Just a Two Strangers In A Crowd

~Capítulo 8~

Astrid había terminado su cena semanal con los Haddock, por lo general se quedaba hasta tarde una noche y comía con la familia. Se sentó entre Toothless e Hiccup como de costumbre, con Estoico presente también, el hombre mayor se había tomado un momento para alejarse del trabajo, lo cual era raro, y Valka estaba sentada frente a ella y los hermanos.

La cena consistió en pollo al romero, papas y cualquier verdura que Val tuviera ganas de cocinar esa noche. Hiccup comió su comida sin preocupaciones, dejando su teléfono en el piso de arriba por temor a que sonara durante la cena y alguien preguntara quién era. Había estado hablando con Jack a través de mensajes de texto durante dos días y Astrid finalmente dejó de fastidiarlo con la broma de: "ustedes dos se casarán y tendrán bebés hermosos".

Pero eso no significaba que el chico les contara a sus padres sobre Jack. Ni que estaba planeando hacerlo pronto.

- Entonces Astrid, ¿cómo te va en la escuela? -Val se limpió la comisura de la boca con una servilleta. Consideraba a la chica alguien muy cercana, casi como una tercera hija en la familia.

Astrid se encogió de hombros y terminó de tragar un bocado de pollo.

- Obtuve una A en mi examen de química -dijo alegremente, Hipo se encogió en su silla y desvió la mirada, recordando que obtuvo una C en la misma prueba. - También voy a empezar a jugar fútbol- ella añadió.

- Oh, ¿no es muy pronto para comenzar a practicar? Se acerca el invierno. -Val miró a Estoico, esperando que se uniera a la conversación, pero parecía demasiado interesado en su comida.

Toothless miró a sus padres y pareció dudar mientras comía.

- Pensé que podría comenzar ahora para que mi cuerpo esté acostumbrado al entrenamiento en primavera. -Astrid habló detalladamente sobre su plan de trabajo y Val asintió comprendiendo-

Hipo se alejó sobre el rumbo de la conversación, su mente vagando hacia su teléfono que yacía en el piso de arriba.

Valka se volvió hacia Estoico y le tocó el brazo suavemente.

- ¿No es genial Estoico? -Ella sonrió cuando él levantó la vista. Estoico era un hombre grande, con el cabello rojo que parecía crecer por todas partes en él. Tenía una barba llena y ojos claros que harían que cualquier hombre adulto se encoja de miedo si se enoja.

- Sí, eso es maravilloso, querida -se puso de pie, tomando en manos su plato vacío- Necesito ir a trabajar en algunas cosas de último minuto, ¿de acuerdo? Estaré en mi oficina si me necesitan. - La besó en la cabeza y su sonrisa vaciló - ¿por cierto, Hiccup?

El chico reaccionó al oír su nombre.

- ¿Si?

- Asegúrate de ir a dormir temprano. Veo la luz encendida en tu habitación por la noche y realmente deberías estar durmiendo. -Dijo mientras ya estaba cruzando la puerta. Intentó susurrar la siguiente parte, pero resonó. -No es de extrañar que sigas siendo tan pequeño si no duermes lo necesario. -

No tenía un tono enojado sino serio, pero de cualquier manera era la única forma en que Estoico parecía comunicarse siempre.

Ahora Hiccup se desplomó en su silla y Astrid pinchó su pollo con el tenedor con demasiada violencia. Val miró a los tres y se levantó, aplaudiendo.

- Muy bien, eso significa que hay más helado para ustedes. ¿Qué tal?

Toothless pareció alegrarse ante la mención del helado y asintió.

- Bueno, ayúdame a limpiar la mesa Toothless y deja que los adolescentes se ocupen de sus asuntos.

Astrid e Hiccup subieron las escaleras hacia la habitación del chico pecoso, donde inmediatamente tomó su teléfono y se dejó caer en su cama. Astrid se acomodó a su lado, descansando su cabeza sobre el hombro de su amigo, mientras él miraba sus mensajes más recientes.