Outbreak // XiaoDery - WayV

twenty - zhuāngzǐ paradox

umo - rocking horse

(ambivalent)

De ahí en más, cada momento es de ensueño: empacando solo lo necesario, se lo lleva consigo apenas amanece, cruzando el jardín de la casa sin mirar atrás, sin siquiera dejar una nota de explicación o de despedida. Xiaojun dice que es mejor si se van rápido, casi como si se hubieran esfumado de la faz de la tierra, y él también lo cree así. Transita por las calles de Shanghái con Xiaojun de la mano; siendo tan temprano la gente no los mira raro y ni siquiera parecieran reparar en su presencia, o en la conexión que los une. Lo prefiere de esa manera, mientras el casi imperceptible traqueteo del metro arrulla a Xiaojun, tanto así que le ofrece el hombro para que apoye la cabeza y duerma, cosa que él hace gustoso. Lo observa durante todo el viaje, sosteniendo a la vez su mano sana.

Cuando duerme, tal como ha presenciado la noche anterior, se ve bellísimo.

Se siente tan cansado que su vista se vuelve difusa, pero logra mantener la dirección de sus pasos de manera inequívoca, guiándolo, sin que Xiaojun se muestre ni una pizca de sentirse asustado o alterado ante el hecho de estar caminando por fin fuera de los límites de la que ha sido su prisión silenciosa por mucho tiempo, hasta que por fin llegan a destino.

Una vez dentro del departamento, recibe su abrazo emocionado. Lo hicieron. Lo han logrado. Aún está un poco aturdido cuando Xiaojun lo besa y declara, con las pupilas más brillantes que nunca, que es el día más feliz de su vida. Observa su pequeño cuerpo investigando en cada rincón del departamento, con una de esas sonrisas antes tan escasas iluminándole el rostro, comentando con la curiosidad propia de un niño las cosas que le van llamando la atención. Deja que investigue y se sienta en el único sofá que tiene, de color blanco. Se pasa la mano por los ojos, restregándolos; el cansancio junto con la sensación difusa no se va, y sabe que no son más que el producto de todas las cosas por las que ha tenido que pasar en el espacio de menos de veinticuatro horas.

Pese a todo, está feliz. Lo confirma cuando Xiaojun deja de explorar para volver a su lado, y aprovecha aquel momento para besarlo una vez más. Sosteniéndolo de la cintura, sus narices rozándose, aprovecha de preguntarle cómo es que ha logrado mantener la calma durante todo el trayecto que, si bien no es largo, ha estado plagado de las personas que se desplazan hacia su trabajo.

"Confío en ti, ¿no te lo dije anoche? Es suficiente para estar tranquilo... y feliz"

Vuelve a besarlo, acción que se repite varias veces en el día y que siempre termina por hacer brotar una sonrisa en el hermoso rostro de su amado. Esa misma sonrisa se ensancha cuando hace pequeñas cosas por él: al servirle el desayuno, cocinarle el almuerzo o prepararle una contundente cena; al dejarle la mitad del armario disponible para que guarde las pocas pertenencias que ha podido traer desde casa; al atender la herida de su palma izquierda y cambiarle el vendaje.

Sonríe como nunca cuando, ya habiendo anochecido, ambos acostados en la misma cama y mirándose, hace una pregunta que no ha dejado de carcomerle los pensamientos, esperando ansiosamente una afirmativa.

"¿Quieres que seamos novios, Xiaojun...?"

A punto de recibir su respuesta, el corazón comienza a latirle progresivamente más fuerte. Piensa que solo es el nerviosismo, pero pronto siente un nudo apretándole la garganta; al mismo tiempo, la visión se le turna aún más borrosa. Intenta mantener los ojos abiertos, pero se transforma en un acto doloroso, con los párpados pesándole tanto que parecieran estar hechos de plomo.

La garganta le duele. Todo se distorsiona.

Lo último que alcanza a ver es que Xiaojun ya no sonríe, y cae rendido antes de escucharlo.

Al abrir los ojos, le falta el aire.

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zhuāngzǐ paradox: la historia más famosa del libro "zhuāngzǐ", un libro ancestral de filosofía y literatura china, habla acerca de zhuāng zhōu y la oportunidad en la que soñó ser una mariposa, libre, sin saber que era zhuāng zhōu; cuando despertó, se encontró con que era en realidad zhuāng zhōu, pero no supo si acaso él mismo era zhuāng zhōu que había soñado con ser una mariposa, o una mariposa que estaba soñando que era zhuāng zhōu. esta paradoja representa una manera de ilustrar el denominado "argumento del sueño", en donde los filósofos postulan: "¿es acaso posible estar seguro, en cualquier momento, que no se está más que en un sueño? ¿es posible permanecer en un sueño perpetuo y nunca experimentar la realidad de estar despierto?"

¡Hola! Nuevo capítulo, de menor extensión de lo normal, pero que tiene su razón de ser. Espero que de todas formas les haya gustado, muchísimas gracias por todo el apoyo y los comentarios <3 ¡Saludos!