Capítulo 19 "Lady Jane" ✔

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Williams estaba ansioso en el pequeño saloncito de jane, habia llegado hace unos y sentía aquel lugar cada vez más pequeño cada minuto. Reposo las manos en sus piernas, se levantó al observar la puerta abrirse y aparecer la madre de Rosalia.

—Señora Jane—dijo haciendo una pequeña reverencia a modo de saludo.

Jane abrazo a Williams, lo conocía desde hace diez años cuando luicus y él haciendo tantas travesuras cómo les fuera posible.

—¿Qué te trae por aquí?—dijo su madre—, espero que mi hija no te esta dando problemas.

Williams nunca en su vida se había sonrojado como ahora, siempre había pensado que aquella mujer era una adivina siempre que luicuis y él hacían algo malo, ella siempre lo sabía mucho antes de que saliera de sus labios.

—Creo que se me esta escapando de las manos—hizo una pausa—, creo que piensa que mi sentimientos por ella no son genuinos,  piensa que no la amo cómo ella lo hace.

Jane suspiro esa hija terca suya se parecía tanto a ella de joven.

—solo quierela, Rosalia es como yo cuando tenía su edad—susurro con una sonrisa triste—le gusta huir cuando las cosas se ponen difícil, eso nos hace tardar en darnos cuenta de lo importante. Y sé que la amas inmensamente. Por eso te digo ve por ella, a partido hace un rato al muelle.

Williams la observo raro, hace poco había estado en casa de Lady Anabel ideando un plan, más bien un escándalo para poder hacer ver a Rosalia en una situación apretada, aunque Luicuis casi lo golpeaba cuando se lo dijeron, Anabel y Susan lograron calmarlo. Todos ellos sabían que era una locura, y más para Rosalía.

Pero durante las últimas dos  semanas había sido difícil llegar a ella, hablar, quería a la vieja Rosalía cuando la cuál podía hablar sin tanto rodeos.

—¿Cómo? Pero...— abrio los ojos sorprendido tenía que haberlo visto llegar a la casa de Lady Anabel, porque no había otro modo de que Luicuis apareciera tan furioso—. Maldición.

—Te doy un consejo hija—dijo con ojos brilloso por las lágrimas que retenia—. No la dejes hablar, hazlo tú  que te escuche y que entienda cuanto la amas, de esa manera tan entregada—hace una pausa—. Besala y evita que refunfuñe, hazle saber que aquí está su hogar.

—Eso haré.

—Hazlo cómo solo un buen capitán sabe hacerlo—dice simplemente—, es la única forma de asegurar tu tesoro, se listo como un pirata muchacho.

—¿Usted?

Jane sonrió a Williams asintiendo.

—Este es toda una sorpresa, lady jane—dijo tomando sus manos entre las suyas antes de besarlas—, muchísimas gracias.

—Deje de hablar tanto y váyase. Y no llegué tarde.

Williams salió corriendo pidiendo un caballo, ahí lo conocían y no dudarían, hizo al caballo galopar fuertemente, tenía que llegar a tiempo, no podía perderla.

A la Merced Del Duque ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora