Capítulo 20: Ella Volvió Polvo Mi Mundo.

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HARRY

La llamo y no contesta, me tira al buzón, se que hoy quedo molesta porque no pudo hablar y estoy seriamente intrigado en lo que me tenía que decir, por eso le dije a Chase que me dejara en su piso.
Al llegar toqué el timbre, pero cuando abrieron la puerta me congelé, retrocedí y por inercia miré si no me había equivocado de lugar, o si Chase se hubiera equivocado de dirección, pero no, estoy aquí, sentí a Clifford ladrar, definitivamente estoy aquí. ¿Qué está haciendo Richard recién salido de la ducha envuelto con una toalla aquí, en el piso de Mia?
- ¿Qué estás haciendo aquí Richard? - pregunté enfadado, mi mente está bloqueada. Richard se hizo el sorprendido.
- ¿Qué hago aquí? - abrió los ojos y levantó las manos - Cuando llego a Nueva York yo vivo aquí - respondió burlón.
- Estoy hablando enserio Richard - idiota, podrá ser mi hermano, pero no es mi persona favorita del mundo, necesito saber porqué está recién salido de la ducha en el piso de Mia, estoy lanzando fuego a través de mis ojos, siento que voy a explotar, mi mente está imaginando lo peor, necesito una explicación.
- Ya veo, Mia no te lo dijo - se llevó una mano a la cintura y con la otra se llevó un vaso de whisky a la boca - Ven, siéntate por favor, te contaré una historia - me hizo señas para que lo siguiera al sofá, esquivo flores y globos, se sentó y yo me quedé de pie observándolo, no pienso caer en su juego - Ay vamos Harry, siéntate - hizo señas exasperadas - Bueno, como tú quieras - se relajo en su asiento y siguió bebiendo whisky - Cuando presencié tu tierno compromiso con Isadora en Londres, me di cuenta que tú habías seguido con tu vida y tengo que admitir que desde que me presentaste a Mia, me llamó bastante la atención - siento que voy a explotar de rabia, tengo que contenerme, tengo que oír toda la historia, no puedo ir y romperle la cara de un puñetazo, es mi hermano - Así que, viaje a Portland, la busqué y solo tuve que inventar que andaba en viajes de negocios, me creyó de inmediato, la invité a cenar con la excusa de que quería saber que había sido de ella con su vida y aceptó, inocente - su sonrisa es solo de maldad - Durante la cena se me escapó la buena noticia de que mi hermano menor se había enamorado y estaba comprometido con una espectacular rubia inglesa, hubieras visto el rostro de Mia- negó con la cabeza decepcionado - Se hizo la fuerte, pero se que la destruyó por completo enterarse de tu compromiso, y bueno yo solo fui un gran, gran, pero gran apoyo en esos momentos para Mia y así fue como se dejó querer por mis encantos - se rió de manera burlesca y sarcástica - Ahora entiendo tantas cosas - me miró de pies a cabeza - Como el por qué mi hermano perdió la cabeza de esa manera, varado, alcoholizado y drogado en alta mar - negó con la cabeza y levantó las cejas - Por qué tienes esta casa llena de flores y globos - se puso a reír con maldad - Es que ahora entiendo, después de tenerla debajo de mi, me doy cuenta que es una mujer difícil de olvidar.
Todo se nubló, la rabia me cegó, es mi hermano y nunca habíamos llegado a los golpes, hasta ahora. Richard notó enseguida que me iba a lanzar con todo contra él, así que se puso de pie para defenderse, me tire con el puño listo y caí sobre él haciéndonos caer sobre la al alfombra, enredándonos con los globos y botando rosas rojas, me arrodillé sobre él y comencé a llenarlo de golpes en el rostro, Richard tiro de mi corbata y me ahorco, me hice a un lado para poder respirar y él se puso sobre mí a golpearme, le tire unas rosas al rostro para que me soltara, pero sentí que alguien entró y Clifford se puso a ladrar, de pronto vi a Mia tomando al perro en sus brazos asustada, es jodidamente preciosa, y me acaba de asesinar por dentro con lo que me hizo, jamás se lo perdonaré, acaba de destruir todo lo poco construido que llevábamos, ella tuvo el poder de volver polvo todo mi mundo, ella acabó con todo, y al verla tan hermosa y peligrosa hizo que cayera rendido a sus pies, dejé que Richard me golpeara, aquí ya no hay nada más porque luchar.
- ¡Richard suéltalo! - Los gritos de Mia fueron fuertes y ensordecedores, Richard me soltó y se puso de pie observándome con odio, no miró a Mia, se limitó a golpear globos, desenredarse y subir las escaleras hecho una furia.
Me puse de pie y la miré, ya no la reconozco, a la mujer que tengo frente a mí jamás la conocí. Se acercó a revisar mi rostro, pero me quite su mano enseguida de mí.
- Suéltame - le dije amenazante y retrocedió un paso asustada - ¡¿Cómo pudiste?! - se lo pregunté explotando en rabia avanzando la distancia que nos está separando.
- Te habías comprometido Harry - respondió sin dudar segura levantando el mentón, pero aún así está retrocediendo.
- ¡¿Y por eso te acostaste con mi hermano?! - le pregunté gritando dolido, enojado y roto, sobretodo roto, Mia no me pudo haber hecho esto, es una pesadilla, por favor Mia despiértame, ella se asustó con mi gritos, y cerró sus ojos fuerte, pero luego los abrió y me miró con esos ojos que me hace querer tenerle el mundo a sus pies.
- ¿Qué? ¡No! Déjame explicarte por favor - se comenzó a acercar rogando, pero me aleje.
- No - negué con la cabeza retrocediendo- ¡No! ¡No! ¡Jamás te lo perdonaré! ¡No te quiero ver nunca más en mi vida! - No quiero seguir perdiendo el control de esta manera, tantos gritos, pero es que simplemente no estoy razonando, saliendo de su piso le di patadas a cada caja roja llena de rosas que se interpuso en mi camino y cerré de un portazo, lo último que escuché fue a Mia llorar descontrolada gritando mi nombre, esta vez no me da pena verla así, la odio y la odio con todas mis fuerzas.

Salí corriendo, pero ahora que no estoy corriendo tras de ti, ahora que destruiste nuestro hogar y nuestros sueños volviéndolos polvo, no sé a dónde correr.

- Señor Thompson - sentí la voz de Chase llamándome de algún lugar, volteé desorientado a buscar su voz y lo vi al lado de mi auto, le hice señas que se fuera y yo seguí caminando fuera de si, pisando en falso hacia algún punto sin destino.

El Jefe Es Mi Prometido (2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora