—Un momento —pronunció saliendo rápidamente del sofá.
Blaise y Corine habían salido, y Liliana se había quedado sola en la casa, sin creer que fueran a recibir visitas. Abrió la puerta, y se quedó estática al ver de quién se trataba.
—Lili ¿Nami'yata yaja (podemos hablar)?
—¿Com (qué)?
—Nami, yaja (nosotros, hablar) am... It coma'at yaja humano (yo quiero hablar humano) at siu'patet (para entenderte)
—En la escuela puedes aprender —le dijo sin soltar la puerta, para que él no pudiera entrar.
—Lili, it'shanra'ah (lo siento) —pronunció frustrado.
Suspiró y luego le dio un ramito de flores rojas con pintas violetas que había cortado para ella.
—At siu (para ti)
Ella miró las flores y luego negó con la cabeza.
—Shinsei, Millian, tate iesu (gracias, pero no)
—¿Sa'com? (Por qué)
—It'shanra'ah (lo siento) —le dijo intentando cerrar la puerta, pero él la detuvo, poniendo su mano.
Sin esfuerzo alguno, la empujó hacia ella, con ella también, y entró de todos modos. Liliana lo observó con temor, especialmente cuando él se paró delante de ella.
Ella cerró los ojos, con temor... Y sintió los labios de él sobre los suyos, su cálido aliento, estremeciéndola.
Millian la tomó del rostro con ambas manos, y la besó suavemente. Cómo había extrañado hacer aquello, besarla. Había aprendido con ella lo que era besar, y quería volver a hacerlo.
Se separó lentamente de sus labios, y volvió a unirlos, acercándola más a él... Pero ella en ningún momento le correspondió.
Abrió sus ojos, y la miró afligido, al ver qué tenía lágrimas en sus ojos, y estaba temblando.
—It'shanra'ah (lo siento) —pronunció repartiendo suaves besos por sus mejillas, por su cuello, abrazándola—. Lili, it'shanra'ah.
No era el primero que le decía que lo sentía y luego la volvía a lastimar. Todos los hombres eran iguales.
Él se acercó a sus labios, y le dio varios besos cortos.
—Lili ¿Siu coma'at vet ho'ma (quieres ser mi mujer)?
—I-Iesu —negó con la cabeza, sollozando.
—Lili —murmuró—... ¿Com it'koko at com siu'to vet ho'ma (que hago para que seas mi mujer)?
—It iesu coma'at si ho'ma (no quiero ser tu mujer) —sollozó.
—¿Sa'com ¿Por qué)?
La tomó de la mano, y la llevó hasta la sala, para luego sentarse en el sofá, y ella encima de él, que ni se inmutó. Nada podría hacer para defenderse tampoco.
La abrazó a él, y le dio un beso en la cabeza, envolviéndola con sus brazos. No era bueno hablando, así que esperaba que ella pudiera sentirlo.
Si ella fuera una kanatita, podría sentir lo triste y frustrado que él estaba.
Liliana cerró los ojos, y se quedó quieta, sintiendo como él le acariciaba los brazos y la espalda.
—Lili, it coma'at (yo quiero) siu'beso.
Ella miró hacia arriba y él la miró a los ojos.
—¿Toka yaja siu'beso (como se dice)?
—B-Besarte —susurró.
Él sonrió suavemente, mirándola.
—¿Toka yaja it coma'at besarte (cómo se dice yo quiero besarte)?
—Yo quiero besarte.
—Yo quero besarte.
—Quiero.
—Yo... Quiero besarte ¿Secu'ro nan (está bien)?
—Tima.
Sonrió, mirando sus ojitos tristes.
—Lili, yo quiero besarte ¿It'yata (puedo)?
Ella lo observó insegura, y cerró los ojos cuando él unió sus labios, correspondiéndole lentamente, sintiéndose tan estúpida por caer nuevamente en las palabras de un hombre.
...
ESTÁS LEYENDO
Millian
Short Story¡Edición especial de San Valentín! libro corto de la serie Bestias ❤️ Inicio:14 Febrero 2020