El Jefe Es Mi Prometido (2)

Capítulo 29

MIA

- Señor Thompson - Taylor estiró su mano y Harry le correspondió el saludo algo serio.
- Rylie - dijo frío. Había olvidado completamente que mi ex prometido es editor y era cien por ciento probable que estuviera aquí.
- No - tartamudeo, Taylor se puso nervioso - Yo no sabia que ustedes siguen juntos - iba a decirle que en realidad no estamos juntos, pero Harry me apretó fuerte la mano, me conoce tan bien, sonreí como una boba mirándolo.
- Si, el amor - respondió Harry con tono burlesco - ¿Cierto mi caramelito? - ¿Me acaba de llamar caramelito? O me las vas a pagar Thompson con un apodo como ese y no decirme princesa.
- Cierto mi cuchurrumi - le apreté fuerte una mejilla con mi mano, Harry quiere reírse, pero se está aguantando.
- Que bueno, me alegro que estén bien - dijo Taylor algo incómodo - Un gusto haberlos visto, jamás lo imagine - se despidió con movimiento de cabeza y siento que me miró algo raro, de una forma extraña que hizo que se me pusieran los pelos de punta.
- ¿Cuchurrumi? ¿Enserio?
- ¿Caramelito? - le levanté una ceja y Harry se puso a reír.
- Eso fue un castigo porque querías decir que no estamos juntos a tu ex prometido - me golpeo con su dedo en mi nariz.
- Pero si es la verdad, rompiste conmigo - fingí clavarme un cuchillo en el corazón, sonrió y se giró a buscar las copas - Gracias - me cerró un ojo y recibí mi martini - Un momento, tú me dijiste que esta sería una excelente instancia para conocer personas de otras empresas, así buscar un nuevo trabajo - Harry abrió los ojos bebiendo su vaso de whisky - Creo que iré a preguntarle a Taylor si necesitan a alguien de recursos humanos en su revista - se atoro con el whisky, se puso a toser y yo me puse a reír.
- Ni se te ocurra - me apunto amenazante y yo levanté mis hombros.
- Tú lo dijiste - entorno los ojos en blanco.
- Ya sé, ya sé lo que dije - botó aire.
- Había olvidado que Taylor aparecería por aquí.
- Si yo igual, que desagradable - respondió algo asqueado.
- Tranquilízate, lo último que supe es que está comprometido o a lo mejor hasta ya se casó - Harry me miró algo triste.
- ¿Qué sentiste cuando te enteraste?
- ¿A qué viene esa pregunta?
- No sé, es solo una pregunta - bote aire para relajarme y responderle.
- Tristeza, miedo, todos mis ex's habían logrado encontrar el amor y se estaban comprometiendo, y yo, que mi sueño era encontrar el amor estaba sola - me reí para romper la tensión de la conversación y Harry cambiara su mirada, pero no lo hizo.
- Yo no había encontrado el amor - sonrió de forma inocente - Caramelito - me agarró mi nariz entre sus dedos, arrugue mi nariz e intente morderle su dedo, pero lo quitó antes.
- ¿Y que sentiste ahora, al verlo, después de tanto tiempo? - ¿Qué está preguntando?
- ¿Tú sentirías algo si Rebecca aparece aquí?
- Rebecca no fue nada, Taylor para ti en un momento lo fue todo.
- Mmm tienes razón, pero nada, no sentí nada - sentí que me miró relajado y sonrió levemente. No le confesaré que siento rechazo, y un toque leve de desagrado como él.
- Buenas noches - sentí una voz conocida, gire mi cabeza para ver a la persona - ¿Cómo lo está pasando señor Thompson? - es Gisele, mmm no me gusta como mira a nuestro jefe.
- Muy bien, ¿Y tú Gisele? - Harry respondió de forma cordial y se pusieron a conversar.
- Iré por otro trago - dije de forma natural y simpática, Gisele asintió y Harry arrugo el entrecejo, caminé a la barra.

- Espero que estés mejor - me asuste con la voz de Michael a mi espalda.
- Si, si - respondí riéndome sobresaltada - Gracias por lo de hoy - me cerró un ojo y se pidió un trago.
- Vaya, vaya, vaya, a quien tenemos aquí - la voz de Taylor me hizo levantar la vista, estrecharon las manos con Michael, ¿Se conocen? - Les presento a Teressa, mi esposa - lo pronunció de forma triunfal, estreche la
mano de Teressa en silencio y Michael la saludó -  ¿Se conocen? - preguntó observándonos. Teressa es muy guapa, muy, muy, muy guapa, un físico envidiable, pero hace bastante tiempo que deje de compararme con las demás mujeres.
- Mia es la jefa de recursos humanos en la revista ¿Por qué? ¿Se conocen? - preguntó algo descolocado Michael, Taylor no se va a atrever a responder quien soy frente a su esposa.
- Si ambos somos de Portland  - dijo de forma antipática.
- Que chico el mundo - dijo Michael de forma inocente.
- Ni te lo imaginas - abrí mis ojos enormes y me giré a tomar mi martini.
- ¿En que revista trabajas Mia? - preguntó Teressa.
- En la mía - sentí la voz de Harry y su mano posándose en mi trasero, estiró su otra mano a modo de saludo a Teressa - en GQ.
- O entonces usted debió ser jefe de Taylor - dijo sorprendida.
- Así es.
- Señor Thompson - Michael estiró su mano y Harry lo saludó.
- Vamos amor te quiero presentar a alguien - Harry tiro de mi mano y le sonreímos a todos a modo de despedida. Dijo amor, dijo amor, dijo amor.