Relato 15.

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Lamentablemente, empezamos a darnos cuenta de que realmente estamos solos cuando al tener una inquietud o una alegría acudimos a una misma persona siempre. Esa cantidad de gente que suponíamos estaría siempre algún día ya no está; ¿El motivo? Encuentran en otras personas lo que en vos ya no hay, lo que en vos ya usaron. Hoy por hoy somos una plaga de ideas que mientras son buenas se aman, pero que el día que cambian y problematizan lo que sienten se empiezan a odiar. Me siento así, como una plaga de ideas malas que son odiadas por gente que antes supuestamente me amaba. Pero no importa como decidamos problematizar o que tipo de plaga ser, siempre alguien te ama y la mayoría te odia. Querida plaga de ideas, me encantaría decirte que no estas sola y que solo te hace falta encontrar que alguien más ame lo que tu alrededor odia.

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