Una Entrada A La Historia.

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manos llenas de sangre llaman a atención de aquella personas, me miran asustadas pero lo que no entienden es que en éste momento no soy yo.

No quiero hacerles daño pero algo dentro de mi me dice que lo haga.

—¡victoria! ¡matalos!—me niego pero no puedo mi cuerpo hace las cosas por si solas, a lo lejos veo una sombra sonreirme con diversión. Escucho los gritos de las personas al tomar del cuello a uno de ello, me temen y no se por qué.

—¡no! ¡Andrew!—miro sorprendida el cuerpo inerte de aquel chico, yo no puedo hacer eso yo no soy un mounstro,

—¡salgan está loca!—algunos me miran con miedo pero otros por el despreció que me tienen salen.

—¡No! ¡Mamá no dejaré a Andrew!—la muchachas llena de sangre lo abraza, veo la tristeza en sus ojos es que yo causé.

—Hija tenemos que irnos sino también matara a otra persona y ya mucho tenemos con él—su hija llora en el hombro de aquella mujer que me tiene desprecio.

—¡te odio!—grita—¡Mataste al amor de mi vida! ¡dejaste a un niño sin padre! ¡desalmada!.—su madre la saca a la fuerza de aquel lugar pero yo no me puedo mover, estoy demasiado sorprendida de lo que he hecho que no puedo ni siquiera respirar bien, se acerca puedo oír sus pasos seguros hasta donde estoy.

—Victoria... Mi linda victoria, estoy tan orgulloso de ti—camina en círculos al rededor de mi sus ojos son de un color azul oscuro intenso como la noche y la obscuridad, eso lo caracteriza a él.

—Está no soy yo—miro mis manos con desprecio por que eso es lo que siento por mi orita.

—pero te acostumbrarás.

me levanto exaltada, ¿que sueño es ese? Es muy diferente al que tuve con la señora Bill. Este es mas tétrico y de solo pensar en yo matando a alguien me da un escalofrío horrible.

—Victoria... ¿estas despierta?—Kassie me mira alzando una ceja.

—Dentro de lo que cabe.

—¿Pesadillas de nuevo?—asiento  ella es la única que sabe de mi problema con las pesadillas últimamente no he querido decirle a mamá sobre eso, tenemos muchas cosas en las cuales preocuparnos.

—Esta es peor Kass, las siento como si fuera la vida real.

No sé que me pasa pero no puedo dormir y necesito trabajar y andar trasnochandome no es nada lindo.

—Deberíamos de decirle a mi tía Tory—niego, no quiero.

—¿Y dejar que agarre otra preocupación Kass?— le explico, levantándome—. Tenemos que preocuparnos por la salud delicada de mi padre... ¿Como para ahora decirle a mi madre lo de mis pesadillas?.

—¡Se que es complicado! Pero también esas pesadillas Tory... Podrían ser depresión o el principio de dios sabe que.—se que esta asustada pero no quiero mas problemas.

—Sólo Olvidalo Kass, vamos que se nos hará tarde.

La veo levantarse y decir algo que no logro escuchar, cuando cierra la puerta tras ella paso las manos sobre mi rostro.

sé que esto podría ser grave pero no quiero alarmar a mi familia, o a la poca que me queda. Desde que murió él tengo estos sueños, lo mas sensato es que en unos días se me pase y ya. No ay de que preocuparse.

Cuando ya estoy lista, bajo las escaleras hacia la salida de la habitación, entro a la sala donde me consigo a Kass y a mamá hablando.

—¿Pasa algo?.

Ellas callan al verme allí en la entrada del living, sus miradas van de mi a ellas dos. Algo ocultan.

—Nada importante—Kass toma su bolso y le sonríe a mi madre—Nos vemos tía—besa su mejilla y sale del comedor a la cocina.

—¿Estás bien Tory?—Le sonrió, ya es costumbre que me llamen así. Asiento y ella me mira insegura y sospecho que algo le habrá dicho Kass.

—¿por que no debería de estarlo?

Le sonrió lo mas que puedo y ella asiente y me sonríe.

—solo preguntaba—le sonrió la verdad me gusta que sea discreta aunque se que me quiere preguntar algo.

—En ese caso es mejor que me valla a trabajar, Kass me espera.

Salgo sin esperar respuesta y veo a Kass apoyada en la pared de afuera con un cigarrillo en mano, debido a las circunstancias estamos muy adictiva a esa cosa. No voy a negar que también lo he consumido.

—¿Que le has contado?.

Lo digo mirando al frente, no quiero verla por que por mas que sea mayor que yo no tiene derecho a meterse en mi vida.

—no le he contado sobre las pesadillas Tory—dice y le da una calada mas a su cigarrillo—solo le dije que estas un poco inquieta estos días.

Frunzo el ceño, ¿inquieta?

—Sólo no sé te ocurra decir aquellas cosas a mi madre por que te dejo de hablar Kass.

Amenacé con la mirada mas seria que pude, que no merece que la trate así pero como ella dijo, he estado muy "inquieta".

—solo vámonos llegaremos tarde— rueda los ojos y sube a mi carro, sin esperar por mi. Está molesta pero no puedo hacer nada por ella, esto lo decidí yo y así será como se quedará.




Hola!! 

Quiero que sepan que esta historia es de capítulos cortos pero como sera de capítulos cortos subiré varios el mismo día. Para que no hayan problemas con respecto a las actualización aclaro que subiré capítulos cada vez tenga oportunidad.

Voten y comenten, me gustaría que me dijeran que les gustaría que pase mas adelante.

CRUEL |Libro 1|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora