v.

12.1K 1.4K 647
                                    

ISSUE

acto 1; capitulo 5

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

acto 1; capitulo 5

A P O D O S   C A R I Ñ O S O S

—¿QUE LOCURA TE PROMETIÓ James para que aceptarás ser parte de su loco plan?—dijo Sirius Black mirando a Diana James con una gran confusión—No es prejuicio ni nada de eso, pero eres una Ravenclaw y hay que ser bastante estúpido para aceptar su plan.

—Merlín, Canuto, no la asustes. No creo que pueda encontrar otra chica que acepte esto—bromeó James, empujando a Diana con una pequeña sonrisa en su rostro. Diana no pudo evitar rodar los ojos en si dirección. Se había convertido en una especie de hábito, teniendo en cuenta que lo había hecho tantas veces ya mientras hablaba con él.

—Me prometió su fortuna familiar—bromeó ella.

—Es verdad—dijo James, estando de acuerdo con ella—¿Quién podría decir que no a esa oferta?

—¿Lo dices en serio, Cornamenta?—preguntó Peter, mirando a James con los ojos muy abiertos. No había entendido la broma.

—¿Canuto? ¿Cornamenta?—preguntó Diana con una expresión de confusión en el rostro—¿De donde salen estos apodos?

—Es un secreto, Diana—dijo James, guiñando una ojo en su dirección—Quien sabe, tal vez algún día te lo diremos.

—Esta bien. ¿Ni siquiera le dirás a tu novia el origen de tus apodos y los de tus amigos?—dijo la rubia, dibujando comas en el aire al decir la palabra novia.

—Woah, cálmate Diana—bromeó el azabache—Te dije que comenzábamos mañana.

—Lo que tú digas, Potter—contestó ella, rodando los ojos

—Ay—dijo James, poniendo una mano sobre su corazón, fingiendo tristeza—Me has herido, cariño. ¿Volvemos a los apellidos? Pensaba que ya habíamos superado eso.

—¿Cariño?—dijo Diana mientras levantaba las cejas.
Sirius, Peter y Remus también miraron a su amigo interrogativamente.

—¿Qué?—preguntó James, levantando sus manos como si se estuviera defendiendo de algo o alguien—Le he hablado a mi novia utilizando un apodo cariñoso. Culpadme.

—¿Dónde ha quedado lo de que comenzamos mañana?—preguntó Diana, con una de sus cejas levantadas y una pequeña sonrisa abriéndose paso en sus labios.

—Si, Cornamenta—dijo Remus, riéndose por lo que había dicho la rubia—Ademas, la última vez que lo mire vosotros dos no estabais realmente saliendo.

—Calla—dijo James, sacudiendo la cabeza pero riéndose—Me estoy metiendo en el personaje.

—Claro que si, Cornamenta—dijo Sirius, sin creerlo del todo. El resto de sus amigos estuvo de acuerdo y lo expresaron hablando sarcásticamente con el pelinegro.

—Se me ha ocurrido una nueva regla—dijo Diana, mirando a James con una expresión de seriedad en su rostro.

—Esta bien. ¿Qué es?—preguntó el chico.
Los otros tres chicos los miraron confundidos. Ninguno de los dos había mencionado nada de ninguna regla.

—No utilizaremos apodos cariñosos para dirigirnos al otro. Sólo nos llamamos por nuestros primeros nombres.

—Oh, si, realmente romántico—dijo Sirius en broma, empujando a Remus mientras ambos se reían. James se volvió hacia ellos con una mirada fulminante, los dos ahogaron sus risas mientras se tapaban la boca con las manos.

—¡¿Que?!—exclamó Potter en protesta—¿Por qué no?

—No estoy segura de si me siento cómoda con eso—explicó Diana encogiéndose de hombros.

—Pero si no lo hacemos la gente pensará que solo somos muy buenos amigos y no creo que Evans se ponga celosa por una amiga cercana—dijo James, rodando los ojos.

—Bien. Pero yo elegiré los apodos con los que me sienta más cómoda—aceptó ella, no queriendo estar realmente de acuerdo.

—¿Que te parece cariño?—sugirió James.

—No.

—Calabacita.

—¿No?

—Pastel de azúcar.

—¿Qué? No.

—Azucarillo.

—No—exclamó la rubia, negando con la cabeza y riéndose de los intentos de James—Ya está bien. Literalmente, sólo estás hablando de comida. ¿Que tal amor? Es dulce, corto, simple y un clásico.

—Déjame pensar...—dijo James, poniéndose un dedo en la sien—¡Bien!

—Apuesto diez galeones a que estos dos acabarán juntos—le susurró Remus a Sirius.

—Acepto es apuesta—susurró Sirius, sabiendo que al final de todo eso acabaría diez galeones más pobre.

𝖎𝖘𝖘𝖚𝖊↝james potterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora