Capítulo 33: Niveles

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-No, ni siquiera estoy saliendo con Dragon...- Dijo ella apenada. Aquello me dejo perpleja, acaso ella había solo aceptado estar con Dragon, no...si no están saliendo...podría ser solo su amante, Dragon engaña a su esposa real, ¿Makino es capaz de eso? De quien es Luffy...

-Mentiste- Solo eso dije.

-Creo que puedes ver que entre tu y yo hay un gran nivel, no solo social, físico o personal...aquel día cuando me hablaste estaba muy deprimida o mejor dicho triste, el verte tan bien y llena de lujos, me hizo sentir aún peor...- Su mirada paso a ser de tristeza, se empezó a sincerar conmigo de alguna manera, aunque no entendía el porqué, sin embargo, deje de pensar en sacar información.

Frente a mi no estaba un rival o alguien a quien usar, ahora mismo estaba sentada con una vieja amiga de la escuela, quien al parecer estaba siendo abierta conmigo...sin pedir o esperar algo a cambio.

-Entonces...- Dije para que siguiera.

-Bueno, cuando me llevaste a casa pensé... ¿Qué puedo decir? Vi a Dragon pensé que podía solo mentir, luego eso me llevo a estar con gente de alta sociedad, no me desagrada en absoluto solo que...no era yo realmente- Makino siempre fue una chica de ideales mas abiertos, igualitarios en todo caso.

-Ya veo- Dije entregando mi menú, había pedido dos cafés y un postre de fresa.

-Si me disculpo, pero, si pudieras estar en mi situación o en mis zapatos creo que verías que, en comparación a ti, yo no tengo nada- Dijo ella con la mirada a sus manos, aquella expresión hizo ver en mi un recuerdo...cuando estas tan mal que no se puede ir peor.

-Entonces vives en casa de Dragon, convives con su hijo y lo educaste... ¿pero no sales con él? - Sonaba como una trama para una buena novela.

-Suena raro ¿verdad? Pero es la realidad, empecé como maestra después de salirme de la academia, Dragon quería que le diera clases a su hijo, acepte pues en ese entonces la escuela cerro, se acumularon mis deudas...era un caos- Me lo podía imaginar, también pase por aquello.

-Ya veo- Dije pensativa, también había pasado por un momento duro en mi vida.

-Si, entonces conocí a Luffy el estaba pasando por un momento difícil- Aquello me intereso, saber del chico que estaba con mi hija.

- ¿Qué cosa? - Pregunte curiosa.

-Bueno, el y Dragon, la esposa de Dragon había muerto recientemente...si supieras lo que es para un niño tan alegre como Luffy el aceptar que su madre no está...él era un caos total, perdió casi 2 años de estudios y se reusaba a escucharme- Dijo ella riendo por recordar aquello, Luffy...había crecido sin su madre...no...el creció con una, pero la perdió.

-La esposa de Dragon...- Ella asintió.

-Nunca la conocí, Luffy decía que ella era muy buena, con el tiempo solo me dedique a pensar que le paso, llegue a la conclusión que había enfermado y bueno paso sus últimos días en cama- Aquello me genero un nudo en la garganta, un niño viendo como poco a poco su madre Moria...debió ser un tipo de dolor indescriptible.

- ¿Qué fue de Dragon en ese tiempo? - Pregunte por mi competencia, ¿Qué habrá hecho en se entonces?

-El la enterró y paso en luto mientras que yo cuidaba de Luffy, cuando fue el momento el llego y bueno encontró a su hijo con una sonrisa- Dicho así el seguramente agradeció todo lo que hizo Makino.

-Vaya, dicho así es raro que él no haya querido rehacer su vida- Dije cuestionando el comportamiento del mismo.

-Lo intento, pero nunca conmigo, nuestra relación es más una amistad, ademas me seria incomodo- Ahora lo entiendo...contuve mi sonrisa...Makino...mi compañera, amiga, aliada y antigua rival, al fin había logrado entender que pasaba con ella, por qué no quería seguir con algo nuevo.

-Ya veo...así que es por eso que nos entiende- Dije recordando las palabras del chico, ¿sería posible?

- ¿Cómo? - Pregunto confundida ella.

