Del Odio Al Amor Solo Hay Un Paso

19. Evacuando la ciudad

Las dos parejas se fijan en el cielo. Está completamente gris y no por la lluvia.

PERLA: No puede ser. Greg, tenemos que salir de aquí.

GREG: ¿Por qué? ¿Que pasa?

PERLA: Me temo que nada bueno (Busca a Steven y a Connie con la mirada hasta que haya con ellos en la canastilla de al lado y les grita) ¡Steven! ¡Connie! ¡Tenemos que bajar de aquí! ¡Coge a Connie! ¡Yo cogeré a tu padre! Esto tiene muy mala pinta.

STEVEN: ¿Que es esto?

PERLA: No lo sé. Pero es mejor que bajemos y evacuemos a toda esa gente.

De repente, Amatista y Granate aparecen debajo de la noria y les ven.

GRANATE: ¡Chicos! ¡Bajad!

STEVEN: (Asomándose por la puerta) ¿Por qué? ¿Que pasa?

GRANATE: ¡No hay tiempo! ¡Beach City está en peligro! ¡Se acerca una amenaza!

Después de escuchar las advertencias de Granate, Perla se asoma por la ventana. El cielo ha pasado de ser azul a ser un gris que no parece que vaya a ser causado por una lluvia. No es un gris normal. En efectiva, se acerca una amenaza.

Pero, como están situados muy arriba no parece que vaya a ser fácil salir de allí. Así que se le ocurre una idea.

GREG: No, Perla. Es muy peligroso.

PERLA: Tranquilo, confía en mí (Le coge de la mano y se dirige hacia Steven) Steven, coge a Connie. Tenemos que bajar. Ya sabes cómo.

Steven parece captar lo que le dice y coge de la mano a Connie. Entonces, las dos parejas saltan hacia abajo hasta llegar al suelo. Greg, que tenía los ojos tapados, los abre y se encuentra en el suelo cogido de la mano de Perla.

No es momento de sorprenderse ya que salen huyendo de aquel desierto parque de atracciones. Greg todavía continua cogido de la mano por Perla.

Una vez que salen, buscan a Granate y a Amatista que han evacuado al resto de la ciudad.

No tardan en encontrarlas.

Granate y Amatista están haciendo que entren a Ronaldo y a su familia en la cueva donde está el resto de la ciudad.

¡Han conseguido evacuar les a tiempo!

STEVEN: ¿Están todos?

GRANATE: (Dirigiéndose a Steven) Si. Sólo falta uno.

Perla y Greg se miran. Las lágrimas de ella empiezan a brotar. Granate se acerca a ella. Ambas se alejan de Greg y del resto para que no puedan oir lo que una le dirá a la otra.

GRANATE: (Poniéndole una mano en su hombro. Se ) Perla... Yo... Se que esto no es fácil. Y sabía que esto sucedería.

PERLA: (Aún con lágrimas en los ojos) Tu...¿Lo sabías?

Granate asiente con la cabeza.

GRANATE: Lo vi aquel día, Perla. El día en el que Zafiro vio que ibas a tener un día especial. Por eso hicimos aquella fiesta en la playa. Porque te veíamos sufrir, Perla. Sufrir como nunca antes habías sufrido. Sufrir por no poder estar con esa persona a la que amas.

PERLA: Granate... Yo...

Perla no logra articular nada. No tiene palabras.

PERLA: Os quiero mucho.

Y, con lágrimas en los ojos, se abraza a Granate. Después de un minuto abrazadas, ambas se sueltan.

GRANATE: ¿Le quieres?

Perla asiente con la cabeza.

GRANATE: Pues llevale con los demás.

Perla se acerca hasta Greg quién se abraza a un Steven y a una Connie ya fusionados.

GREG: (Abrazando a Stevonnie) Tened mucho cuidado , ¿Vale?

STEVONNIE: Tranquilo. Estaremos bien.

PERLA: Stevonnie... Tengo que hablar con Greg.

Stevonnie parece que lo entiende y deja a Perla junto a Greg. Este le mira con tristeza.

GREG: Perla... Ya se lo que me vas a decir. Me lo ha dicho Steven. Pero, ¿Porque ahora, Perla? ¿Porqué? ¿Porque ahora que todo está saliendo bien viene esto y nos tenemos que separar?

PERLA: Ya lo se, Greg. Ya lo se. A mí tampoco me gusta. Pero esto solo lo podemos solucionar las gemas de cristal.

GREG: Lo entiendo perfectamente, Perla. Pero el hecho de perderte otra vez... No lo soporto, Perla. No lo soporto. Nos ha costado mucho estar juntos. Y lo sabes.

PERLA: Greg... Yo...

GREG: No, Perla, no. No digas nada. No quiero perderte para siempre.

PERLA: Eso te iba a decir. Si me pasa algo, que sepas que te quiero... Y que pase lo que pase te voy a querer siempre.

Perla se acerca hasta el y le da un beso en los labios. Greg se deja besar. El beso no dura más de treinta segundos. Cuando terminan se cogen de las manos. El tiempo apremia. Ambos se dirigen hacia la cueva donde se encuentra el resto de la ciudad cogidos de la mano. Ambos de cogen las dos manos.

GREG: Vuelve, por favor.

Perla, al principio, no sabe que decirle. Pero sabe que debe pelear por Rosa. Por Greg. Por todos los demás. Por ella misma.

PERLA: (Decidida) Volveré.

Se dan otro beso apresurado y se despiden. Greg se queda en el refugio. Perla salta hacia arriba lo más deprisa que puede para llegar al templo. Mira un instante hacia abajo hacia el lugar donde se encuentra el refugio. Sus lágrimas empiezan a caer.

PERLA: (Secándose las lágrimas) Volveré, Greg. Te lo prometo.

Tras decirle esas palabras, vuelve a mirar hacia arriba. Su velocidad aumenta. No tardará en llegar al templo.