Complicado

Fuerte

"La noche es cada vez más oscura, mi corazón también, no hay lugar donde ir
No puedo sentir nada más
No puedo estar en este espacio dónde te fuiste
No puedo hacerlo más
No puedo soportarlo este sentimiento
No puedo soportar esta noche
No puedo sentir nada más"
—One of those night, Key—

Lamentablemente en la vida muchas veces se suele subestimar las personas, situaciones y casos, existen momentos en los que pensamos ya no se lidiarán con ciertos problemas, en ocasiones todo sale bien sin cortar el árbol desde la raíz, pero son escasos, porque lo mejor es eliminar todo de una vez y eso fue lo ocurrió con Minho y Tae Hwan.

Porque Minho jamás pensó que ese día Tae Hwan cometería una atrocidad, no creyó que su ex llegaría tan lejos, y fue demasiado tarde cuando quiso acercarse a Taemin, porque se había caído por las escaleras, de su garganta salió un alarido que ni el mismo supo que salió de él, dejó caer su teléfono y corrió a su lado cuando cayó al suelo, los médicos y enfermeras se amotinaron para llegara a su lado mientras le gritaban que no lo tocara.

Aún bajo los gritos de los galenos Minho tuvo que ser sujetado para no tocar a Taemin, su cuerpo inconsciente yacía en el suelo, parecía carecer de vida mientras comenzaba a salir sangre  de alguna parte de él, Choi se retorcía sollozando y pidiendo que salvaran a su prometido.

—¡Sueltenme!.—gritó desesperadamente.

Nadie parecía escucharlo, no cuando lo que querían en ese momento era saber si el castaño seguía con vida y sí lo estaba poder estabilizarlo y llevarlo a quirófano, más gritos se escucharon en el lugar, porque a pesar de que los guardias de seguridad tenían sujeto a Tae Hwan el no dejaba de gritar de felicidad por lo que había causado, además de que Kibum se unió a la conmoción y perdió el conocimiento cuando se dio cuenta que el accidentado era su hijo.

Minho siguió a los médicos de cerca, haciendo preguntas sin tener respuestas, escuchando terminologías médicas que no comprendía, comenzó a forcejear cuando no le dejaron pasar más allá de unas puertas pesadas y metálicas, se tiró del cabello sin darse cuenta de que sus cuerpo estaba temblando, le faltaba el aire, se le dificultaba todo en ese momento.

Justo cuando iba a pasar por la puerta un médico salió para hablar con él, dejándose llevar por la desesperación lo arrastró hasta pegarlo a la pared.

—Digame que sucede con el paciente que acaba de ingresar

—¿Es usted su familiar?

—Soy su prometido.

—Si-si me suelta podré hablar.

Minho soltó al médico, el cual casi cae al suelo por la brusquedad que usó el peli negro.

—Aún no tenemos un diagnóstico preciso, pero a primera vista el paciente tiene una fractura en su brazo izquierdo y también hay que hacerle una cesárea de inmediato, seré sincero con usted.—el médico apretó los labios y se preparó para darle la  noticia.—El señor Lee recibió un golpe fuerte en la cabeza, los bebés son gemelos que nacerán prematuros, estamos entre la espada y la pared así que usted debe tomar una decisión...

Choi retrocedió un poco, se tambaleó mientras sentía un sabor amargo en su boca, jamás pensó que su vida daría un giro así, sus planes fueron buenos siempre, ahora su futuro esposo y sus hijos corrían peligro y debía de tomar una decisión.

Siempre ponía a sus hijos primero que nada, solo le importaba que ellos estuvieran bien aún sin nacer, tenía tantos planes para ellos, apretó sus puños sabiendo que no podía perder más tiempo, levantó su cabeza mirando a los ojos del médico.