Después de lo que Dio me había preguntado mi comportamiento era un poco diferente, ahora tenía vergüenza ¿Yo? ¿Vergüenza con Dio? Al parecer mi tonto corazón está dejando de lado a Jojo y se enfoca en ese rubio carismático con problemas de carácter.
Dio...
Pensé y tras un suspiro dejé caer los hombros, había tenido la idea de salir a caminar un rato. Era de tarde y la noche comenzaba a acercarse.
-Será mejor volver-me dije a mi misma pero algo o mejor dicho alguien evitó que lo hiciera.
A lo lejos pude ver una melena rubia que identificaba muy fácilmente, era Dio e iba caminando de manera extraña, se tambaleaba cosa que es raro de él, ya que siempre tiene una postura elegante.Está ebrio.
Pensé al ver que de su mano derecha se mostraba una botella de vino ¿Dio ebrio y perdiendo su postura? Eso es muy extraño, decidí acercarme hasta él a paso lento para poder llevarlo a la mansión Joestar, ya que alguien bajo el efecto del alcohol fuera de un lugar seguro no termina bien.
-Dio-llamé.
-¡¿Qué quieres?!-inquirió volteando a verme con el ceño fruncido, se asombró al saber de quien me era y borró aquella dura expresión-___-me nombró dibujando una sonrisa.
-¿Desde cuando Dio Brando pierde su postura?-alcé una ceja divertida.
-Solo estoy bebiendo un poco-respondió mostrando la gran botella de vino que ya casi estaba vacía.
-Si, un poco-suspiré acercándome hasta él-dame la botella, te llevaré hasta la mansión.
En cuanto iba a agarrar la botella, de un movimiento rápido Dio lo evitó y sonrió burlón.
-Lenta...-y tomó un gran trago.
-Dio, ya basta. Mira como te encuentras-señalé.
Aparte de cargar un fuerte olor a alcohol, llevaba el saco manchado con tierra, de seguro el muy tonto perdió el equilibrio en este estado y cayó al suelo, ni siquiera se percato de ello.
-No-negó, iba a darle otro trago pero rápidamente me acerqué a él, extendí la mano y pude quitársela-¡Hey!-alzó la voz con el ceño fruncido.
-Ya basta, estas muy mal Dio-dije y sin pensarlo tire la botella dentro de un cesto de basura que teníamos cerca, del impacto la botella se rompió y toda la bebida se perdió entre los restos.
-Eres una...-gruñó observándome.
-¿Una que Dio Brando?-enfrenté con el ceño fruncido, no dijo nada solo chasqueó la lengua y cruzó de brazos-Dio-llamé acercándome hasta él, no se porque pero sentí el deseo de abrazarlo. Como si dependiera de ello y también sentía que algo sucedía con él pero el muy terco no me lo diría.
Pasaron segundos y por fin Dio correspondió al abrazo, envolvió los brazos en mi cuerpo y apretó a él con desesperación, como si me quisieran alejar de su lado.
-No quiero verte así, me preocupo por ti.
Inhaló profundo e inclinó para esconder el rostro en la cueva de mi cuello.
-Es la primera vez que alguien se preocupa tanto por mi-susurró.Dio no tuvo una buena infancia.
Las palabras de Jojo sonaron en mi cabeza, me gustaría saber de él, de su pasado y todo lo que vivió pero es algo un poco imposible.
-Que asco me doy...
-No digas eso-negué suavemente.
-Me estoy convirtiendo en la persona que odie durante toda mi vida-apenas se escuchaba, me era un poco extraño oírlo así porque estaba acostumbrada a su timbre de voz alto-en un maldito ebrio sin corazón, n-no quiero...
Negué nuevamente llevando una mano por su cabellera rubia y comencé a acariciarlo.
-Mi padre, siempre fue un maldito ebrio que pensó solo en él. Me maltrataba y sobre todo echaba la culpa por la muerte de mi madre. Tenía que salir a sobrevivir por mi cuenta y es por eso que... soy esto hoy en día.
Ahora entiendo todo lo que me decía Jonathan y del porque eran así con Dio, pasó por muchas cosas malas apenas siendo tan pequeño.
-Tranquilo, estoy aquí para ti y lo sabes-susurré, apartó el rostro de mi cuello y observó detenidamente. Sus ojos cargaban un brillo que era perfecto, sus mejillas estaban acaloradas por el alcohol y se veía tan vulnerable como hermoso.
-Es la primera vez que siento esto por una mujer-declaró y sus labios se encorbaron en una sonrisa que me fue imposible no sentir que se me subía la sangre por la cabeza-estuve con muchas mujeres en mi vida.Comentario innecesario.
Pensé pero se lo dejo pasar por estar de esta manera.
-Pero ninguna me dejó así.
-¿Así como?-pregunté alzando una ceja.
-Tan enamorado-respondió tras un suspiro-___, me tienes rendido a tus pies.