-Makino, en preparatoria te veía como un rival, cuando te supere mi visión paso a una aliada, cuando te fuiste pensé que había ido bastante lejos con la presión- Admite que pude haber sido muy dura.

-Si...- Dijo nerviosamente.

-Entonces proseguí con mi vida, llegue a graduarme, conseguir trabajo y bueno...me llegue a enamorar de un hombre...cosas de la vida- Dije sin darle importancia a lo último.

-Si, es normal- Tomo de su café.

-Si debería serlo...el tiempo paso y quede embarazada, al inicio el paso en negación aquel hecho, entonces me di cuenta de que el amor ciega mucho a la lógica, cuando nació Robin el se rehusaba a aceptarla, nunca convivio con ella, ni cuando nació ni cuando creció, Robin poco nada sabe de su padre, la crie a mi manera, le pensé un futuro seguro y de ser posible una vida segura- Dije, mi plan con Robin era el plan de una vida llena de lo necesario, una casa, un trabajo, un que otro lujo, incluso un bueno hombre...lo que no logre yo lo plasmaría en ella.

-No sabía de eso...- Dijo ella de manera comprensiva.

-Así que...no soy tan exitosa como crees- Admití, si ella fue abierta conmigo...como favor debía yo serlo.

-Supongo que a todos nos debe ir mal en algo- Dijo ella sonriendo.

-Me alegra pensar que todo es para bien- Tome de mi café.

-Me da algo de risa pensar que...bueno después de todo lo que pasamos ahora mismo estamos en una cafetería conversando como viejas amigas- Rio ella, aquello también me causo gracia, eran divertidas las ironías de la vida.

-Sin el viejas, pero por lo que entiendo tu jamás sentiste ningún tipo de afecto hacia Dragon- Dije, quería comprobar el punto que estaba desarrollando en mi mente, ¿sería posible que?

-Lo considero un buena amigo- Dijo ella, tomo un poco de su comida.

-Eso pensé, caso raro...- Dije mirando mi café, armando el rompecabezas que se había formado en mi mente. Una mujer en problemas salvada al ver la oportunidad de ayudar a un niño en problemas, un hombre quien respeto aquello y jamás hizo nada para estar con ella, sin embargo, ella nunca se fue pues quería al niño... ¿Quería?

- ¿Qué cosa? - Pregunto confundida ella, quizás incluso ella no sabia lo que pasaba consigo misma.

-En los clichés de películas y novelas, la "sirvienta o ayudante" siempre se quedaba con el jefe de la casa o el dueño, ya que se encariña con el hijo pequeño y bueno ya sabes el resto- Dije resumiendo una comedia romántica barata.

-Por eso es raro mi caso- Dijo sonriendo.

-No del todo...- Al fin la atrape...

-A ¿Qué te refieres? - Pregunto ella confundida.

-La razón por la cual veo que no has seguido con algo nuevo en tu vida- Le mire fijamente, me sorprendía aquello que había descubierto, la vida puede ser muy complicada.

-Bueno, me gusta como estoy ahora mismo- Dijo ella tomando su café.

-No es eso... ¿verdad? - Se detuvo observándome, al parecer incluso ella se había dado cuenta, quizás apenas o quizás siempre lo supo.

- ¿EH? - Dejo su taza en la mesa.

-Me dices que te alegras por como vives, pero la realidad es que no es el cómo...si no con quien- Dije con una mirada malvada.

-Yo...- Estaba nerviosa.

-Ahora entiendo, al igual que yo, tienes ese don, no tan desarrollado, pero está ahí- Dije observándola.

- ¿Qué quieres decir? - Pregunto ella con nervios evidentes.

-Estamos al mismo nivel Makino, solo que al parecer tu sigues sufriendo- Esta conversación me dejo claro todo.

- ¿Sufriendo? - Ella no lo sabía, no conscientemente, incluso apostaría a que Luffy no sabía de eso.

-La razón por la cual no haces nada con tu vida es porque te gusta el hijo de Dragon- Como si fuese noticia de embarazo no deseado ella abrió sus ojos con una expresión de asombro...ella no lo sabía.

Una Historia EscolarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora