The soulmate, Percy Jackson Fanfic

El ataque

POV tercera persona:
Cuando Brooke entró en su casa notó que algo no estaba bien, se supone que a esa hora su abuela estaría en casa, pero no había rastro de ella por ningún lado.

-A lo mejor salió a dar un paseo- pensaba la castaña en su habitación, pero no parecía ser el caso, pasaba el tiempo pero no había ni rastro de su abuela.

Intentó llamarla, pero no respondía así que lo volvió a intentar pero esta vez con su hermano, ninguno respondía al móvil.

Preocupada decidió salir a buscar a su abuela, levantándose se acercó a la puerta. Unos segundos antes de alcanzar el pomo, un fuerte estruendo se escucho desde la entrada.

-Cariño ya he llegado- esa era la voz de su abuela, pero había algo raro en el tono, como si mezclaran el timbre de su voz con unos gruñidos.- No te vas a creer la cola que había en el supermercado, ahora entiendo por que a tu hermano no le gusta salir de su habitación.

En ese momento Brooke supo que la persona detrás de la puerta no es su abuela, su verdadera abuela nunca iría al supermercado por su propia cuenta, ella odia todo lo referido con la compra de alimentos y siempre manda que ese recado lo hagan su hermano o Brooke.

Tras la puerta su falsa abuela seguía hablando de como fue su día y su voz comenzaba a volverse más grave y los gruñidos más altos.

Silenciosamente Brooke cierra la puerta con pestillo y se aleja lentamente. Una vez frente a la ventana intentó abrirla, pero esta permanecía inmóvil, como si una fuerza superior la mantuviera en su sitio.

Su corazón latía fuerte en su pecho y el miedo la comenzó a envolver, no tenía ni idea de lo que estaba pasando.

El ser que se había hecho pasar por su abuela intentó abrir la puerta bloqueada, un par de veces después se dio cuenta de que no abría y un cuerpo comenzó a golpear la puerta con intención de tirarla, lo peor es que lo estaba logrando.

Pese al miedo Brooke buscó por su habitación cualquier cosa con la cual pudiera defenderse, no había mucho excepto una raqueta de tenis por lo que la cogió y se escondió dentro de su armario, justo a tiempo por que en ese momento la puerta de su habitación calló al suelo.

Desde su escondite Brooke pudo ver a un ser parecido a su abuela pero un poco más alto y robusto. El monstruo olfateó la habitación y de manera inmediata giró su cabeza al armario.

Antes de que Brooke pudiera reaccionar una mano callosa la agarró de los pelos y tiró con fuerza, alejándola del armario. Cuando estuvo frente a la criatura no pudo evitar el gemido de terror que escapó de su boca, su cara parecía hecha de plastilina y se comenzaba a derretir mostrando un rostro horroroso con unos afilados dientes amarillos y un único ojo en medio de la frente.

No pudo hacer nada para defenderse antes de que el cíclope la arrojara con fuerza contra la pared. Brooke notó como la sangre caía desde su sien, no entendía que estaba pasando.

No pudo moverse y la criatura aprovechó esto para golpearla con su enorme pie un par de veces, la castaña podía sentir como se le rompían las costillas y cuando pensó que finalmente iba a morir escuchó un grito del cíclope.

Con dificultad levantó la vista y pudo apreciar como el monstruo desaparecía en polvo dorado y como frente a ella se hallaba su alma gemela con una espada y una mirada que podría aterrorizar incluso al más valiente.

Percy la miró y de forma automática tiró la espada, acercándose a ella con miedo en sus ojos.

-No no no, tranquila cariño, todo está bien, no cierres los ojos- murmuraba nervioso el azabache. Su corazón se apretaba al ver el estado en el que se encontraba la castaña, no podía evitar culparse por llegar tarde.- Te voy a llevar a un lugar donde vas a estar a salvo.

La levantó en estilo nupcial sin esfuerzo y corrió hacía fuera, ya era de noche, por lo que las persianas de las casas estaban bajadas, como si nadie hubiera notado la pelea que se llevó a cabo en aquel apartamento.

-¡Blackjack!- Exclamó Percy, acunando con delicadeza a la castaña en sus brazos.

Un pegaso negro surgió del cielo, camuflándose en la oscuridad de la noche- ¿Que pasa jefe? ¿Quien es esa bonita chica? ¡Estas secuestrando mujeres! Yo no voy a tener nada que ver sin no hay una buena ración de donuts.

Percy se subió con rapidez al equino, maniobrando para mantenerse estable y aguantar a su compañera con cuidado.

-Blackjack necesito que nos lleves de inmediato al campamento, ve lo más rápido que puedas- el pegaso notó la urgencia en su voz por lo que dejó de divagar y de forma rápida voló hasta su destino.