Leveling Incarnation (Terminada)

III-9: Estrellas del Destino

Valyssia estaba en una habitación con varios soldados de la escolta del rey galuki. En cuanto entró en la habitación con un enviado de Barton, demostraron su hostilidad contra la byllian en silencio. La gente de los pantanos y la de las casas colgantes de los bosques había tenido muchos conflictos históricamente, aunque también algunas alianzas. Cada vez quedaban menos byllians por su escasa fertilidad, y su longevidad era sólo dos o tres veces mayor que la humana; por eso les afectaban más las guerras que a otras razas y acostumbraban a mantenerse neutrales, lo cual siempre es visto como algo negativo por todos. Por eso Valyssia sabía que el rechazo de los soldados no se basaba en razones concretas. Podría manejar la situación.
Cuando el mando de la tropa se marchó del pequeño barracón, se volvió a presentar para intentar aligerar la tensión. Varios hombres estaban en pie en posturas desafiantes o en guardia.

-Permítanme saludarlos a todos. -Se inclinó humildemente. -Me temo que fui capturada como esclava. Pero el honorable general Barton me ha comprado para alejarme de los amos. Quiere que reciba un trato digno, el mismo trato que vosotros, como si fuera una ciudadana de vuestro pueblo. Su bondad me honra, y también es un orgullo para vuestro pueblo. Le estoy muy agradecida. Si me lo permitís, lucharé a vuestro lado como una más. Sé que soy una byllian, no puedo hacer nada para remediarlo, pero cuando me veáis luchar os alegrará tenerme de vuestro lado. Hasta entonces trabajaré tan duro como cualquiera de vosotros, o incluso más.

Ping!

Valyssia ignoró el sonido con el HUD oculto. Esperaba que su discurso mejorara la primera impresión lo suficiente para no tener problemas. "Será otra de las subidas de nivel por la experiencia del grupo de Kyllian."

Los galukis se miraron. Incluso los que la habían ignorado tumbados en sus camas se pusieron de pie para mirarla. Parecían intentar ponerse de acuerdo sobre qué opinión deberían tener de ella. Uno de ellos rompió el silencio como un martillo rompe un cristal.

-Elfos. -Escupió al suelo en señal de desprecio y volvió a su camastro. Otros parecían aclararse las ideas y también la miraron mal. Oyó algunos murmullos despectivos. Uno de los galukis, más oscuro que el resto, con más cicatrices, más definido y fibrado y probablemente el mayor, avanzó hacia ella y la midió a tres pasos de arriba a abajo.

-El teniente nos ha ordenado acomodarte como una compañera, y nos ha dicho que no conoces nuestras tácticas ni formaciones aunque seas fuerte. Pero que por una maldición de esclava obedecerlas y no nos traicionarás. De modo que estarás en retaguardia hasta que se te llame.
-A sus órdenes. -Se inclinó. -¿Puedo conocer su rango?
-Los más veteranos me llaman capitán cuando no hay oficiales cerca. Pero tú me llamarás cabo.

Uno de los veteranos se acercó. Parecía más agradable que los demás.

-Es el cabo más viejo a este lado del Pantano de los caimanes. Siempre rechaza los ascensos. -Le puso la mano en el hombro. -Fingimos que mando yo, pero el capitán toma las decisiones en secreto. Fue útil en una ocasión en que me capturaron. La guerra y la lucha se le dan mucho mejor que a mí.
-Éste es el sargento que lidera el pelotón de escolta. El teniente le transmite las órdenes de Barton o del rey.
-A los oficiales nunca les gusta tratar con la tropa .-Comentó ella amistosamente.
-Nos mandan a morir. No quieren tenernos cariño. -Contestó secamente "el capitán."
-Yo tengo mi propia habitación. -Dijo el sargento, un hombre afeitado y con su ropa más cuidada que el resto. -Pero me gusta estar con mi pelotón.

"Tiene miedo de estar sólo. Se siente indigno de su puesto comparado con el cabo, y eso ha minado su confianza."

Ping!

"¿Habré mejorado deducción?"

-Me gusta esto. -Dijo Valyssia alegremente. -Creo que con el tiempo nos llevaremos bien.
-¿Qué te ha ordenado el general exactamente? -Preguntó el capitán.
-Que no traicione a los galuki ni a su rey, que respete la cadena de mando, y que hasta nueva orden forme parte del grupo de escolta. Así que necesito aprender muchas cosas. Estoy lista para ello. -Se inclinó de nuevo.