La Afortunada Vida De Un Desafortunado ¦ PaperHat Heroic

(3) - Helpless

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-Slug, no es por nada pero... SON LAS 12 DE LA MADRUGADA! Decidete por favor! -decía impaciente la fémina acostada en la cama del moreno mientras él veía los tres trajes encima de su sofá.

-Te pedí tu ayuda y no siento la vibra que me estés ayudando. -dijo mirándola de forma seria.

-A ver hermanito, con los tres te ves más que espectacular, espléndido y sumamente atractivo, serás la fuente de atención en la fiesta. No me imagino la fila de personas que vendrán sólo para sacarte a bailar, si fueras una pintura te pondría en la sala y te vería todo el día. -la chica con gorro de unicornio se levantó y acarició sus hombros. -Además, no debes preocuparte por nada... Sé que habrán muchos héroes y heroínas que querrán invitar al jefe y eso te causará celos. -el moreno giró a mirarla con una expresión de enojo reflejado. -Pero, si tú lo invitas primero sé que todo saldrá bien para ti y tus celos.

-Yo? Ha... Soy su mano derecha pero para los héroes soy reconocido como un villano redimido... Desconfían de mi...

-Oye, oye. -Eliza lo agarró por los cachetes y lo obligó a verla. -Dejarás que ellos ganen otra vez? Llevas más de 9 años con la misma excusa, nunca participaste en ningún aniversario por tu estúpido miedo. -dijo llevando sus manos a sus caderas. -Esta vez, no dejarás que te hagan polvo, eres un adulto de 25 años, hazte respetar.

-Tengo 26 años... -corrigió Slug.

-Al menos deberías decirme la fecha de tu cumpleaños. -Eliza llevó su mano a su entrecejo y suspiró. -Otro cumpleaños que no te doy nada.

-Tranquila, no es na-

-No te atrevas a decir "no es nada" Eres el Dr. SlugSlys mano derecha de White Hat, llevas trabajando con él y conmigo más de 10 años. Y estas enamorado de él, ¿dejarás que lo saquen a bailar unos cualquiera sólo porque sientes que unas palabras agudas de unos insignificantes te van a cortar? Enviales una inundación, ahogalos con la maravilla que eres y en que te convertiste. Eres valiente, eres prueba de lo correcto que estaba White Hat cuando te contrató. -lo agarró de los hombros y lo puso frente al espejo. -Este ser maravilloso eres tú, aceptalo, vivimos en una sociedad horrible y mediocre pero lo que tú desees puedes hacerlo si sólo le pones ganitas.

-A veces odio que tengas razón... -dijo con una tenue sonrisa. -Y horale con el discursito. -habló nuevamente riendo.

-Es que es verdad. Muy bien... Mejor elige éste. -dijo agarrando de la perchera un esmoquin blanco con un moño celeste y con detalles del mismo color. -Pontelo y lucete en aquella pista como la diva que eres! Peinate, ponte hermosa y reclama lo que es tuyo! -el moreno se sonrojo y le tapó la boca.

-Cierra tu bocota por una vez por favor... -luego de eso la soltó y volvió a hablar. -De verdad, como chingas.

La fémina sólo río, lo empujó al baño y le dio el esmoquin. -Pontelo y vuelve a darme la pasarela!

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La mañana se hizo presente, eran exactamente las 6:10 am, el dueño de aquellos recintos recién había despertado y ni se molestó en cambiarse, llevaba un gorro de pijama, una camiseta azul marino holgada junto con una bata del mismo color y unos pantalones de algodón grises, lo único habitual de él era su monóculo. El demonio se servía un poco de café en una tasa y dedicarse a ver por los grandes ventanales de la sala el exterior tomando su cálido y dulzón café.