La fuerza más poderosa del mundo no es el amor, son las armas.

Capitulo: 19

— ¿Yo te enseñé a hablar con esa bocota jovencito? — El mexicano miraba atónito a la mujer frente a él, quien lo regañaba como si nada por decir semejantes palabrotas.
Años de no verla... No escuchaba su voz, solo tenía un nudo un la garganta los ojos a punto de soltar el llanto. — ...Y por eso no debes decir malas palabras, mira mira, ¿Que va a decir la gente de cómo te alcance a educar? Aunque fuera tantito te enseñe a hablar como la gente .. ¿¡Pos' que es eso!?...

— ... mamá... — México finalmente rompió en llanto, Xochiquetzal sonrió comprensiva y lo abrazó con fuerza. Ese abrazo, ese abrazo había sido el más cálido y maravilloso que el moreno había sentido en años, se aferró al cuerpo de su madre como niño pequeño y siguió llorando... Tantos años de dolor se iban desvaneciendo poco a poco. — shhh, shhh, shhh, tranquilo pequeño guerrero, mamá está aquí... Te extrañé mucho querido... — La suave voz de la mujer comenzó a arruyar a México con suavidad, ella lo condujo a la pequeña cama que había en la celda, se sentó en el borde y recargo la cabeza de su hijo sobre su regazo, acariciando sus castaños mechones de cabello y tarareando una agradable canción.
Ninguno decía nada, solo disfrutaban de la paz de haberse reencontrado el uno al otro, porque para un mexicano en busca de su familia no hay mayor satisfacción que encontrarla, así como para una madre volver a ver a ese hijo perdido...

Y así pasaron largos minutos, largas horas, madre e hijo recuperaban poco a poco los años de tiempo perdido. México hablaba con vigor y alegría, cuál niño de 5 años presumiendo su dibujo nuevo a su querida madre, y ella, le escuchaba gustosa, la voz de su hijo antes y ahora no era la misma, físicamente el no es era el mismo, pero su espíritu seguía siendo igual al de antes, y Xochiquetzal se sentía en paz al ver qué su retoño era alguien de bien.

— ...Yo confíe en el madre.— La voz de México volvió a quebrarse un poco, Xochiquetzal revolvió con suavidad el cabello del menor y preguntó a quien se refería. — ...China, se supone que venía con el a tomar un descanso, y resulta que trabaja con España... Yo confiaba en él a ojos cerrados y me utilizo...

— Todos comentemos errores México... Aún así, ese error te trajo a mi, cuando vea a ese chino lo voy a hacer viajar con sus ancestros por lastimar a mi hijo, pero mientras tanto le agradezco... España dijo que te había matado, pero estás bien, estás vivo y ahora te tengo nuevamente a mi lado.

— La mujer beso la frente del mexicano, quien asintió decaído y suspiró soñoliento. El día había sido largo y a juzgar por su cansancio seguramente ya sería de noche.

[Beijing : China]

Japón estaba en pánico y los gemelos coreanos, sur y norte, y Tailandia le observaba ir de un lado a otro describiendo horribles escenarios sobre acontecimientos terribles que pudieron pasarle al Chino.

— Yo digo que vamos a invadir México para buscar a China, tal vez está cautivo allá. —Dijo con suma tranquilidad Norte, mientras recibía un leve golpecito de Sur. — La violencia no es necesaria. Y no creo que México le haya secuestrado, es absurdo. — Respondió éste negando a tal idea.

Japón mientras tanto se comía las uñas observando el mapa mundial de tamaño gigante que permanecía sobre la pared de la oficina del chino, donde todos se encontraban.

— ¡Es que no hay nada! ¡Nada! ¡Ni una pista! ¡Un maldito dirigente a desaparecido y es como si solo fuera una miserable hormiga!— El estresado japonés golpeaba la mesa con sus uñas, mientras tanto Tailandia leía las noticias internacionales en su móvil tomándole poca atención al tema, pues creía a China lo suficientemente fuerte e inteligente para caer en alguna de las paranoias que ellos daban.

Corea del Sur recibió una llamada, salió al pasillo dejando a Norte y a Japón discutir en la sala.

—¿Rusia? ¿A qué debo la inesperada llamada?

— Sur, ¿México está con algún asiático ahora mismo?

— ante la pregunta de Rusia el coreando se mostró sorprendido, hizo una mueca extrañado y miro a ambos lados antes de caminar por los pasillos del palacio. — No, no está con nosotros, y de hecho ya que lo mencionas... Se que no cruzas palabras con China, pero ¿Le has visto? Desde hace días se fue a tierras americanas y no sabemos nada de él, suponíamos que estaría con México...—

— ¿¡Cómo!? Canadá me contó que China fue por México hace poco para llevarlo a Asia, ambos partieron en el avión privado de China y de ahí no tuvimos noticias de ellos, es más, todos de ese lado del mundo creen que China le tendió una trampa a México debido a una llamada que Estados Unidos recibió.—

El cuerpo de Corea del Sur se tensó, ¿Cómo era eso siquiera posible? Dos naciones no desaparecen como si nada sin que se arme un alboroto. — ¿Estás seguro de lo que dices? ¿No crees que más bien estén juntos por ahí para que nadie les vea? —

— ¿Y que tendrían que hacer "juntos" China y México? — Un tono notablemente celoso por parte del ruso se hizo notar en el altavoz del móvil, luego de aquello Rusia rectifico. — Me refiero a... Según se no había negocios pendientes entre ellos, asi que no es una posibilidad, menos porque México no es de tener esa clase de aventuras, ya le hubiera contado a medio mundo...—

Sur mordisqueaba su labio inferior de manera ansiosa. — Rusia, tú eres de los países más grandes y responsables, trata de persuadir a ONU para que no tome cartas en el asunto en caso de que se entere. Si ésto se trata de una amenaza mayor, avisar a ONU sería poner en alerta al agresor, ya sabes que el iniciaría una búsqueda exhaustiva y convocaría a juntas interminables, revisiones y demás, sinceramente sería un estorbo solamente. Le tomaremos como último recurso.
Espero que en efecto se trate solo de una aventura cualquiera y no de un secuestro, de ser así eso significaría que ...— un pequeño silencio invadió a Sur trayéndole una horrorosa escena a la mente.

— Una guerra, lo sé. Si eso ocurre hay que alejar a las potencias y bandos de los países pequeños, no necesitamos que se vean envueltos en crisis o problemas.—

— Ve sin cuidado, me haré cargo de mis colegas asiáticos, encárgate de los europeos, Canadá puede hacerlo con los americanos. Oceanía y África no se van a meter en el conflicto, eso es seguro.—

Finalmente luego de unos tantos planes más aquella charla finalizó, Corea del Sur volvió un poco descolocado a la sala donde sus compañeros se encontraban.

– Tardaste.– Comento Norte mirando el rostro de su gemelo. Corea suspiro cerrando la puerta y les contó lo que Rusia le había informado. Por supuesto que era algo difícil de creer.

– No debemos movilizar nada.– Aquel comentario de Norte fue el que extraño a todos, quienes pensaban que propondría usar las armas de una buena vez, el coreano procedió a explicar a lo que se refería. – Si los americanos están en ésto, al igual que los alemanes y rusos, es más que evidente que infiltrados y soldados están ya asechando a los posibles captores de su mexicano, si vamos a buscar a China debemos separar nuestras fuerzas de las de ellos. Nuestra responsabilidad es él, no el tricolor. Mientras no les estorbemos a ellos, ellos no nos van a estorbar a nosotros.

– Los presentes acataron la orden, aunque México fuera de su agrado sabían que aquello era le mejor desición posible.

Sin embargo Sur seguía bastante inquieto, tenía un mal presentimiento, algo grande estaba por suceder.

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;; Hola; Estamos a mitad de la historia, lo que significa que el final no está lejos pero tampoco cerca.

;; ¡Gracias por leer!