Pequeños retazos
con vida propia,
que planean en mi mente,
y me creo loca.
Creo ver y no lo veo,
creo sentirte y no te siento,
te oigo hablar,
busco tu encuentro.
A veces me miras
y nos miramos
con esos ojos,
pues nos amamos.
En la distancia te veo venir,
y huyo lejos, lejos de ti,
y todo esto para no sentir
que me duele verte,
pero sin mí.
Debiendo cerrar
este viejo libro,
lo leo y releo,
y es mi corona
de espinas y cobras,
que muerden mi pecho
y lo envenenan.
Queriendo olvidarte,
no encuentro mi parte.