5. El reencuentro

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Sabe que se había marchado del templo sin dar explicaciones, pero lo cierto es que Perla después de haber pasado mucho tiempo en su habitación, decidio salir afuera para pensar un poco.

Anda por las calles de Beach city hasta que de repente nota que se choca...

No sabe que se ha chocado con Greg , el cual también iba pensando en otra cosa hasta que ambos chocan.

Ambas personas se miran.

Greg la mira. Dios mío es ella. Perla. Perla. Perla. Perla. Perla. El mundo pareció detenerse. Perla le mira. Greg. Greg. Greg. Greg. Greg. No se podían creer lo que veían sus ojos. Ambos habían soñado junto con el otro y ahora que se ven en persona no saben cómo dirigirse la palabra ni quién empezaría a hablar. Alguno de los dos tiene que tomar la iniciativa. Esta vez no estaba Steven para decirles que se junten. Cómo aquella noche en la que ambos bailaban...

Se quedan tan embobados que no se dan cuenta que la gente que pasaba por encima de ellos, les pide que se quiten de en medio. Algunos de forma educada y otros más enfadados.

GREG: Uy vaya lo siento ya nos íbamos. ¿Verdad, Perla?

PERLA: (Con una sonrisa falsa) Si sí ya nos íbamos

Perla sin pensarlo le coge de la mano y le llega sentarse en un banco.

PERLA: (Algo nerviosa) Yo...no.... es-pera- ba encontrarte a-aqui.

GREG: (Nervioso también) Yo tampoco Perla. De hecho es que ha sido una sorpresa. 

PERLA: Para mi también lo es...Greg...esto quería decirte algo..

GREG: Si yo también querría decirte algo...Esto..

PERLA: ¿El que Greg?

GREG: Quería decirte si te apetecía...salir...conmigo

PERLA: ¿Yo? ¿Salir contigo? Por supuesto que si Greg.

GREG: Vale guay, ¿Que te parece si te invito a cenar el sábado donde estuvimos la otra vez? Ya sabes en empire city. Habrá una buena cena y un buen baile.

PERLA: Por bailar estaría bien pero comer no se...

GREG: No te preocupes. No te voy a obligar a que comas.

PERLA: Ya lo se pero es que me has invitado tú...y me da mucho apuro.

GREG: Tu tranquila no me voy a ofender si no comes

PERLA: (Emocionada) Bueno pues supongo que estoy libre.

GREG: Vale guay. Paso a buscarte al templo a las ocho y media.

Y así se despiden y se marchan cada uno a su sitio.

Del Odio Al Amor Solo Hay Un PasoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora