Desde El Otro Lado Para El Rey

Mundo Oscuro segundo parte.

Thor

Hay tormenta y están callendo rayos. Y eso no es ni un mínimo reflejo de lo que está pasando en la habitación. Estoy tratando tanto y tan fuerte que dudo que mis cuerda vocales lo resistan.

Quiero destrozarlo.
Quiero resucitar a Volstagg sólo para poder escachar su cabeza con Stormbreaker. Quiero asesinarle más de una vez , de las formas más dolorosas que se me ocurran. Creo que quiero asesinarme a mi mismo.

Carta de Loki

Heimdall llegó ese mismo día por la noche. Creo que lo había visto. Creo que vino sin necesidad de que ningún guarda lo avisará. Cuando llegó yo estaba en la cama, hecho un ovillo y vacío por dentro. Frigga me había dejado sólo bajo mi petición.

- Lo lamento -susurro.

-Nadie lo lamenta más que yo. -conteste.

-Lo se.. Era tu hijo.

Mi hijo. Por primer vez se form7lo esa pregunta en mi cabeza. Por primera vez fue importante.

-¿Y de quien más? - susurré. En el fondo tenía un poco de esperanza en que no me hubiera escuchado.

-No te hará más amena la pérdida. - contesto él

-Nada me la hará más amena. Sólo quiero saberlo. Saber si ese miserable fue capaz de matar a su propio hijo.

- No... No mató a su propia hija... 

Hija...

Heimdall tenía razón, aquello sólo lo empeoró. No sólo había perdido a mi hija. A una niña, si no a la hija de Thor.

Thor.... He matado a tu hija. Y ni siquiera sabes que la tienes.

Heimdall me dio más de su energía sin que yo se lo pidiera. Me dio tanta que mi piel se volvió rosada en vez de azul. Me dio tanta que mis manos ya no quemaban.

Al día siguiente Frigga volvió.

-Deberías decírselo a tu padre, que abra han investigación. Que encuentren al culpable.

No. No deberíamos. No puedo decirles que la hija de los Príncipes de Asgard a muerto. No puedo decirle nada de eso a Odin ni a Thor.

Frigga no me entendía a mi y yo no la entendía a ella. Comenzamos a discutir a pesar de que no tenía ganas. Me sentía vacío o roto. Un desecho. No sentía nada por dentro. ¿Se podía estar más roto?
Comenzamos a discutir. Ni siquiera se como comenzamos esa discutir. Pero nunca en la vida se me olvidará como acabo.

-Deberías de hablar con tu padre Loki. -dijo ella.

-¡El no es mi padre! -grite yo.

-Entonces yo tampoco soy tu madre - susurro.

Era la primera vez que Frigga decía algo así. De la primera vez que mi madre me negaba. Note como las lágrimas se acumulaban en sus ojos. Note como las manos comenzaban a temblarle.
Podría haberlo parado. Podría haberme callado. Pero si lo dejaba así  Frigga... Frigga hablaría con padre. O tal vez se daría cuenta de el miedo que me daba perder a mi única madre.