Sin mirar atrás. [KrisHo]

Capítulo 15.

JunMyeon durmió por casi todo un día completo. No se dio cuenta de que prácticamente todos en la mansión lo cuidaron y siempre estuvieron al pendiente de él, cada media hora hubo alguien revisando que su sueño fuera acogedor. El que casi no se fue de su lado fue YiFan, quien únicamente se iba a comer y a la biblioteca a hacer algunas llamadas.

Poco a poco abrió los ojos, de momento no supo en donde se encontraba, no recordó que había pasado, volvió a cerrarlos tratando de concentrarse, por lo mismo puso su mano sobre ellos y empezó a respirar agitadamente ya que una sensación de miedo empezó a recorrer su cuerpo. En eso sintió que alguien le apretaba el hombro y le decía casi en un susurró.

—Por fin te despiertas ¿Te sientes  bien?

Sintió sorpresa para después dar paso a una sensación de seguridad.

—¡YiFan!

—Sí.

—¿Qué pasó?

—Al parecer no habías dormido desde no sé cuándo y por si fuera poco tampoco comido, dime ¿Por qué no te cuidaste?

—Lo siento... pero tenía que entregar unos pendientes en el trabajo para poder venir y lo de comer en verdad no me acuerdo, ya que lo único en lo que podía pensar era en llegar y ver a mamá. —Se quiso levantar pero sintió que su cuerpo no lo obedecía.

—Espera, deja te ayudo.—YiFan tomó una almohada y se la puso en la espalda para que el otro se incorporará un poco, en eso se oyó que alguien tocaba la puerta—. Pase.

Fua la noona la que entró y al momento mostró su alegría al ver que ya había despertado.

—Joven Jun, por fin te dignas a despertar, deja voy a traerte algo de comer. —Sin esperar que le respondiera, salió rápidamente.

YiFan acercó una silla a la cama y tomo asiento, se le quedó viendo, cosa que incomodó un poco a JunMyeon. Por suerte, después de un rato YiFan habló.

—De hoy en adelante cuídate por ti y por tu mamá, te imaginas como se sentiría de saber que por venir casi tu cuerpo colapsó.

—Lo siento.

En eso tocaron a la puerta y entró una noona que venía acompañada por otras dos empleadas las cuales traían charolas con comida y éstas fueron puestas en una mesita.

—Ahora haz el favor de comer, no me voy a ir hasta que no te termines todo.

—¿Noona? gracias y perdona el mal rato que los hice pasar.

—Tú no tienes porque disculparte, ya que con que estés de regreso es más que suficiente. —El ama de llaves no escondía la felicidad que sentía de verlo.

Y ante la vista de los ahí presentes empezó a comer. Al principio sin apetito alguno ya que no tenia hambre, de hecho cuando comió el primer bocado sintió náuseas, estas poco a poco pasaron para dar paso a mucha hambre. Comió prácticamente todo y una vez saciada su hambre, con una servilleta limpio su boca y esbozo esa sonrisa que hacía que todos cayeran rendidos a sus pies.

—Ya fue suficiente por hoy, tiene que descansar. —YiFan las presidió y cerro la puerta ya que se dio cuenta de que JunMyeon contenía disimuladamente un bostezo, quien creería que todavía tenia sueño pero por lo visto así era.

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Una ves solo, JunMyeon se levanto y fue al baño ya que sentía todo el cuerpo sudoroso,  se daría una ducha para refrescarse, tomo una toalla y ropa interior limpia y una pijama  ya que la llevaba la sentía sucia, al estarse desvistiendo se quedo quieto por  un momento ya que ¿ quién le quito la ropa que traía puesta y le puso la pijama? un nombre le vino a la mente pero esto lo único que provocó fue que su rostro se pusiera rojo, tomo una larga ducha para después regresar a la cama y casi en el momento en que su cabeza tocó la almohada cayo en un sueño placentero.