CAPÍTULO 5

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Capítulo 5: Notitas cursis.

James había intentado convencerme de dejar el estudio por un mes. Todo por el bebé. Me había dicho que él podía encargarse de que yo entrara sin problema alguno para en enero pero yo no lo quería así, yo quería seguir estudiando. Sin embargo el me acorraló con demasiadas opciones debido a mi negación.

Me dijo que contrataría a alguien para que me acompañase en el tiempo que fuera a ir a la universidad, pero yo me negué rotundamente. Discutimos un poco y al final nos quedamos en que habría una persona vigilándome (de lejos) cabe recalcar que eso se lo exigí por que el pedía que todo el tiempo estuviera a mi lado y acordamos que solo acudiría a mi si llegase a haber un problema.

—Tendrá que ser alguien que sepa de medicina, que pueda ayudarte si te llega a ocurrir algo, que sepa de tu estado de embarazo para ayudarte en lo que se requiera. También tiene que saber artes marciales por si alguien en la universidad quiere hacerte daño —comentó.

—James, ¿quién va a querer hacerme daño en la universidad? No tengo deseos de provocar a nadie.

—No es necesario, este mundo está completamente podrido y es imposible vivir en paz.

—James... —reclamé alargando su nombre.

—Alex... —el hizo lo mismo con mi nombre.

—Bien —solté molesta— tu ganas.

El solo sonrió y asintió lentamente.

—Gracias por entender preciosa —se acercó y me besó la coronilla.



(...)

—Tienes que pasar desapercibida ¿me entiendes? Si me hablas no me vas a llamar Reina... Ni luna ni nada de eso. Por favor no menciones absolutamente nada sobre los licántropos, vamos a estar frente a humanos, personas normales que no comprenden lo sobrenatural.

La chica asintió con la cabeza.

—Si, por supuesto que lo entiendo, eso es algo básico que aprendimos desde pequeños, aunque no se nos permite salir del reino a menos que presentemos ser mitad humano y mitad lobo.

—¿Qué? —pregunté y luego agité la mano con desdén— ya me explicaras eso luego. Por favor nada sobrenatural y lo repito de nuevo, no me llames reina.

—Ya le dije que no habrá problema, esto será fácil no se preocupe luna.

La miré con molestia.

Ella sonrió con inocencia.

—Bueno, no la llamé Reina...

—Tampoco me hables de usted, eso es algo importante también.

—¿Qué? Pero me terminaré acostumbrando y será un gran problema, imagine que no la llame de usted frente al Rey... ¡Por la Diosa Luna! Eso sería horrible, la soga estaría en mi cuello.

—No pasará eso, yo hablaré con James —ella asintió— ahh y tampoco digas expresiones como la que dijiste hace dos segundos, los humanos normalmente decimos “ohh por Dios” “Oh mi Dios” y ehh así.

—¿En serio? —preguntó sorprendida y yo asentí— ¿Algo más que deba saber? ¿Cómo se comportan en las universidades? ¿Algo diferente a lo que solemos hacer nosotros los lobos?

—No, eso es todo, creo... Si ves algo diferente solo trata de imitar a los demás. Yo bajaré del auto y tu bajarás por la otra puerta 120 segundos después ¿okay?

—Bien —resopló.

—Si no es necesario no te acerques por favor, quiero mantener una vida normal y si mis amigos descubren que tengo una clase de guarda espaldas no se que clase de mentira deberé de hecharles por favor solo si es necesario si de alguna forma se llega a presentar una discusión cualquiera mantente al margen, es algo que puedo resolver yo misma.

Misteriosa Luna (#EA2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora