"Aquí y ahora."
Era oscuro y pesado.
Un ambiente horrible.
Estaba seguro de que una rata pasó cerca de él hace unos minutos.
No entendía como Sasuke podría haber llegado a vivir allí.
Sus clones estaban repartidos por todo el lugar, buscando a alguien. A él.
Remotamente, se escuchaba el eco de pasos, voces y golpes. Madera y tierra.
No había nada más allí.
Estaba agobiado.
Se sabía tan cerca de Sasuke, estaba por poder verlo y-
Estaba tan lejos a la vez, porque no estaba seguro de que él quisiera volver. Habían pasado los años, y esa era una duda latente.
Porque él sabía que no era bueno quedarse con Orochimaru, el problema era el cómo hacerle entender eso a Sasuke.
Se escuchó una explosión. Y Naruro corrió, no sonaba tan lejano, solo tuvo que dar algunas vueltas por pasillos y justo cuando pensaba que no estaba avanzando en absoluto, la luz del sol lo cegó.
Allí estaban Sakura y Sai. Yamato también.
Dio unos pasos titubeantes. Estaba exhausto, pero eso no impediría nada.
Sus ojos brillaron en lágrimas.
Allí estaba su Sasuke.
Más alto que antes, pero con el mismo rostro inmaculado, hermoso y carente de emoción.
Sin embargo, reconoció un brillo en ellos. Ese con el que siempre lo miraba. Ese que no le pertenecía a nadie más que a él.
Su boca estaba seca, y escuchó las voz de Sakura llamándolo.
Ellos no dejaron de verse. Y era una conexión tan intensa que Naruto ni siquiera notó que estaba caminando hasta el frente de su grupo.
—Huh, Sasuke-kun—llamó Orochimaru, sacándolos de su burbuja, en donde solo ellos importaban. Sasuke fue consciente de con quienes estaba.—¿Quisieras... demostrarme tu fuerza?
A Naruto se le cortó la respiración, porque esa mierda quería hurtar y utilizar el cuerpo de su Sasuke.
Y eso significaría que Sasuke dejaría de existir. Dejaría de verlo a él, a su sonrisa y a sus bonitos ojos.
—No somos un circo, y que tú parezcas mascota de exhibición no es culpa nuestra.—gruñó el rubio, tensando los músculos para verse más grande lo que era.
Sakura abrió la boca y sus ojos casi se salieron de sus cuencas. Sai parpadeó, mientras que Yamato no sabía dónde esconderse.
Sasuke sonrió de lado, algo impresionado por esa nueva actitud. Naruto definitivamente había cambiado.
ESTÁS LEYENDO
𝙰𝚕𝚎𝚊 𝚒𝚊𝚌𝚝𝚊 𝚎𝚜𝚝 || NaruSasu.
FanfictionEn la vida se toman muchas decisiones, quizás malas, pero igualmente estas crean el camino de nuestra vida. Quienes seremos depende de lo que decidamos. Sasuke está arrepentido de sus decisiones y, gracias a un error de Jūgo en un jutsu mítico, pued...