13. Feelings and confessions

678 95 53
                                    

— ¡Yangyang donde estas! — Kunnhang gritó

Eran las seis de la mañana a solo unos minutos para que sean las siete y todo ya era un desastre dentro de la casa.

Chittaphon estaba ayudando a buscar Yangyang quien no se encontraba en ningún lado de la casa, no estaba en el cuarto de su madre, eso había vuelto locos al par de amigos por un momento.

— ¿Porque no buscamos en el baño? — Hendery se dirigió a Ten.

Los dos rápidamente buscaron las llaves, caminaron rápido a todos los baños de la casa, no estaba en el principal y ni en el suyo, solo falta el de su madre.

Chittaphon introdujo la llave dentro de la cerradura y dio la vuelta de esta, Yangyang estaba allí acostado en la bañera. Su ropa estaba tirada en una esquina del baño y el están sumergido en la tina.

— Tráeme una toalla, ¡por favor! — Hendery le hablo a Chittaphon.

El mayor revisó los cajones del baño encontrando una tirándosela a su amigo. El peli negro lo levantó lentamente y envolvió su cuerpo con la toalla sacándolo de allí para sentarlo en una silla.

— ¿Te encuentras bien? ¿No pasó nada?

— Si, no fue nada sólo me quede dormido en el agua no hagas drama — el peli naranja hablo con una voz toda adormilada.

— Pudiste agarrar un resfriado — Chittaphon interrumpió la conversación.

— No es la gran cosa. — Yangyang colocó bien la toalla en su cuerpo y buscar como cambiarse para pasarla más cómodo, dejando a sus sus amigos sin habla.

— Mira el lado positivo no se tiene que bañar, en cambio nosotros si — Chittaphon dejo el baño para preparar el supuesto desayuno con sus amigos, los tres sabían que terminarían optando por pedir comida.

Se sentía cansado, lo estaba. No era de beber tanto ya que según el no se le daba andar haciendo esas cosas, pero algo había salido de su control y terminó experimentando cosas que nunca estando consiente hubiera hecho. Robar un beso y darse un baño, si esa había sido su actitud ebrio estando sobrio debe ser un desastre por la resaca.

Abrió su armario y buscó en los cajones de este la ropa más cómoda, sacando una sudadera y un pantalón de chandal.

Sabía que Xiaojun vivía algo cerca por donde el, por lo que decidiría ir. Ya conocía bien la dirección solo esperaba que se encuentre en su casa.


☼☼☼☼☼


Dejun despertaba de el sueño tan profundo que tenía. Era un domingo a las 2 de la tarde, tenía todo el día para pasarla tranquilo ya que pensaba que era bien temprano.

La fiesta no estuvo nada mal, deseaba encontrarse con Yangyang para aclarar las cosas, quería saber si había un porcentaje de noventa y nueve para poder tener una relación con el, recientemente se había dado cuenta de eso y no quería perder las esperanzas de que pudiera pasar.

Y el porcentaje que sobraba lo quería unir para así lograr un cien por ciento seguro y sin desilusiones, pero allí estaba el un por ciento que le decía qué tal vez no lo quería, que debía tirar todo eso a la basura y mirar la realidad.

Pensamientos así siempre lo mataban, si no eran por inseguridades que tenia ya sean de su cuerpo, notas académicas, como vestía aunque eso dependía de su ánimo y lo que gente pensaba de él. No solía prestar mucha atención a aquello pero por un distinta razón se encontraba así y el bien los sabía. El miedo simplemente lo recorría por dentro destruyéndolo, tenía miedo de ser rechazado, nunca lo había experimentado pero podía jurar que dolería.

Mutual senses ; XiaoYangDonde viven las historias. Descúbrelo ahora