Truenos

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"No importa cuanto lo intentes
El amor que brilla como el oro es cenizas
Y mi corazón que arde es aspero como una piedra
Los pedazos de fragmentos que fluyen hacía abajo
Mis pies se lastiman con tu corazón"
Stone Heart, Taemin




Llegó a su casa cansado, más por los pensamientos que tenía consigo mismo que por su trabajo, abrió la puerta y el olor a comida inundó sus sentidos, la boca se le hizo agua, se quitó los zapatos y caminó en medias hasta la cocina, donde Tae Hwan cocinaba para él, su prometido se había puesto una camisa blanca y debajo no llevaba más que unos boxers.

—Hola.—se acercó a su pareja y lo abrazó por la espalda mientras este ponía una tapa sobre lo cocinaba.

—MinMin ya estás de vuelta.

Tae Hwan se dio la vuelta y abrazó el cuello de su prometido, depositó un beso en sus labios y le sonrió con inocencia.

—Ve a sentarte, en breve te sirvo.

Obedeció a su pareja y se sentó en la mesa, donde ya estaba servida una copa de vino, de su favorito, le dio un sorbo y cerró los ojos dejando que el sabor amargo estallara en su boca.

—Abre la boca cariño.

Minho abrió los ojos y miró a su pareja, quien se sentó para darle a probar un poco de lo que cocinaba, se llevó de su prometido y abrió sus labios para comer, Tae Hwan introdujo una cuchara en sus labios y se quedó mirándolo a la expectativa.

—Hmm sabe delicioso, aunque...—Minho tragó quedándose pensativo.—¿Qué es?

—Cerdo agridulce MinMin.—Tae Hwan se levantó sonando divertido.

Minho gruñó enojado, se levantó dejando caer la silla de golpes, fue al refrigerador en busca de una botella de agua, al encontrar una la abrió y la bebió toda, luego le dio una mirada hostil a su pareja, quien fingió ignorarlo.

—Tae Hwan que sea la última vez que me hagas este tipo de bromas estupidas, sabes muy bien que no me gusta la carne de cerdo, la detesto.

—Eso Choi Minho.—Tae Hwan dio un paso al frente retando a Minho.—Es para que veas que se siente cuando te hacen las cosas que no te gustan, porque yo.—el pelirrojo se metió dos dedos en la boca saboreando lo que cocinaba. —Me enteré que pediste la dirección de tu ex novio.

—¿Cómo sabes tú eso?

—Fui a la clínica a programar otra cita para la inseminación, yo quiero darte hijos.—Tae Hwan hizo un mohín con sus labios y se acercó a Minho.

—No estoy listo para eso Hwan, no ahora, primero tengo que saber que hará Taemin.

Los rasgos de Tae Hwan se endurecieron ante el comentario de Taemin, se alejó de Minho y apagó la estufa se sentía airado con la sola mención del otro doncel, aunque Hwan nunca le llegó a conocer había visto las fotos que su pareja conservó durante un tiempo, además tampoco olvidaría la primera vez que tuvieron sexo, Minho le llamó Taemin y eso le había dolido, y pues intento atribuir eso a que su pareja había tomado alcohol.

—Hwan no te pongas así, sabes que estoy contigo ¿No?

Abrazando a su pareja por detrás lo hizo olvidarse del enojo que ambos tenían, Tae Hwan sonrió y se derritió por dentro cuando sintió los besos de Minho en su cuello, aunque se quejó cuando lo sintió alejarse para responder una llamada, se dio cuenta de que pedirle a su prometido que dejara a Taemin abortar no funcionó, ahora le tocaría el plan el cual pensó cuando salió de la clínica con la dirección del ex de Minho y de los padres del mismo, porque si tenía que hablar con ellos lo haría, de hecho su plan C tampoco era malo, al menos para él, y este era atropellar al otro doncel si seguía metiéndose en sus caminos, sonrió imaginándose eso, Taemin volando por los aires después de golpearlo a toda velocidad con su auto.



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