oscuridad parte 6

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Carta de Loki
Cuando desperté Frandal todavía estaba allí. Lo supe desde el momento en el que abrí lo ojos porque me encontré con su pecho. No llevaba su armadura. Pero si una blusa gris. Me pegué por instinto un poco más a él y entonces note como su mano se apoyaba en mi espalda.

-Llevas un día entero durmiendo - Susurro. Su voz sonaba ronca y rota, probablemente porque él habría dormido tanto como yo.

-Que más da -susurre. No me atreví a separarme. Me daba miedo mirarlo y ver la misma expresión que había visto antes de dormir. Preocupación...

Frandal se mantuvo en silencio. Y note que algo ocurría. Pero no dije nada. Ocurrían muchas cosas al mismo tiempo, pensé que tal vez era todo lo que sabía. Todo lo que sabía de mi y de lo que había hecho Volstagg. Sin embargo la frase que soltó me hizo comprenderlo.

-Thor a vuelto. - susurró. Cerré los ojos y apoye mi frente contra su pecho.

Thor habías ganado otra guerra.
Frandal estaba preocupado. Yo no quería que todo lo que estaba pasando en la prisiones se supiera.

- No bajará-Susurre. Esperando tranquiliza5me a mi mismo.frandal asintió. Note como lo hacía.

-Todos han vuelto-continuó.

Ya lo sabía. Entendía que si Thor había vuelto hasta el último soldado lo haría. También entendí porque Frandal parecía tan intranquilo. Supe sin necesidad de que Frandal me lo dijera que no estábamos solos. Y eso me dio aún menos ganas se salir de mi escondite. Aún así me si la vuelta en la cama, dándole la espalda a Frandal y mirándole directamente a esos ojos que lo ven todo.Heimdall.

-No debí haberme ido - susurró.

-Te llamaron a la guerra. No puedes negarte ante las órdenes de tu rey - contesté. Heimdall entró en la celda. Con paso pesado. Me seguía observando y sólo por su forma de mirarme, o de moverse sabía perfectamente que mi aspecto era una mierda. Que seguía destrozado. No creo que seguir durmiendo valla a hacerme tener mejor aspecto, pero tampoco tenía mucho más que hacer.

-Thor me decapitar a en cuanto sea rey si se entera de esto, que digo, Odin y Frigga me descuartizaran si se enteran, si se enteran de que les he ocultado esto, de que les he ocultado todo. Me estás pidiendo que cometa una traición. -declara.

Me quedo mirándolo un momento.

-Soy Loki Laufeison - Me dolía utilizar ese apellido -Heredero del trono de Jotumhaim, príncipe de Asgard e hijo de Odin. Desobedecer mi orden es traición-suplico, imploro.

-A no ser Que otra orden, de alguien que no esté aquí encerrado diga lo contrario. -Declara.

Le observó, con más tranquilidad de la que debería observarle.

-Thor bajará está noche-susurro. Frandal me mira, sorpfendido así que yo le devuelvo la mirada. -Bajará porque se emborrachará , y entonces yo se lo contaré. Entonces no habrás cometido traición. Porque alguien se lo habrá contado.

- Pero él lo olvidará - Me interrumpe Heimdall. -Ese es tu plan. Hacerle olvidar

-No -Miento aunque no quiero que me crean-Si mi plan fuera borrar esos recuerdos y tu lo supiera seguiria siendo traición ¿no Heimdall?

Heimdall me mira. Después a Frandal.
-Fuera -ordena

-¿Y si no quiero irme?-pregunta él en un tono molesto.

-Fuera -ordenó yo está vez. Frandal me mira. Parece dudar antes de obedecer pero finalmente lo hace.

-¿Qué quieres? - le pregunto a Heimdall una vez Frandal está muy lejos. Heimdall saca de debajo de su túnica una especie de saco.

-Tiene medicinas. Todo tipo de medicinas... Y una daga. -susurra.

Le miré durante un momento.

-Eso sí es traición Heimdall. Podría dañar a cualquier miembro de la familia real.

Heimdall me mira, con expresión apaciguada. Aveces pienso que sólo sabe poner esa expresión.

- Pero la vas a utilizar para hacerle daño a tus agresores.... Thor bajará, está noche. Me encargaré personalmente de ello. Pero so de verdad quieres guardar también esto en secreto Frigga no debe hacerlo, al menos no hasta que se te quite ese aspecto raquítico.

-Tenemos un trato entonces. - susurro. Rebusco en la bolsa hasta encontrar la daga. Es de plata, grande Pero manejable y fácil de ocultar. Heimdall me arrebató la bolsa un momento. Cogió u trato con un líquido azul, lo abrió y lo olio. Arugó la nariz, aquello olía mal. No era necesario acercarse para comprobarlo. Yo podía ponerlo desde mi posición.

-Bebe un trago es para el dolor.

Dolor... Era lo único que sentó a en mi cuerpo. Dolor.... a tal grado que no lo sentía.
Tome el votecito y si un trago. El sabor era tan desagradable como el olor así que arrugar la cara. Heimdall me miró.

-Thor bajará está noche-repitió -pero no lo hará borracho.

Abrí la boca para objetar, pero no se me ocurrió una escusa razonable para que lo emborrachará. Heimdall se dio la vuelta y comenzó a caminar. Me quedé mirando aturdido en su dirección unos segundos. Y entonces... Llegó la respuesta. Hiriente y ruda.

- Si no lo emborrachará no vendrá...-susurré-Aunque él quiera no lo haría. Lo evitaría por instinto o al contrario suprimiría todo instinto de venir. Thor no bajará si no es después de varias cuñas de cerveza.

Haimdall me miró con expresión triste. Mis palabras le ha han dolido, supongo que porque saben cuanto me duelen a mi.

- Lo subestimas. -contesta -Thor haría cualquier cosa por ti. Imagina si alguien le dice que estas herido y sólo aquí.

-Tal vez en otro tiempo hubiera hecho cualquier cosa por mi. Pero tu sabes, mejor que nadie, que esos tiempos han pasado.

Heimdall me miran sin decir nada y se da la vuelta.

-No vendrá- dije, lo suficientemente alto como para que el me escuchara. Pero en el fondo... creo que me lo decía a mi.

Llegó la noche. Me había encargado de recoger la celda, si venía, que no iba a venir, no quería que viera el desastre en el lugar de lo hechos. Me quedé pegado a la pared. Podía utilizar ilusiones para que no me viera así... Sabía perfectamente que podía. Pero tal vez en el fondo no quería. Además... no estaba muy fuerte que digamos... y si quería borrarme la memoria después necesitaría bastante fuerza.

Estaba de espaldas, de espaldas al pasillo, a la entrada de las mazmorras, mirando la pared, por miedo de mirar al frente y encontrarme a Thor. Cuando escuché unos pasos. Tan pensados como los de Volstagg. Pero más ágiles, más rápidos, más apresurados.

-¡Loki! -grito.

-Thor ... -susurre sin darme la vuelta.

No quería verlo. No ahora, no así

Desde El Otro Lado Para El Rey Donde viven las historias. Descúbrelo ahora