Tu Promesa [TaeKook]

27.

Hoseok limpio unas pequeñas lagrimas que habían escapado de sus ojos y le dio una última sonrisa antes de subir al vehículo y retirarse del lugar.

Lo que Taehyung no sabía es que el chico al que tanto amaba había visto todo desde la distancia.

Narro yo.

Taehyung estaba a punto de entrar a su casa, pero de repente escucho un sollozo, se giró, buscando a la persona que podría estar llorando y se encontró con el chico dueño de sus sonrisas, con lágrimas en los ojos mientras llevaba dos maletas en sus manos. Corrió para abrazarlo pero al estar cerca el menor se apartó, dejando al mayor perplejo.

-Kookie, no puedo creer que estés por fin aquí, te extrañé, ¿Por qué no me dijiste que llegarías hoy?-

Dijo con una sonrisa, llevando su mano hasta la mejilla contraria para acariciarla, pero siendo retirada con brusquedad.

-¿Qué pasa bebé?-

Preguntó Taehyung confundido por la actitud de su novio.

-¿S-Solo jugabas conmigo?-

Dijo Jungkook con la mirada baja mientras gruesas lágrimas se deslizaban por sus mejillas.

-¿Q-Qué?-

Pregunto Taehyung confundido, sintiendo su corazón apretarse de tristeza.

-¿M-Mientras estaba lejos fingías extrañarme mientas estabas con alguien más?-

La voz del menor sonaba entrecortada por el llanto. Taehyung trató de acercarse pero fue apartado con fuerza, así que pensó la razón por la que Jungkook decía aquello, recordando como Hoseok lo había besado.

-Kookie, déjame explicarte, es un malentendido.-

-No me digas nada, no quiero escucharte.-

Taehyung sintió su corazón romperse, al igual que Jungkook, ambos sentían que morirían de tristeza.

-Mi amor, de verdad, no es com-...-

-¡No quiero escucharte maldita sea!-

Gritó Jungkook llorando cada vez más fuerte. Comenzó a caminar con sus maletas, no sabía a donde, pero realmente no quería estar en ese lugar. Taehyung entre lágrimas trató de seguirlo, pero el menor lo empujo fuertemente, y caminó rápido aprovechando que Taehyung estaba en el suelo, para conseguir perderse de su vista.

Al levantar la mirada, Jungkook ya no estaba ahí, no sabía a donde había ido, y maldiciéndose internamente comenzó a buscarlo.

-¡No puede estar tan lejos, maldición!- 

Gritó desesperado mientras continuaba buscando al castaño que se encontraba escondido en un callejón cercano.

Sin saber a donde ir, recordó donde quedaba la casa del peli-morado, y al ser la única opción que tenía, caminó rápidamente en su dirección.

•••

Namjoon, quien estaba acostado al lado de su pareja, escuchó unos golpes algo fuertes en la puerta.

-¿Estás esperando a alguien bebé?-

Preguntó el moreno.

-No amor, ¿Quién podrá ser?-

-No lo sé, tal vez alguno de los chicos olvido algo.-

Ambos chicos decidieron bajar, Namjoon fue por una vaso de agua mientras Seokjin se dirigía a abrir la puerta que era tocada con insistencia.