IX

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Bárbara López escuchaba con indiferencia las palabras de Sergio. Ella siempre tenía muy en cuenta las palabras de Sergio, por algo era su mejor amigo. Pero el recuerdo que había venido a su mente la tenía inquieta, eran tan vívidos y tan reales que no podía prestar atención a nada más que a su corazón acelerado y la inquietud de la intensidad de los sentimientos recordados.

- Pero, Barbara!!!! Que te estoy hablando!!!

Esta saltó del sofá en el cual estaba sentada y volvió en sí.

- Amiga, parecías estar en trance!! - farfulló Sergio.

- Sergio, Recordaba... , ya sabes Juliana y Valentina... todo esto que está pasando es tan irreal, pero al mismo tiempo es tan real! No se si me entiendas.

- Como que estás siendo muy contradictoria! Pero creo entenderte - dijo Sergio en tono comprensivo.

- Sabes que Juliana Valdés quería ser abogada? Y veme aquí soy una abogada especialista en violencia de género. Siempre sentí esa necesidad de defender a las mujeres en situaciones de riesgo. Y por eso colaboro activamente con ONGs que difunden los derechos de la mujer, y promueven la sensibilización social. Siempre he soñado con una sociedad igualitaria.

Bárbara se levantó del sofá en el que estaba sentada, fue a la refrigeradora y tomó una gaseosa, dio un sorbo y luego explicó a su amigo,

- A veces siento que estoy viviendo lo que ella no logró. Y me pregunto si algún día me encontraré con Valentina.

- Pero Barbara, tu no eres lesbiana.

- Nunca me he enamorado ni he salido con una chica ni por curiosidad, en eso tienes razón. Pero Sergio esto es diferente. Sin haberla visto, ni tocado pienso en ella. Anhelo su compañía. Siento su ausencia. Jamás me he sentido así. Esto es amor! Sé que suena ridículo. Pero es lo que siento.

- Barbara, hablas y te ves enamorada- le confirmó Sergio.

- Lo que te voy a decir es muy íntimo, pero lo que recuerdo es como vivirlo. Me entiendes? Siento el placer de estrecharla entre mis brazos, besarla. Cuando despierto o vuelvo en mi, mis labios todavía sienten el sabor de su boca y mi intimidad palpita incesante.

- Wow, amiga! Nunca te he oído hablar así de tus conquistas previas. Esta Valentina sin haber tenido un contacto real como te ha puesto la vida.

                                              ***

Macarena se encontraba sentada en su escritorio hacia unos bocetos de unos jardines. Su amor por la naturaleza y su habilidad para el dibujo la llevaron a la carrera de sus sueños, arquitecta paisajista. Muy ensimismada estaba en sus bocetos que no sintió la llegada de Eva.

- Hey, Torti!!!! Ya tuviste tu dosis de lesbianismo en tus sueños hoy?

Macarena puso su lápiz a un lado, hizo girar su silla, y molesta le dijo a Eva,

- Oye, ya párale, no?

- Ok. Prometo no molestarte ya - se comprometió Eva.

- Pero, Maca, eres gay verdad? Ya no lo digo por molestar, pero solo me tienes a mi. No tienes que estar en el closet. Conmigo puedes ser tu misma. Yo jamás voy a cuestionar tu orientación- expresó Eva en un tono muy comprensivo.

- Nunca me pensé lesbiana. Ni me fijé en chicas. Pero ahora... no te burles ok?

- No lo haré!- prometió Eva haciendo la señal de la cruz con sus dos manos y llevándolas a la boca para besarlas.

- Aparte de los recuerdos del pasado, también he fantaseado con Juliana. Pero no la del siglo XX, sino con una Juliana contemporánea. Tengo la certeza que si yo estoy aquí en este tiempo, y soy la reencarnación de Valentina, también Juliana lo está. Ella también reencarnó - aseveró- Nos vamos a encontrar ya verás. He leído mucho sobre el tema.

- De verdad crees en la reencarnación? No será todo producto de la contusión.

- No! Valentina y Juliana fueron reales y vivieron un gran amor a pesar de la época que les tocó vivir. Lo sé- colocó su mano en su corazón y agregó- y lo siento aquí- Y te juro que nos vamos a encontrar algún día.

- Hermana te veo muy contenta, y me duele decirte esto, pero tienes que ser realista esto puede ser producto de tu imaginación y quizás tú cerebro te está enviando señales para que des cuenta de tu opción sexual. Quizás por nuestros valores, o por lo que creemos que es correcto, no te has permitido ver más allá de tus narices. Quizás es el momento de experimentar, por qué no vamos a una disco gay para ver qué ondas contigo.

Macarena sonrió por la buena intención de su hermana, pero sabía que estaba equivocada. No estaba ciega y tenía la capacidad de apreciar la belleza de una mujer, su inteligencia, capacidades pero estaba cien por ciento segura que ninguna en ella había despertado atracción sexual. Y en eso momento pensó que le pasaba igual con los hombres. Había tenido novios, experiencias pero ninguno la dejaba como el recuerdo de Juliana. No podía ser su mente jugándole una mal pasada, por lo que le respondió,

- Gracias hermana! Paso no me veo en un bar o disco gay buscando- y agregó con una ilusión en su azul mirar- aunque si estuviera Juliana conmigo no lo dudaría.

- De verdad que estás muy segura con lo de la reencarnación- dijo Eva.

- Que hasta ya hice cita con el Dr. Guerra y una psicóloga y comenzaré mis terapias regresivas- expresó contenta Macarena.

Eva se incomodó, por lo que la cuestionó,

- Eso es sumamente importante, porque no comentarlo antes conmigo, Maca?

Macarena desvió su labio hacia un lado y le contestó,

- Porqué esto es tan importante para mi que no iba a pedir opinión. Ya lo decidí. Perdóname Hermana por dejarte fuera en esto.

- Está bien! Pero te acompañaré a esas terapias ok? En eso no estoy fuera.

La ojiazul se acercó a su hermana, la abrazó y le dijo,

- Ok, prepárate para mañana. A las cinco pm tengo mi primera regresión.

🌹🌹🌹

Aquí les dejo otro capítulo más como les prometí trataré de estar actualizando más seguido. Comenten para saber que les parece la historia y me cuentan que les gustaría que sucediera.

Saludos!!

Reencuentro (Juliantina) TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora