Después de olvidar, o casi, la terrible pesadilla del día anterior el rubio no pudo evitar remolonear en su cama, puesto que en ese momento no le apetecía entrenar si no era con Uraraka. Y como ella seguía durmiendo, se acurrucó a su lado, como un gatito buscando calor, ella, en sueños le abrazó con mucha ternura y amor.
Este, ante el contacto de los suaves brazos de ella rodeando y atrayendo lo a su cuerpo, no pudo evitar sonrojarse... Se acercó más a la muchacha de cabellos castaños y le brindó un ligero beso en la frente, la amaba muchísimo, más que a cualquier otra cosa.
-Te quiero, Cara de ángel. - susurró para la mujer que dormía junto a él.
Pasó el tiempo y este al final se acabó durmiendo, tranquilo, de que ella no se hubiera esfumado, de que ella no hubiese desaparecido o le hubiese dejado, para siempre y tener que vivir con la desgracia de que no fuera con ella, pero nada de lo que él había temido que pasase pasara en ningún momento pasó, estaba con ella y Uraraka no se iría a ningún lugar que no fuera con Bakugo. Ella seguiría para él y él seguiría para ella, hasta que casados, con hijos y con nietos murieran felices, el uno al lado del otro.
Cuando Ochako despertó y consiguió salir del fuerte abrazo que le brindaba el muchacho de olor de caramelo, le sonrió, se vistió con el fin de ir a entrenar, y aunque las vacaciones ya habían llegado y había obtenido muy buenas calificaciones gracias a la ayuda de Katsuki, debía seguir entrenando, para en unos años patearle el trasero a todos los villanos que asolaran Japón.
-Gracias Katsuki. - Le susurró, le dejó una nota a él diciéndole que estaba entrenando donde solían entrenar y justo antes de salir se acercó a Bakugo para depositar sus labios sobre su frente.
Abrió la puerta de la habitación con cautela de no despertar al rubio y cerrarla tras de sí.
Cuando Blasty despertó por segunda vez en el día fue por no notar el cálido abrazo que le brindaba Ochako hace unos minutos, abrió los ojos con lentitud e hizo un pequeño bufido al no encontrar la cara redonda de su novia. Segundos más tarde encontró sin esfuerzo la nota que le había dejado ella, ya que estaba en el lado de la cama en el que ella había dormido.
La leyó y tomó rumbo a la sala de entrenamiento para que cuando cruzara la puerta divisara con claridad a una muchacha de cabellos morenos y tez clara haciendo abdominales y sentadillas. Bakugo, aunque no lo admitiera, amaba verla entrenar y podría pasarse horas allí pero Uraraka le vio por el rabillo del ojo.
-Katsuki, ¿no debería el futuro héroe número uno ponerse a entrenar también? O... ¿No será que está flaqueando? ¿Bombitas está perdiendo facultades? - No pudo evitar reírse por lo que ella misma dijo ¿y Bakugo? Digamos que este se puso como un tomate en el momento que descubrió que lo habían descubierto, sin embargo, Ochako le había visto desde que había puesto un pie en la sala de entrenamiento.
Bakugo se puso al lado de la joven para sonreírle con picardía y entrenar también, los dos sabían que no deberían hacer eso, ya que aunque en teoría no había problemas con entrenar con alguien, y menos con su compañero de entrenamiento, Aizawa les había dicho que era mejor que a partir de ahora todos entrenará en diferentes horarios y en diferentes lugares para que en el festival deportivo unos no tuvieran ventaja sobre otros.
¿Y cuando será el evento al que vuestros papis asistieron?
Esa es una pregunta fácil de responder, el festival deportivo, al cuál sólo faltaban un par de días para que diera comienzo.
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FRÁGIL [kacchako]/[Bakuraka][PENDIENTE POR EDITAR]
Fiksi Penggemar¿Qué parte de ella es frágil? Katsuki pensaba esa pregunta cada vez que ponían en duda la capacidad de la Cara de ángel. A Uraraka le gusta Deku, sin embargo el peliverde ya siente algo por alguien más. Katsuki le demuestra que el único que existe...