—Quisiera que nos quedáramos más tiempo.—Pronuncio mientras alistamos nuestras cosas en el hotel.
El deja de empacar y llega hasta mí, me toma de las mejillas.
—¿Eso es lo que quieres?
Asiento con la cabeza.
—Si... al principio estaba en contra porque arruinaste mi fiesta, pero la pase bien contigo, un lugar así, para nosotros...
Quiero que se repita.
—Solo para los dos.
—Podemos venir otro fin de semana si así lo deseas.
—¿De verdad...?
—Si.
Nos besamos despacio, me cuelgo de su cuello y el me atrae hacia él, aún tenemos mucho que alistar, pero cuando me pierdo en sus labios me olvido de todo, ni siquiera nos hemos cambiado desde que llegamos de la playa, el solo lleva los shorts de baño y yo me he puesto un vestido de playa por encima del bikini.
Rompo el beso y su dedo acaricia mi labio inferior, sus ásperas manos bajan por mi cuerpo, tocando por encima del colorido vestido, lo ubica en mi vientre y baja hasta detenerse donde termina, justo por arriba de las rodillas, lo levanta con ayuda de ambas manos y yo subo las mías.
Supongo que no nos despediremos de este lugar sin disfrutarlo por última vez, me quita el vestido y lo deja sobre la cama, se acerca a mí y mientras besa la piel de mis hombros, sus manos me acarician hasta llegar a los tirantes , desajusta el nudo y mis pechos quedan expuestos, me quita la parte de arriba por encima de la cabeza y me da un pico antes de comenzar a bajar, Sebastian me besa los pechos y lleva los pezones a su boca, me saborea y chupa de ambos mientras hundo los dedos en su cuero cabelludo, baja las manos y las ubica en los nudos de cada lado de bikini, los desata y me lo quita.
Quedo desnuda y el prosigue a quitarse la única prenda que tiene, pero yo lo detengo.
—Quiero hacerlo.—Le pido.
—Adelante.—Me responde, me arrodillo sobre el suelo y le bajo el short liberando su erección.
Enderezo mi cuerpo para poder alcanzar su erección, empiezo con lamidas suaves y disfruto de el como la última vez, lo llevo a mis labios y chupo, doy pequeñas succiones hasta "agujerar" mis hoyuelos y lo tomo varias veces, Sebastian no tarda en llevar ambas manos sobre mi cabeza, jadeante comienza a empujar mi cabello, provocado que su erección se hunda más en mi boca, no entra toda, pero hasta donde llega es lo necesario para yo darle el placer tanto a él como a mí.
La saco de mi boca, tomo un respiro y la vuelvo a meter, hago el procedimiento dos veces hasta que lo siento correrse, pruebo el sabor salado antes de ponerme de pie, pero el mismo me carga y me lleva no hacia la cama, sino hacia la cómoda junto a la ventana.
Mi trasero golpea el mueble y su polla entra quitándome un largo gemido.
—¡Oh joderrrrrrrrrr...!—Suelto yo.—¡Mierda, Mierda Sebastian!¡Mierda!
Comienza a moverme, mi trasero levantándose y volviendo a golpear la madera, mis brazos abrazándolo y nuestras caderas resonando en la habitación.
Cierro los ojos y disfruto de él, de las maravillas que el sexo con Sebastian puede darme.
El vuelve a correrse y estamos tan excitados que terminamos muy rápido, baña mi interior y nos besamos mientras lo siento correrse.
Nos reímos juntos.
Y nos llevamos otro hermoso recuerdo de aquí.
Hola...
Corto, lo se, pero tengan en cuenta que solo quedan cuatro capítulos, como siempre los últimos capítulos que escribo no son tan largos.
Disfruten porque tal ves esta sea la ultima vez de Sebastian y Ellie.
AJAJJAJAJAJAJ OK NO.
Nos quedan cuatro capítulos, gracias por seguir aquí a pesar de que todo indique que terminaremos mal.
Pero bueno, compartiremos ya sea el dolor o la felicidad, lo haremos juntos xDD
Tratare de actualizar más tarde, en la noche posiblemente, pero lean bien, he dicho TRATARE, no estoy confirmando nada.
Después no vengan a quejarse xD
Muchas gracias, espero terminar toda la historia hoy, ojala, quiero hacerlo, creo que varios ustedes ya lo saben y tengo que agradecer por sus saluditos adelantados.
¿Lo ven? Por eso los amo tanto y amo a este pequeña comunidad que hemos creado.
En cuanto a la historia, acabarlo hoy es mi regalo propio para mi, ya veremos si sucede o no.
Nos leemos.
>>Yiemir.
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Bajo Sus Términos
RomanceLa inocente Ellizabeth Pullman ha sus veinte años paso la mayor tormenta de su vida cuando su hermana menor y única familia falleció. Lo que le queda ahora es esa espinilla que se niega a sanar y una enorme deuda con el banco producto de los gastos...