Darkness #1 (Completa✔)

● Bellum ●

Guerra

Mis alas se agitan normalmente, pero mi corazón va a mil por hora, tengo frente a mi a alguien igual de poderosa que yo. El miedo me recorre, pero eso no me detiene.
Ella comienza a reírse, haciéndome enojar.

—Espero que no te decepcione saber quien realmente soy. —me dice confundiendome.

—Eres la peor abuela que alguien pudiera pedir. —le digo. Vuelve a reírse, no comprendo de lo que habla.

—No soy esa vieja testaruda. —dice dejándome atónita.

La miro sin entender a que se refiere. Bajo mi cabeza, para ver como estan las cosas allá en la tierra y cometo un grave error.
Mi abuela que dice no serlo me golpea con algo, supongo que uno de sus poderes. Comienzo a caer, mis alas tratan de estabilizarse y lo logran. Vuelo hacía arriba de nuevo, quedo a unos metros de ella.

—Eso es muy cobarde de tú parte, atacar cuando estoy distraída. —le digo.

—Cobarde eres tú. —pronuncia estas palabras y no espero a que pueda esbozar su típica sonrisa irritante.

Le lanzo mi poder de luz, que por lo general puede con los demonios, no con los ángeles, pero por alguna razón funciona con ella. La hace caer, aun más que yo, trata de estabilizarse, pero le cuesta más que a mi.
Al lograrlo vuela a su lugar nuevamente.

—No podrás conmigo, eres una simple niña. —dice agitando sus alas anormalmente.

—Las niñas también podemos salvar el mundo. —le grito, sintiendo la ira creciendo en mi.

—Tú no has salvado a nadie aún. ¿Acaso pudiste salvar a tú amigo? —sus palabras me traspasan, me hieren, pero no me detienen.

No pude salvarlo, es verdad, pero no me debilitará. Su muerte me hace más fuerte, me hace querer luchar y conseguir justicia por algo que no debía pasar.

—No creas que tendrás lo que buscas. No seguirás debilitandome, no lo has logrado y no lo lograras. —pronuncio estas palabras y en ese mismo instante la veo caer, se deja caer en picada hacía el suelo.

La sigo lo más rápido que puedo, pero solo logro pisarle los talones. Frena un instante antes de chocar contra la tierra. Toco el suelo con mis pies, sin dificultad. La veo aún aleteando, se queda mirándome y ríe de nuevo.
No toca tierra, vuela directamente hacía mi madre. La persigo pero nuevamente solo logro pisarle los talones y ya es demasiado tarde, la toma por el cuello. La ahoga frente a mis ojos.

No dudo en correr hasta ella, solo unos metros más y no llegaría a tiempo, pero la suelta en cuanto me abalanzó sobre ella.
Caemos al suelo, mi cuerpo encima del suyo no la deja moverse. La tengo totalmente inmovilizada, mis manos aprietan sus brazos, mis piernas su cuerpo.

—No intentes lastimar a los que amo, no podrás esta vez. —se ríe y quito una de mis manos para apretar fuerte su cuello.

¿Tan fácil sera acabar contigo?
Con su mano libre toma mi mano, tratando de quitarla de su cuello.
Trata de decir algo, pero no dudo en apretar más fuerte su cuello.
Se le corta totalmente el aire, deja de respirar, deja de moverse, deja de chillar. Por un momento creo que esta muerta, pero una luz se desprende de ella tirándome al suelo, todo el caos a nuestro alrededor se detiene.
Se quedan mirándola, su cuerpo desvanecido flota.
Otra luz nos ciega a todos totalmente, no se que esta pasando realmente, pero cuando la luz deja de brillar me atrevo a mirar, todos mantienen su vista lejos, sus ojos cerrados o tapados con sus manos. La veo, una mujer joven, pero no la reconozco, no sé quien es, solo sé que no es el cuerpo de mi abuela, el mismo ha desaparecido por completo.