Yoongi había despertado de buen humor, él estaba seguro de que iba a ser un día extraordinario.
Se levantó de la cama, se metió al baño y tomo una ducha bastante larga, últimamente se sentía muy estresado con su trabajo, habían demasiados casos que no había resuelto y el tiempo avanzaba muy rápido.
Después de divagar en la ducha por 10 minutos salió y se dirigió al clóset que tenía. Escogió su mejor traje, zapatos cómodos, se puso uno de sus costosos relojes, una fina corbata y roció un poco de perfume en su cuello.
Fue a la cocina y se sirvió un vaso de leche de almendras con una tostada, eso fue lo único que desayunó, sus ansias por ver a Seokjin eran más grandes.
Salió del departamento, subió a su auto y se dirigió al bufete.
Mientras estaba en su auto pensaba en su suerte. El mundo era un pañuelo, los investigadores habían perdido el rastro de Jin hace dos meses y tan solo ayer el destino lo puso en bandeja de plata para él.
Los ruegos que tan desesperadamente había lanzado en la oscuridad de su habitación durante estos dos meses al fin habían sido escuchados. Tantas noches de soledad, tristeza y furia iban a ser compensadas solamente con ver el hermoso rostro de Jin.
El camino al trabajo se le había hecho muy corto, de seguro su Jinnie ya lo estaba esperando.
Al llegar, estacionó su auto frente al bufete y cuando miró hacia la entrada de la firma, vió algo que le revolvió el estómago.
Su ángel le estaba agarrando la mano a un idiota mientras sonreía.
Min sujetó con fuerza el timón y de su garganta salió un gruñido casi animal, estaba seguro de que si no fuera porque aún estaba en el auto, lo hubieran escuchado.
Su respiración se había vuelto fuerte y el corazón se le estaba acelerando y por más que intentaba calmarse, no podía, se sentía enfermo por tener esas sensaciones pero no tenía control de su persona, cuando se trataba de Jin perdía el juicio y nada tenía sentido.
Trató de calmarse, contó hasta diez y salió del auto. Camino de manera acelerada para tratar de interceptar al idiota que estaba con su ángel.
Jin estaba muy feliz, el señor Jung era muy educado y gracioso, sentía que después de tanto tiempo iba a poder tener un amigo.
Se encontraba riendo cuando vio que el señor Min se acercaba a ellos de manera acelerada.
Hoseok se dió cuenta del abrupto silencio, volteo para ver hacia donde miraba Jin y logro divisar a su amigo que se acercaba como un perro rabioso al que le querían quitar su comida.
Puso su mejor sonrisa y trato de aligerar el ambiente.
—Yoongi, justo le estaba comentando a Jin sobre la cena de Navidad que organiza la empresa.
Min lo escudriño con la mirada y pasó por alto el hecho de que Hoseok tuteo a Jin. No quería hacer un escándalo.
—Aún faltan 6 meses para esa aburrida fiesta— Yoongi le resto importancia a eso y sacó un celular del bolsillo de su terno, le marcó a alguien y esperó— Seung, abre las puertas.
Yoongi colgó y miro a Hoseok.
—¿Por qué viniste?
Hoseok puso un falso gesto de ofensa y luego soltó una carcajada.
—¿Acaso no puedo visitar a mi mejor amigo?
Yoongi no contestó y espero a que se abrieran las puertas.
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Psycho (Yoonjin/Sujin/Sin)
Fanfiction(Au) Min Yoongi siendo el mejor abogado de Corea tiene todo lo que un hombre quisiera, dinero, prestigio, poder y sobretodo personas que están siempre a su disposición para cumplir cada uno de sus excéntricos caprichos, prácticamente tiene el mundo...