La generación del odio.

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La fiesta, parte 1.

Han pasado varios días delante de todos nosotros. El tiempo se ha convertido en una cuestión tan pequeña que nadie parece notarlo, aún se sigue comentando el asunto con Verity, pero yo no tengo nada más que pensar.

Es una chica.

Llevo un tiempo sin prestar atención a Parker, o a su novia o los dos juntos que es aún peor.

Es como haber regresado al estado habitual de pausa, mis sentimientos están pausados, se mantienen a raya.

Llego a mi clase de trigonometría y me siento solo en un asiento para dos personas, y estoy distraído escuchando algo de música cuando siento que alguien se ha sentado en el asiento de al lado. Volteo a mirar, y es ella, Verity.

—¿Hola? —digo, confundido.

—¿Te importa? —pregunta ella.

—No, está bien —respondo y me pongo derecho, la observo un momento.

Creo que no duerme bien, o no se ha esforzado por ocultarlo hoy y eso me sorprende, con lo buena que es ocultando cosas. Aparto la mirada porque tengo miedo de que crea que soy como los demás, que le analizo buscando piezas que recuerden que era algo que no es.

Ninguno dice nada por un momento.

—Me sorprendes mucho, ¿sabes? —dice, y yo volteo a mirarle.

—¿Mmmmh? No...comprendo —digo.

Ella me observa y sonríe.

—Eres un chico legal —dice —sincero.

Me toma por sorpresa su comentario, pero ha movido algo dentro de mí.

—Gracias —respondo, ella se ha quedado sin decir nada un momento. Observa algo en su teléfono y sonríe. Luego levanta la mirada y tiene algo en los ojos que me asombra, una magia que seguiría a cualquier lugar.

—¿Quieres ir a una fiesta? —dice.

No digo nada por un momento, pero luego algo dentro de mí responde automáticamente. Le devuelvo la sonrisa.

—Por supuesto —digo.

Y así es como he terminado yendo a una fiesta con Verity.

Esto es exactamente lo que ha pasado aquella noche:

Verity y yo acordamos vernos en el parque y tomar un taxi hasta la casa de un tal Noah, es un miembro del equipo de futbol y la fiesta es para celebrar el triunfo del equipo sobre otra escuela, debido a esto clasificaron a competir con los equipos universitarios.

Voy bajando las escaleras y me encuentro con papá en la sala, no le he dicho nada, son las 8:30 y debo estar a las 9:00 en el parque, es viernes.

—¿Vas a salir? —dice, y me observa.

—Eso...creo —respondo —voy a una fiesta —digo finalmente.

Papá coloca una expresión de sorpresa.

—Okay, mmmh —se queda pensativo un momento —eso es genial, hijo. Diviértete, no quiero que regreses demasiado tarde y mucho menos borracho ¿Entendido? —dice, y sonríe.

Le devuelvo la sonrisa y me acerco a darle un abrazo.

—Entendido —digo, y un momento después he salido por la puerta.

20 minutos más tarde he llegado al parque, 10 minutos después Verity apareció en una esquina de mi visión.

Se veía impresionante, no sé exactamente que llevaba puesto. Un vestido, es como un corsé, el cabello completamente lacio. Se ve perfecta.