El brillo del sol por la tarde era intrusa por los cristales de grandes ventanales cubiertos de cortinas color blanco transparente en una gran habitación donde un moreno descansaba en la comodidad de una cama matrimonial envuelto entre suaves y cálidas frazadas mientras se mantenía abrazado a una almohada profundamente dormido soltando suaves suspiros.
Se removía entre las telas hasta incorporarse se talló la cara dando un largo bostezo mientras acomodaba su cabello, abrió los ojos a duras penas mirando a su alrededor con confusión. - Dónde estoy...? Esto no es el hotel donde nos quedaríamos con mi equipo... -fijó su vista en dos maletas sobre la cama, una era suya y la otra de su jefe.
"- Espera... Dónde demonios está White...?"
Aún con fiebre y resfriado, salió de la habitación abrazándose a sí mismo por el frío que estaba presente en el ambiente, fijó su vista por las abandonadas habitaciones desiertas que se iba encontrando por el corto pasillo de lo que parecía una casa, al final de éste habían unas escaleras conectando con una planta baja, pisaba cada escalón con desánimo dando otra vez un bostezo, sus ojos se cristalizaron y sus párpados se sentían pesados, se talló los ojos y se masajeó el entrecejo adaptando su mirada al ambiente, pasó su vista por todo el lugar viendo una sala limpia pero desierta a su derecha, sólo había un sillón rojo de terciopelo y la fogata, volteó la vista a su izquierda encontrándose con la cocina también limpia a diferencia de las polvorientas habitaciones. Estornudó por lo bajo frotando su nariz, escuchó unos pasos provenir detrás suyo como defensa transformó su brazo en un cañón y se volteó apuntando en dirección del sonido en completa alerta.
- Sluggy, cuántas veces más harás lo mismo? A veces pienso que lo haces para joderme. -dijo entre risas el albino apartando el cañón y tocando la frente del contrario.
- La costumbre... -dijo con una sonrisa triunfante.
El moreno se tapó con su codo la nariz y estornudó, WH no pudo evitar soltar un "Aaw" tras escucharlo. - Cállate. -habló amenazante asesinándolo con la mirada.
- Sigues con fiebre, tu garganta ya no está irritada pero sigues estornudando... Cómo está tu herida? Te duele? -pasó su mano de la frente a su mejilla.
"- Que si duele? Me duele como la mierda... Pero no debo preocuparlo... Hay más cosas de las que preocuparse ahora."
-Ya no duele tanto como antes, estoy bien. -mintió desviando la mirada del mayor pero sentía su mirada sobre él y eso lo inquietaba, tras voltear a verlo traía los brazos cruzados y lo miraba con seriedad alzando una ceja.
- Ahg... Bien, bien... Aún duele y tengo dolor de cabeza. -el albino estiró ligeramente su mejilla como modo de castigo para luego dejarlo y dirigirse a la cocina, el moreno se sobaba la mejilla mientras lo seguía con la mirada, con una tasa de café con un brownie de chocolate en mano, se dirigía debajo de las escaleras donde había una mesa redonda con dos sillas, encima había un pequeño mantel blanco y unos libros, el albino dejó la comida en la mesa y giró ver al doctor.
- Ven, es para ti, sientate a comer algo de azúcar. -el ojos bicolor apartó una de las sillas e invitó al doctor a sentarte con una leve sonrisa en su semblante, el moreno tomó asiento y el contrario se sentó a su lado continuando con su lectura a un antiguo libro escrito en un lenguaje muy extraño completamente inentendible para Slug pero WH leía sin ningún problema, pasaba y pasaba páginas como si buscara algo sin éxito, frustrado suspiró fijando su vista en el doctor quien tomaba su café mientras veía el libro sin tener la menor idea que dijera en él.
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La Afortunada Vida De Un Desafortunado ¦ PaperHat Heroic
Fiksi PenggemarVida... Dolor... Decepción... Amor... Procreación... Paz... Muerte... Todos estos hechos son el ciclo de la vida de un individuo... Así fue la mía... Fue una aventura completamente loca y mereció la pena, todo mereció la pena por él. -Alexander Slug...