Capítulo 9
Al llegar al lugar de la fiesta todos estaban esperando a Cassia con enormes sonrisas y abrazos, los niños estaban listos para empezar a correr y disfrutar con todo el gran castillos inflable que trajeron los lobos, incluso trajero un conjunto de juegos seguros para que pasen el rato. Fue imposibe que Cassia terminara de saludar a sus invitados, pues a la primera que pudo salió corriendo y cuando volvimos a verla estaba metida en los juegos riendo. Killiam y yo nos quedamos muy cerca, vigilandola desde cierta distancia mientras compartiamos con nuestro amigos y familia un momento agradable.
Después de cantarle el feliz cumpleaños todo pasó demasiado rápido, la noche llegó muy a pesar de mi pequeña Cassia quién tuvo que dejar los juegos de lado para que nos regresemos a la casa, no sin antes despedir a sus invitados. Estaba cubierta de tierra y lucia muy cansada, en definitiva este había sido un día increíble para ella.
-Papá-susurró, en el cuello de Killiam quién la llevaba a cuestas a la planta alta- quiero jugar.
-Primero deberías bañarte, ¿No te parece cariño?-respondió este guardo una pequeña risita.
Ella estaba agotadisima, apenas si podía abrir los ojos del cansancio que cargaba. Killiam la llevó hasta el baño donde previamente le había preparado una tina con agua tibia. Mientras la bañana ella estaba diciendo cosas semi dormida, no parecia ser consciente de ello pues todas eran frases en latín, la que más me quedo fue: . Mentiría si dijera que no me sorprendio, pensé en ello todo el rato, incluso mientras le cantaba como cada noche para augurarle buenos sueños.
Killiam siempre esta conmigo cuando la acostamos, su rostro demostraba preocupación, evidentemente su lobo se habia percatado de que algo no andaba bien, este nivel de conexión entre los dos facilitaba muchas cosas. Luego de asegurarnos de que estuviera completamente dormida, fuimos a nuestra habitación, donde los ojos del lobo me interrogaron dulcemente.
-¿Qué ocurre? Luces preocupada.
-Nuestra niña es especial-susurre, aun con las palabras grabadas en mi mente.
Killiam me miró como si no comprendriera.
-Susurra cosas estando dormida, probablemente entra en un trance sin notarlo. Tiene talento natural-comencé a decir cuidando mis palabras para no alarmarlo- va a ser muy poderosa.
-Bueno, teniendo unos padres tan geniales como nosotros, no me esperaría menos-dijo en un tono más relajado, aliviando un poco el ambiente.
Me acerqué para besarlo y susurrar contra sus labios tres palabras especiales.
-¿Qué fue eso?
-Un hechizo para amarrarte a mi por la eternidad-bromee, al tiempo que le daba una pequeña invitación para tomar un baño juntos.
Dos días después de la fiesta de Cassia, me encontraba lista para empreder viaje con Edmun y su gente, Killiam estaba bastante nervioso con la situación o mas bien su lobo no estaba muy feliz por el hecho de que vaya de viaje con otro alfa. Despedirme es más difícil de lo creí.
ESTÁS LEYENDO
La Magia del Invierno
RomanceSegunda parte de "El invierno en tus ojos" Nubia y Killiam comenzaron su flamante vida de recién casados, con una manada que dirigir y peligros más allá de los enfrentados hasta el momento. La oscuridad tiene muchas formas de presentarse. ¿Podrán e...