Fumando tu recuerdo (TERMINADA)

CAPITULO 19 - Un desastre

21 de Diciembre de 2018

Ethan se siente como si fuera nuestra condena de muerte y ya no nos veríamos, cuando solo se ira una semana.

—Dijiste que le comprarías algo a tus tíos ¿Qué le compraste? —dije acomodándome.

Nos reunimos para hablar, ya que mañana se iría de viaje. Este parque es testigo de muchos momentos, lágrimas, risas, historias. El parque donde quedamos en vernos por primera vez lo cambiamos ya que tengo una fobia inmensa a los animales, y ese parque era muy habitado por palomas, lo cual me asustaba y a él le parecía tierno. Además este parque es más pequeño y casi nadie lo visita.

—Aún no sé qué darles y mañana me voy en la mañana.

Mi mente dio vueltas y recordé que su tía trabajaba en una pastelería.

—Ven, levántate, vamos.

— ¿Qué? Pero si acabamos de llegar.

—Vamos, tenemos que hacer cosas.

—No, hay que quedarnos aquí sentados hablando.

Me estaba costando demasiado levantarlo.

—Bueno, entonces me voy y nos vemos dentro de 1 semana, Ethan.

Rápidamente se levantó y me siguió el paso, reí al sobornarlo con eso. Ethan llevaba hablando todo el camino de FRIENDS y lo tanto que le encantaba, cual es su personajes favorito, y que se amaneció viendo la primera temporada, me gustaba verlo tan emocionado, parecía un niño hablando de su día favorito y lo bien que se la paso.

Todos los niños tienen un objeto favorito, ese juguete al cual se aferran. ¿Qué es lo más atesora Ethan?

Cada vez que me recostaba en su pecho y esta no sería la excepción, sentía el frio metal en mi mejía. Un collar con las iniciales de todos los miembros de su familia, incluido Zeus.

Sé que lo de Zeus aun lo marcaba, no conseguiría un nuevo perro. Lo más valioso no se puede reemplazar, ni con mil cosas.

Estando aquí en el carro oliendo al típico aromatizador de fresa, con la ventana abajo dándome todo el aire fresco a nuestro rostro, con el peso de su brazo alrededor de mi espalda, sintiendo de nuevo el frio del metal de su collar. Después de comprar todo lo necesario, después de que acompañara, justo en este momento pensé en mi pasado.

Y en que tal vez debería continuar mi vida, el pasado, solo es eso. Pasado

— ¿Por qué compramos todo esto?

Me apure al bajar y voltee y se le cayeron las bolsas que compramos, se frustro pero vi como recogía con toda la paciencia del mundo, visualice por el rabillo de mi ojo al conductor y su molestia, así que lo ayude para ahorrarme seguir viendo a este hombre y como nos aborrecía.

—Ves que cuando haces algo de mala gana, te sale mal. Bien decía mi madre, el holgazán tiene doble trabajo. —lo reprendí.

—Ahora sí, dime ¿Porque compramos esto? —le intrigaba pero le índice con un momento de cabeza que deje todo en la cocina.

—Buenas tardes, Mónica. —salude sonriendo a su madre que estaba sentada en la mesa con una fila de folder y hojas.

—Hola, cielo. —respondí con los ojos fijos en sus hojas.

Escuche una puerta cerrarse.

— ¡Brianna! —vino corriendo a mí Aida con una sonrisa tan cálida como rayos de sol.

—Hola, preciosa. Vaya vez que te ves mejor sonriendo. —me agache un poco para abrazarla.

—Hola hijo. Hola hermano. Digo, nada más, les recuerdo que yo también vine. —dijo Ethan, detrás del mostrador de la cocina, sacando todo.