Eso último no me lo esperaba y si, me tomó por sorpresa. Mi corazón comenzó a palpitar más fuerte.Dicen que las personas ebrias siempre dicen la verdad.
-Se mi novia ___, por favor-pidió dibujando un puchero ¿Dio pidiendo por favor? Esto quedará para la historia.
-No puedo darte una respuesta ahora.
-¿Por qué?-hizo un berrinche de niño de cinco años, me daba tanta ternura verlo así.
-Porque estas ebrio y mañana no recordaras nada de esto.
-De seguro sigues sintiendo cosas por Jojo-dijo su nombre con desprecio-¿Qué tiene él que no tenga yo? Soy más guapo, bueno, no soy tan amable como él pero soy caballeroso, te trato bien, ahora porque me gustas y quiero lo mejor para ti-mientras hablaba iba señalándose los dedos de todas las cosas positivas que tenía.
-Vamos que te llevo hasta tu hogar-dije tomándolo por el brazo el cual hice que pasara por mis hombros, pesaba, aparte de que el tamaño de su cuerpo era el doble del mío.
-Soy mejor partido que él-dijo observándome con el ceño fruncido.
-No paras Dio, ayúdame que no puedo todo sola.
Refunfuñó mientras avanzábamos hacia la mansión Joestar, allí estaba Jojo quien al ver a Dio en ese estado me ayudó a llevarlo a su cuarto.
-Dio, sabes que sobrepasarte con el alcohol hace esto.
-Púdrete-maldijo Dio ya tirado en la cama.
Rodee los ojos tras un suspiro y volví a ver hacia Jojo.
-Gracias-agradecí sonriéndole.
-Gracias a ti por traerlo.
Ambos mantuvimos aquella sonrisa y Dio carraspó con fuerza provocando que lo viéramos.
-¿Puedes irte Jojo? Me molesta tu presencia en estos momentos-se quejó señalando hacia la puerta.
-Si necesitas algo me avisas ¿Si?
Dio solo asintió y Jojo se despidió de mi.
-Bueno, yo también me voy-dije y de inmediato Dio se incorporó.
-No-habló tomándome por la muñeca, frunció levemente el ceño por el dolor de cabeza-quédate conmigo.
-¿Quedarme aquí?-asintió como respuesta-pero...
Me detuve al ver su expresión de súplica, era la primera vez que lo veía así y sobre todo estaba triste.
-Esta bien-asentí suavemente.
-Ven-extendió los brazos hacia mi.
Hice caso a lo dicho y me acerqué a él para darle un abrazo, correspondió al momento rodeando los brazos en mi cuerpo. Se sentía bien, se sentía cálido, me gustaba estar así. De un abrir y cerrar de ojos termine acostada junto a él aún sin soltarme.
-¡D-Dio!-alcé un poco la voz, estaba roja como tomate.
-No voy a hacer nada que no quieras-dijo por lo bajo posándose sobre mi, no sabía que decir o hacer.Ay no, ay no.
Pensé tragando fuerte, repito verlo así me derretía.
-Tomate-burló.
-Muy gracioso rubia-fruncí el ceño, se aproximó a mis labios y depositó un suave beso, uno que me transmitía tranquilidad y sobre todo muchos sentimientos que nunca pensé que tendría.
Se apartó de mis labios y apoyó la cabeza sobre mi pecho, sus brazos envueltos en mi se aferraron aún más.
-Gracias...-susurró cerrando los ojos.
Iba a hablar pero en segundos se había quedado dormido.Se ve tan angelical durmiendo y es tremendo demonio.
Pensé sonriendo a la vez que acariciaba sus cabellos dorados, mañana ya se que respuesta voy a darle.
Eeeeeeeeh aquí nuevo capítulo de este fanfic dedicado a nuestro vampirito metro sexual más amado de Jojo (? 💛💚
Espero que les guste, un abrazo y muchas gracias por los saludos de mi cumple ☺️💙Arrivederci.~⭐
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ཧᜰ꙰ꦿ𝑫𝒆𝒔𝒕𝒆𝒍𝒍𝒐𝒔 𝒆𝒔𝒄𝒂𝒓𝒍𝒂𝒕𝒂𝒔.ཧᜰ꙰ꦿ
Fanfiction¿𝘚𝘦𝘳í𝘢 𝘱𝘰𝘴𝘪𝘣𝘭𝘦 𝘲𝘶𝘦 𝘦𝘭 𝘨𝘳𝘢𝘯 𝘋𝘪𝘰 𝘉𝘳𝘢𝘯𝘥𝘰 𝘴𝘪𝘦𝘯𝘵𝘢 𝘢𝘮𝘰𝘳 𝘱𝘰𝘳 𝘶𝘯𝘢 𝘴𝘪𝘮𝘱𝘭𝘦 mujer? ⭐Contenido de Jojo Bizarre Adventure.⭐ 🌟Personajes de Hirohiko Araki.🌟 ❤Contenido de Dio Brando.❤ 🔥 Advertencia: en algunos...