Fumando tu recuerdo (TERMINADA)

CAPITULO 3 - La realidad

Me hacías escapar de la realidad, pero todo eso tenía que cambiar...

— ¿Por qué llegas tan tarde? —preguntó mamá al verme entrar por la puerta.

—Quería comprar un libro. —respondí, sin tomarle tanta importancia y caminando directo a mi habitación.

—Excusas, seguro te has ido andar por ahí y no te dio la gana venir. —ni siquiera me miró al decirlo, sabía que vendría el caos, era cuestión de esperarlo.

—Si no me hubiera dado ganas de venir, no estaría aquí ¿No crees? —volteé a verla algo indignada por la farsa que ella sola se inventaba.

— ¡No me respondas así! —vocifero, di un brinco por la sorpresa de su repentino cambio.

—No te respondí de mala manera, ni con otra intención, solo me defendí de las acusaciones que me estás haciendo. —Tal vez no debí responder así, pero no me gusta que me acusen.

—No te quiero ver, ándate a tu cuarto. —Volvió a fijar su vista en el celular.

Esta era yo, no tenía la familia perfecta, mi mama no es lo que uno ve en las películas. Esta es la realidad, hay que aprender a vivir y ser fuertes. Mi padre no se lo pasaba en casa, era un hombre más de trabajo. Soy la última hija de 4 hermanos, mis padres están en una edad avanzada. Es lógico que yo no reciba la atención que espero.

***

Me quedé dormida toda la tarde... 9:45 PM. Saqué mis cuadernos de mi mochila para hacer mis tareas. Pero recibí una llamada de Gabriela.

{En la llamada}

—Brianna, ¿Cómo estás?

—No hay mucho que decir, tengo tarea. —y no quería hablar con nadie.

—Pero si no hay tarea para maña...—tuve que interrumpirla.

—Escucha, tengo cosas que hacer. Te veo mañana en el colegio. —y corte la llamada.

No tuve ganas de hablar con ella. Escuché como ella se reía mientras me molestaban. A pesar de que ella sabía que me afectó y estaba llorando, ningún apoyo me dio. Y me sentía algo decepcionada por eso. La única amiga que yo creía que tenía, no estaba en mis peores momentos, y un extraño si lo estuvo. Hablando de eso, Ethan...

No, tenía que concentrarme en mi tarea y no volver a pensar en él, es solo un chico que conocí hoy, un chico increíble, divertido, atractivo.

No, ¡Basta! Concéntrate Brianna.

Después de 1 hora que hice la poca tarea que me dejaron, no tenía gran parte que hacer, no tenía hambre. Pero me preparé una taza de café para ponerme a leer.

Me senté en mi cama, le di un sorbo al café, y comencé a leer, hasta...

{En WhatsApp}

— ¿Estarás libre mañana? —recibí un mensaje de un número desconocido.

¿Pero qué rayos? De quien era este número y por qué me hablaba casi a media noche. Seguro se equivocó, deje mi celular a un lado y solo lo ignore.

— ¿Estas, Brianna? —y ahí estaba de nuevo un mensaje del desconocido. Pero debe conocerme ¿Cómo sabe mi nombre?

—Hola, desconocido. —quería leer, la única opción era contestarle.

—Soy Ethan.

—Debiste empezar por tu nombre, pensé que eras un secuestrador.

—He estado pensando en secuestrarte. — ¿Que fue eso?