VIVIENDO CON DESCONOCIDOS (Completa✔)

Capítulo 11: Hermanastros.

Lo observo sacar su celular en silencio. La envía un mensaje a alguien.

—Esta fiesta ya se volvió aburrida, me largo de aquí. —camina por donde vino y lo sigo sin dudar. De día este enorme patio trasero es hermoso, de noche da miedo.

—Pero es tú fiesta de cumpleaños, no puedes irte.

—¿Quién dice que tengo que estar aquí? —me pregunta volteando bruscamente. —Además mi hermano se encarga de volverla aburrida. ¿A quien se le ocurre hacer una fiesta sin alcohol?, te apuesto que mas de la mitad de los invitados se han ido. Mis amigos ni siquiera se aparecieron cuando les dije.

—Pero...

—¿Pero? —me interrumpe. —¿Y tú qué harás aquí? —me pregunta. —Tú Romeo ya se busco otra Julieta. Así que vamos y no pienses que te estoy preguntando.

—No puedes obligarme.

—De hecho hicimos un trato. Así que vendrás conmigo quieras o no y no tienes permitido irte.

Bufo enojada. ¿Por que carajos acepte el trato?, una simple tarde con él no se iguala ni un poco a 1 mes y medio haciendo sin chistar todo lo que me diga. ¿En que me metí?
Al entrar dentro no tuve que pasar entre la gente. La casa esta tan vacía que se encuentran algunas personas con cara de culo y luego, un grupo bailando, que obviamente son James y sus amigos. Ni siquiera Michael esta aquí. Camino más rápido a la salida. ¿Que sentido tiene quedarme?, no me he puesto toda esta ropa y todo este maquillaje para irme a dormir tan temprano.

—Ojalá hubiera apostado contigo. —me dice mientras salimos por la puerta.

Pensé que Michael se había ido, pero al mirar a un lado del garage me lo encuentro besando a la morena de rulos. Los dos se sorprenden al vernos. Siento un dolor en el pecho, ahora lo sé, ahora entiendo que significa ese sentimiento. Me han roto el corazón, que ilusa soy.
Jake me toma de la cintura de un momento a otro. Me aprieta contra él, mi cuerpo se pega al suyo.

—¿Qué estas...

—Sígueme la corriente. —me susurra casi al oído.

Miro a Michael que frunce el ceño confundido ante la mala actuación de Jake. Le sonrío como una tonta, tratando de parecer normal ante lo que ven mis ojos. La morena me mira con asco, Michael no deja de mirarnos. Entramos al garage y lo empujo enojada.

—¿Por qué hiciste eso? —pregunto.

—¡Shhh! —me dice.

—No me shushes. —me quejo. —No tenías que hacer eso para darle celos. Eres un idiota. —digo en susurros.

—¿Viste su cara?, lo conozco, por dentro ardía de rabia. De nada. —me dice guiñandome el ojo.

—Te das cuenta de que él sabe que nuestros padres van a casarse. ¿Qué crees que piense de que mi hermanastro haga cosas como lo que hiciste ahí? —sigo susurrando.

—No somos hermanastros aún, no legalmente y creo que ni siquiera debería dejar claro lo que pienso sobre ti. —me recorre de arriba a abajo con la mirada.

Una bofetada limpia y sonora suena en su mejilla, lo veo reírse como si no le importara.
Bufo nuevamente y camino al auto negro en el que vamos siempre.