17.

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Narro yo.

Al día siguiente, ambos chicos despertaron debido a la luz que entraba por la ventana, ambos estaban abrazados y el menor de ellos ocultaba su cabeza en el pecho de su novio, que acariciaba sus cabellos castaños. Abrieron poco a poco los ojos, haciendo que lo primero que vieran al abrirlos completamente sea a la persona que tanto amaban. Se regalaron una calida sonrisa y un delicado beso en los labios para después levantarse de una manera perezosa, querían quedarse así por mucho tiempo más.
Todo era tranquilo hasta que vieron la hora que era, si seguían así llegarían tarde a la universidad, y si eso pasaba, de seguro el padre de Jungkook no permitiría que su hijo se quedara entre semana en la casa del pelinegro.
Taehyung ayudó al castaño a levantarse, y le dio una pastilla para el dolor de sus caderas. Se bañaron juntos para que Taehyung pudiera ayudar al menor a limpiar los "restos" que tenía de la noche anterior en su interior.
Al terminar con aquel baño, se secaron y vistieron para por fin desayunar un poco antes de ir a la universidad.

•••

Llegaron justo antes de que sonara el timbre, se dirigieron hacia la primera clase del menor, que no quería ir solo a su salón de clase por lo que había pasado el día anterior, y el mayor queriendo que aquel imbécil lo viera junto a su novio para que supiera que lo estaba cuidando y no se le volviera a acercar. Se despidieron con un dulce beso, antes de que el mayor tuviera que partir hacia su salón de clase.
La jornada de clase fue normal, Jungkook tomaba tranquilamente sus apuntes ya que Yugyeom no lo miraba y lo ignoraba por completo, lo que lo hacía sentir tranquilo, mientras Taehyung trataba de concentrarse, pero le fue imposible hacerlo ya que tenía miedo de que aquel pelinegro tratara de hacerle daño a su novio.
Sonó el timbre que indicaba la hora del almuerzo y Taehyung no espero ni un segundo para salir rápido hacia el salón de clase del castaño.

•••

-Ahora si, ¿Puedes explicarnos porque tenías tanta prisa en ir por Jungkook?.-

Preguntó el rubio cenizo con curiosidad.

-Chicos, vamos a contarles pero no puede salir de aquí ¿Entendido?.-

Dijo Taehyung mirando a Jungkook preguntándole con la mirada si tenía su aprobación para contarles acerca de lo que había pasado, a lo que el castaño asintió tímido y nervioso, tomando la mano del mayor para calmarse un poco.

-Lo que pasa es que ayer un imbécil de la clase de Jungkook trató de abusar de él, cosa que habría pasado si no hubiera llegado a tiempo, así que tenía miedo de que ese pedazo de mierda tratara de hacerle daño de nuevo a mi Kookie.-

-¡¿Quien putas fue el desgraciado?!.-

Dijo el de piel pálida levantándose rápidamente de su asiento y golpeando con fuerza la mesa.

-Tranquilo Yoongi-Hyung, ya todo está arreglado, no se me va a volver a acercar, no se preocupe.-

Dijo Jungkook tratando de calmar al mayor que al parecer seguía molesto con aquella persona que había tratado de hacerle daño al menor del grupo.

-No es tan fácil Kookie, hasta yo sigo preocupado aún.-

Dijo Taehyung apretando el agarre de su mano.

-Pero tengan seguro que no dejaremos que nada malo le pase a Kook.-

Dijo ahora Namjoon con una sonrisa, enseñando sus lindos hoyuelos.

Tu Promesa [TaeKook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora